Iniciamos el mes decimocuarto del bienio, mal o bien llamado “del cambio”, con información muy similar a la que se dio cuando inició el presente bienio yunista.
Información referente a los “odiosos medios de comunicación”. La que en aquella ocasión fue amenazante para “todos”, pues por la forma en que se hizo referencia a éstos, no solamente era en el tenor de que no importaba lo que publicaran, pues eso no era importante -por lo menos para el sujeto que lo dijo- sino que también lo mejor era que desaparecieran, para lo que se iniciaron acciones que se continúan llevando a cabo.
La referencia anterior viene al caso, debido a que el eficiente y serio Instituto Veracruzano de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (IVAI), por medio de su Consejo General, ordenó a la Coordinación General de Comunicación Social (CGCS) de la actual administración estatal, que tiene a su cargo el ineficiente Elías Assad, dar a conocer.
Como en su momento se trató de hacer del conocimiento de la población veracruzana, el actual microgobierno yunista al iniciar, debido a la situación de quiebra financiera en que heredó las finanzas de esta entidad, anunció que no tenía dinero ni para lo más elemental, como lo demostró al no pagar a proveedores, sueldos, pensiones y otras prestaciones de los trabajadores estatales y municipales y por tanto tenía que ahorrar lo más posible, siendo uno de los aspectos económicos a recortar, los gastos en comunicación social.
Acción que la mayoría de la población no lo vio mal y lo más grave, lo creyó. Y es aquí en donde toma relevancia el inteligente ordenamiento del Consejo General del IVAI, que consiste en que la desprestigiada Coordinación de Comunicación Social junto con su también desprestigiado titular, dé a conocer los contratos y facturación que ha llevado a cabo con la red social Facebook, durante algunos meses del pasado “ahorrador año 2017” -recuerde que no había dinero ni para sueldos y pensiones- Pues en el portal de la citada dependencia gubernamental estatal las cosas no aparecen como debe de ser, en otras palabras, como la marca la legislación correspondiente, lo que seguramente como se trata de transparentar gastos llevados a cabo con dinero del erario, o sea la lana de la empobrecida población de este saqueado Estado, va a ser muy difícil que aparezca totalmente transparente.
Pero si un ordenamiento que aparentemente no representa un gran gasto no lo han podido dar conocer, imagínese estimado lector, que sucedería si se les ordenara publicar lo que desde hace catorce meses han estado gastando en medios de comunicación nacionales, como se aprecia al escuchar los principales noticiarios de radio y televisión de cobertura nacional.
Así las cosas en el aspecto de ahorrar dinero en comunicación social de parte del minigobierno yunista. Gasto que si se comparara con alguno de los años de ejercicio de gobierno de la llamada “docena trágica”, seguramente sería muy similar, si no es que mayor.
Esperemos que a la brevedad el encargado de la Unidad de Transparencia de la CGCS, pueda, o mejor dicho, le permitan corregir esta grave falla, pues de no ser así, él será sancionado como se lo dijo uno de los consejeros del IVAI, pero lo más grave del asunto, que la administración del mal o bien “llamado cambio”, no sabremos cómo fue el cambio: bueno o malo. Usted que OPINA al respecto estimado lector. Hasta el lunes. [email protected] (Fech. Púb. Vier. 2-febrero-18)
