Todo funcionario público, debe ser receptivo ante la crítica fundamentada. No debe haber molestia, sino rectificación. La realidad es que aquí en Veracruz, en el cambio de administraciones, se ve una falta de ejercicio público y desconocimiento de gobierno. No se entiende como subirse a un ladrillo, les marea y se vuelven insoportables déspotas, groseros y rijosos. Acusan estulticia, pedantería. Allá ellos, pues los tiempos electorales están en marcha y el escrutinio ciudadano pendiente. Una reflexión se sugiere, al encargado de prensa del ayuntamiento xalapeño actual, de quien muchos periodistas se quejan por sus maneras poco diplomáticas. Morena aún no la tiene segura.
Enmoladas
Ningún líder partidista nacional o local, puede comprometerse a acabar con la corrupción e impunidad, si se acompaña de corruptos e impunes. En Veracruz, de todos los partidos políticos en contienda, sobresalen las lacras. Los diputados priistas Erick Lagos y Adolfo Mota, por ejemplo, al tocar el tema se sumieron en sus asientos. Pero había decenas, de impresentables. Lo mismo con los panistas, que al concepto algunos palidecieron como Ricardo Guzmán Jr- el hijo del cacique más impopular- que traía los estragos de sus excesos. Y también en Morena, hace agua. No ofendan la inteligencia, no pueden ofrecer el cambio, rodeados del pasado de personas corrompidas, que han desprestigiado a su propia militancia.
En un ambiente de colorido y gran festejo, los panistas celebraron a sus candidatos para la gubernatura de Veracruz y la presidencia de México. Miguel Ángel Yunes Marqués y Ricardo Anaya, recibieron todo el calor de partidistas entregados y principalmente de jóvenes muy entusiastas. Fue su fiesta de colores: azul, amarillo y naranja. Larga lista de personajes de esos colores. La familia panista veracruzana, se entregó. Ya están en campaña.
Revivieron las fuerzas priistas veracruzanas. Con calor humano y una asistencia numerosa, en unión llegaron al lugar de la cita que estaba abarrotado. Fue en el registro del senador Jose Yunes Zorrilla, como precandidato a gobernador por Veracruz. Pepe estaba feliz. Se dejaba querer, abrazar, besar, estrechar. Estaba con su familia, amigos, partidistas, colaboradores, simpatizantes. Los priistas se entregaban al joven político, que más que radiante disfrutaba el momento. Visualizan un futuro prometedor, apostando a su líder. La moneda, está en el aire.
No son solo los crímenes arteros, en contra de los periodistas sin solucionar. Lo es también la marginación gubernamental, que arrincona y castiga a la prensa libre y profesional. Una añeja exigencia , para dignificar y profesionalizar al gremio periodístico. Mejores sueldos y prestaciones. Apoyo para vivienda y salud. Dignificar el medio, reconociendo el verdadero valor de egresados y profesionistas de la carrera. Distinguir a los verdaderos periodistas, de quienes se dicen lo son y se dedican a la extorsión y corrupción. Seudo periodistas y dueños de pasquines, que se prestan con los gobiernos en turno para el saqueo. El descarado contubernio. No, nada que celebrar cuando México es considerado el primer país de peligro para ejercer el periodismo y Veracruz el estado que más periodistas muertos a aportado. Asesinan al mensajero, las administraciones déspotas y autoritarias. Las de aíres monarquicos, que se asientan como dueños del lugar, saqueando a sus contratantes: el pueblo.
La patria es primero, pudiera ser una utopía. Lo verdadero es que quienes amamos a nuestro país, estamos convencidos de su valor. Que primero están las necesidades de la Nación, que otro aspecto y sobre todo, cuando se es funcionario público. En este primer día de año, hagámonos el propósito ciudadano, de recordarles a los políticos su verdadera obligación y compromiso. Unidos los mexicanos, hemos demostrado la fuerza. Sacudamos el temor, apatía, desinterés y actuemos. Sordos a promesas vanas electorales, presionemos para acciones y el cumplimiento de compromisos adquiridos. El país lo vale y los mexicanos también. Un inicio de año, no sólo de buenos deseos sino de acciones en el acontecer diario. Bienvenido 2018!
Americo Zuñiga Martinez se va, dejando un malestar en la población que, seguramente, tendrá un gran costo político. Corrupción, enriquecimiento inexplicable, indiferencia. Un gasto exhorbitante de muchos millones de pesos, del erario público, para promocionar obras intrascendentes solo de relumbrón. Comprando méritos, muy caros. Sus omisiones,fueron muchas. Se va irresponsablemente, autorizando 200 comercios en la saturada zona de avenida Araucarias. Esto a incendiado el ánimo de los vecinos del lugar, que interpondrán demandas. De la UPAV salieron 100 millones de pesos, se asegura, para su campaña y es considerado el alcalde más nefasto y corrupto, que ha pasado por ahí. No le preocupa, en lo más mínimo. Hoy es un rico más, de la banda.
Es muy sencillo. Nada complicado de entender y damos fe. Lo fundamental en Pepe Yunes Zorrilla, es su educación. De trato suave, amable, cercano a la gente cual sea su condición. De cultura general y conversaciones animadas. Con sentido del humor fino, que muestra inteligencia. Un verdadero abismo, a la lejanía abismal del común de los funcionarios públicos déspotas, soberbios, lejanos, vulgares. Tienen razón quienes no creen , pero también se le puede dar el beneficio de la duda. Es Pepe, el hombre fuera del partido político. Sin darle la oportunidad, no podríamos estigmatizar. Necesitamos rostros nuevos y diferentes maneras, al gobierno de Veracruz que urge de funcionarios eficientes y comprometidos. El abismo es grande, pero la esperanza mayor.
Era Pepe Yunes Zorrilla, el mejor candidato priista para el gobierno de Veracruz. Es el único competitivo y con real capital político, para lo que viene. Una guerra cruenta, que inició hace rato. En un estado convulsionado por la violencia extrema, las condiciones serán muy diferentes. El senador tiene los elementos y la inteligencia. Ojalá se rodee de los verdaderos priistas, que fueron relegados por el fidelísimo- duartismo, que tanto daño hicieron a su partido y a los veracruzanos. Veracruz ha dado mucho a la clase política local y merece ya vivir en paz, con verdadero desarrollo económico no espejismos.
Solo cuando se vive tan de cerca, se puede entender la tragedia comentó Ricardo Ahued Bardahuil. Lo hizo en referencia, al secuestro de su hermano Gerardo. Visiblemente consternado, el empresario agradeció en su nombre a las autoridades correspondientes, la pronta solución del problema. Pero más a Dios, a su familia y a todos los veracruzanos, que se manifestaron reprochando enérgicamente la acción. A los diferentes sectores sociales, que indignados le ofrecían su apoyo. Hablar de otro aspecto, le parecía obsceno. Prometió como familia, acercarse aquellos grupos devastados por el dolor, de vivir un secuestro o desaparición de alguien querido. Él tuvo suerte, pero hay miles que lloran a sus muertos. Aunque paguen el rescate, la mayoría de las veces no hay piedad. Veracruz primer lugar en secuestros y esto debe alertar a la ciudadanía. Un acto de solidaridad multitudinario, no visto en la capital del estado hacía tan respetable y querida familia.