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Robar con la ley en la mano.

by Julio Alonso

El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española define la palabra manipular como: Intervenir con medios hábiles y, a veces, arteros, en la política, en el mercado, en la información, etc., con distorsión de la verdad o la justicia, y al servicio de intereses particulares.

Actualmente una forma de delinquir de los funcionarios del sector público y diputados del congreso estatal es robar ya sea:

  1. A) Manipulando las enormes lagunas e imprecisiones de las leyes (frecuentemente aprobadas con fracciones de la ley donde se permite hacer lo prohibido) y
  2. B) Cuando controlan los consejos técnicos y/o juntas de gobierno, en donde los integrantes se autorizan para ellos mismos beneficios personales “maquillados” de ser necesarios para operar el organismo a su cargo. Lo que les da el poder sin que nadie los cuestione (este acto corrupto se da sobretodo en las entidades autónomas partidas ya sea para equipo, sueldos altísimos y fuera de toda proporción que marca la decencia, bonos, gratificaciones, compensaciones, becas, ayudas, o viajes para ellos mismos o sus familias,). Agregue usted que lo hacen partiendo de su lógica de que si todo el mundo lo hace, se justifica que también ellos roben (y que no es pecado a los ojos de dios). Actualmente, la comisionada Yoli García ya está en el camino de pagar las cuentas a la sociedad, pero también faltan los comisionados José Rubén Mendoza y Arturo Mariscal Rodríguez, que también disfrutaron de las canonjías de ser comisionados del IVAI. Aunque griten inocencia y que no se robaron nada, en realidad tienen cuentas que rendir al pueblo Veracruzano, ya que también disfrutaron del viaje a Sevilla sin estar justificado, este viaje. Lo anterior se da, sin importar que el IVAI tenga sentencias de laudos con varios años de antigüedad con muchos ex empleados por una cantidad de muchos millones de pesos. Y se deba la renta de años del edificio que ocupa el IVAI. Estos dos comisionados del IVAI renunciaron casi corriendo, de puro miedo a terminar como su presidenta, ya que abusaron de la interpretación de la Ley en su beneficio.

Lo anterior es un ejemplo de lo que sucede en los organismos autónomos donde se roba a manos llenas, poniéndose sueldos altísimos y muchas prestaciones excesivas sin que se justifiquen. Un ejemplo, de cómo se frena el avance de la transparencia en beneficio de sus “amigos” e intereses, son los recursos de revisión presentados por los ciudadanos veracruzanos, que tardan en promedio 5 años para ser resueltos, a pesar de que la legislación considera que no deben exceder de mes y medio. Por lo que la información solicitada en la mayoría de los casos será obsoleta cuando finalmente la entreguen.

Es una burla su Código de Ética, aprobado por ellos mismos,  que ni vale la pena analizar, ya que dice mucha paja, y los primeros que no la cumplieron son los ex comisionados oportunistas, vividores o como usted  guste llamarlos a estos parásitos de la sociedad veracruzana, con acciones que si bien las lagunas de la leyes y reglamentos lo permiten, no dejan de ser inmorales.

Cosas similares pasan en el congreso veracruzano, donde los diputados tienen diferentes pagos que desmienten que ganan solo un “sueldo”, y un ejército de “empleados” que cobran sin hacer nada, simulando una actividad, ejemplo de esto es la enorme cantidad de gente “recomendada” en la biblioteca del congreso, la cual muy poca gente sabe de su existencia.

Lo anterior es un ejemplo, que refleja los como los “responsables” de estos elefantes blancos se benefician de los recursos públicos de Veracruz.

La reflexión es suya, hasta la próxima.

 

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