“De vez en cuando di la verdad para que te crean cuando mientes.” – Jules Renard.
Vaya campaña política la que nos estamos recetando las y los veracruzanos.
Como nunca antes en la historia de Veracruz, la “guerra sucia” o “campaña negra” se ha desatado en contra de una sola contrincante.
Sus efectos, aparentan haber hecho mella en la línea de flotación de su proyecto, sin que la parte opositora cuente toda la verdad en realidad.
Resulta ser amables lectores, que aun cuando el Frente Opositor ha mantenido sus dichos de descalificación sobre los resultados de las encuestas y mediciones demoscópicas, algunos datos vitales se los ha reservado para sí.
Resulta pues que todos los equipos políticos emplean el uso de encuestas y mediciones, con base en ello, se planea, se programa y se ejecutan acciones.
Es decir, siempre habrá dos clases de encuestas, las que se utilizan para tener certeza de cómo se va realmente –que por lo regular no se difunden y son para el consumo interno de los equipos y candidatos- y las otras, las que se realizan para presumir y para afirmar que se va adelante o que ya se alcanzó a determinado candidato.
La guerra de lodo desatada descalificando a la candidata de Morena y aliados, en la persona de Rocío Nahle García ha buscado contener la posibilidad de que su victoria sea por inclusive más de treinta puntos.
Hasta ahí todas las casas encuestadoras coinciden, ella es la puntera por mucho, y su marca Morena, es más poderosa aún.
Ante ello, la oposición que encabeza Pepe Yunes Zorrilla y la parentela, han tenido que echar mano del viejo recurso de descalificar y repetir la mentira hasta intentar convertirla en verdad, para así de alguna manera lograr arrebatarle algunos puntos al puntero.
Pero recordemos que en este proceso electoral dos factores más están en juego, uno un candidato más, que es el representante de Movimiento Ciudadano (MC), Polo Deschamps y un porcentaje considerable de personas que han optado por no reconocer abiertamente su intención de voto.
Ello hace aún más complicado el escenario para la Coalición PAN, PRI y PRD, que ya no sabe qué más inventar para poder detener la que en los hechos será una victoria cantada y aplastante.
El tan solo imaginar que un personaje construido de la chistera –Arturo Castagné- como el mejor agente secreto del mundo –por encima de todas las agencias de inteligencia globales- pudiera en meses haber recabado la presunta información de acciones de corrupción, enriquecimiento y demás que guste y mande es de risa.
A este hombre superdotado se le debería entregar el reconocimiento más importante del mundo, el Nobel en todas las áreas de la ciencia, pues es capaz de identificar corruptos con la velocidad de la luz, echando por debajo hasta la teoría de la relatividad de Einstein.
Pero le daré un par de datos, con los que estas afirmaciones inverosímiles e irrisorias, que solo compran los que les gusta ser sorprendidos por la sambumbia que terminará por indigestar a más de media sociedad.
Las encuestas reales y verdaderas siempre hacen ejercicios de comparación de marca con y sin candidato.
Ahí es donde las cosas, hacen saber que la realidad no es como la pretenden vender los amanuenses exorcizados por el “Pepismo”, pues a la pregunta de ¿Por cuál partido político no votaría? La alianza se desmorona a pedacitos.
Resulta que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) trae un rechazo de 80%, es decir en números coloquiales, 8 de cada 10 veracruzanos no votaría por el PRI.
Realizada la misma pregunta sin la existencia del PRI, el PAN sería la otra fuerza política con mayor rechazo, al alcanzar un 60% de no intención de voto, es decir, 6 de cada 10 ciudadanos no votarían por la marca PAN.
Ya ni le cuento cómo le va al PRD, que con los datos arrojados se puede estar prediciendo hasta la pérdida de su registro.
Ahora bien, la misma pregunta practicada a Morena, resulta que el 52-54% de los veracruzanos, votaría a ojos cerrados por la marca. Es decir, poco más de 5 de 10 va con Morena.
Aplicada, la misma pregunta con careo de candidatos, Morena y su candidata Rocío Nahle alcanza el 50-52%.
Pepe Yunes a la misma pregunta alcanza un 23%.
Pero el que ha comenzado a mostrar un crecimiento sostenido y acelerado es el candidato de Movimiento Ciudadano (MC), Polo Deschamps a quien ya se le coloca con un 13% de la preferencia electoral.
De continuar la estrategia de descalificación y denostación que nadie compra por parte del Frente Opositor, el beneficiario aparente será Polo Deschamps que en una de esas rebasa a Pepe Yunes y lo envía al sótano de la elección.
Aplicando una repetición del descalabro ocurrido en 2018.
Siendo fríos, alguien le ha venido vendiendo espejito al candidato de la Coalición Fuerza y Corazón por Veracruz, pues, al término de la elección, no habrá de quedar nada del PRI y PRD, quedará aparentemente solo un PAN como fuerza opositora, que habrá de ser controlada única y exclusivamente por un segmento del clan que hoy pretende ganar la contienda con base en la peor campaña difamatoria de la historia.
Al tiempo.
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