La luz al final del túnel que la mayoría desea, aún se ve lejana. Un inicio nuevo, de un régimen desconocido para los mexicanos, cuesta trabajo entenderlo. Con más incertidumbre que certeza, llegamos al nuevo año con gobierno diferente. Los pasados se parecían tanto, que no podían engañarnos dijera la canción. Ahora todo es nuevo y no sabemos a ciencia cierta cuál es el rumbo, sobre todo por las contradicciones. Se reconoce que reculen, en posiciones que alteran demasiado, y que rectifiquen pues eso da cierta certidumbre. Lo que arroja la mayoría en los congresos- tanto de diputados como senadores- sinceramente alarma. No están controlando las emociones y eso perjudica. No hay pretexto que valga. Sus desbordamientos vulgares, ofenden al respetable. Nunca hemos comprendido, por qué no llevan discusiones serias y fundamentadas, sin gritos, manoteos, ofensas y hasta golpes. Diatribas inútiles, en un grupo se supone estudiado y con cultura. Dan un espectáculo deplorable de baja calaña. La política es ciencia y por lo mismo se debe conducir con propiedad acreditada. *** La incertidumbre es cruel. Los mexicanos estamos ya en otra dinámica y sabemos que podemos hacer valer nuestra opinión. AMLO debe recordar que se viven otras épocas de tecnología muy avanzada, de la cual no escapan los medios de comunicación y las redes sociales. Tenemos la convicción, la da nuestra Constitución, que no se pueden violar por decreto personal o de grupo, garantías que costaron muchas vidas. La fuerza de una minoría, no debe ir en contra de las garantías de la mayoría. Hay argumentos que esperamos en el tránsito, los vayan comprendiendo, analizando a profundidad y corrigiendo. Lo primero es el combate certero contra la delincuencia organizada, pues ningún país puede avanzar si sus pobladores están atrapados, encarcelados, limitados y carecen de paz. Existen situaciones que molestan como las amenazas e imposiciones. *** Valiente Tatiana Clouthier- pieza clave para el triunfo de AMLO- al comentar que “eso no fue lo que prometimos en campaña”. Ahí hay coherencia. *** Este año cumplió la columna “Mole de Gente”, 40 años de publicarse (1978-2018) en diferentes medios tanto nacionales como estatales. Agradecemos de corazón a lectores, amigos, familiares, colegas su preferencia. *** Podemos olvidarnos de la política lo que resta del año y ser felices en nuestro ámbito familiar y de amigos. Les deseamos de corazón, unas felices fiestas y próspero año nuevo. La luz al final del túnel, siempre se ve. Nuestra fe y esperanza, se fincan en ello y por supuesto, la defensa irrestricta de nuestro gran México, al cual han querido acabar pero nunca podrán. Somos más grandes que nuestros gobiernos. ¡Felicidades!. Nos vemos en Enero si Dios quiere. *** Y para las agruras del mole…usted sabrá qué tomar. Hasta la próxima.
LA LUZ
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