Inicio ColumnasViernes Contemporáneo El PRI se hunde más y MC empieza a crecer y ser competitivo

El PRI se hunde más y MC empieza a crecer y ser competitivo

by Arturo Reyes Isidoro

Significativa resulta la renuncia al PRI de Miguel Ángel Macías Parra, quien era su delegado distrital en Xalapa, para sumarse al proyecto político del empresario xalapeño Román Moreno Hernández, quien buscará la presidencia municipal de la capital del estado por el partido Movimiento Ciudadano (MC).

 

Significativa porque refleja y reconfirma la grave crisis del otrora partidazo, cuyo futuro se ve muy nublado en el resultado de las elecciones municipales del próximo 1º de junio, y porque prefigura el crecimiento que tendrá MC con la suma de muchos que terminarán por irse del Revolucionario Institucional.

 

Significativa también porque la dupla Moreno Hernández-Macías Parra hará competitivo al partido naranja ante Daniela Griego, la candidata que perfila Morena, y porque Miguel Ángel se lleva con él el capital político que logró en la pasada elección federal cuando como coordinador de la campaña de Américo Zúñiga casi arañaron el triunfo en Xalapa (perdieron por solo 311 votos).

 

No es menor el hecho de que en esa elección, el entonces candidato de la coalición “Fuerza y Corazón por Veracruz”, Pepe Yunes, ganó la votación en Xalapa a la ahora gobernadora Rocío Nahle, y uno de quienes más lo apoyó fue Román.

 

Ayer vi a Américo Zúñiga. Me confirmó que no participará en este proceso, pero no será ninguna sorpresa si en forma abierta o bajo el agua apoya a Román Moreno (de paso a Movimiento Ciudadano) sin renunciar al PRI, independientemente de que desde el año pasado varios viejos operadores del tricolor están trabajando para MC.

 

Inconformes en Morena podrían emigrar a MC

 

Comenté ayer que, de acuerdo con las cifras que dio a conocer el dirigente estatal de Morena, Esteban Ramírez Zepeta, para alcaldes o alcaldesas se inscribieron en la plataforma de su partido 2,100 aspirantes, de los cuales 1,988 se quedarán en el intento, pues solo son 212 las alcaldías del estado.

 

Lo cierto es que esos 2,100 se creen unos verdaderos machuchones o machuchonas, los mejores para ganar y dirigir los ayuntamientos de sus municipios, por lo que quienes queden fuera de la consideración de Morena se irán a otros partidos, se supone que la mayoría a Movimiento Ciudadano, desde donde pretenderán hacer morder el polvo a su para entonces ex partido y demostrarles a sus dirigentes que estaban equivocados (“ya ven, se los dije”).

 

Desde ahora tengo testimonios de aliados de Morena, que defienden sus muchos años de trabajo al lado de los guinda, quienes se creen, por lo mismo, merecedores de la candidatura, los que, me han asegurado, no lo pensarán dos veces para pasarse a las filas de MC si los dejan fuera, y cuidado que pueden darle un susto a sus hasta ahora aliados.

 

(De que no hay nada escrito, basta recordar aquel 1997, cuando el entonces dirigente estatal del PRI, Miguel Ángel Yunes Linares, en una asamblea pública de su partido en Cosamaloapan, exhibió, humilló, ridiculizó y rechazó como candidato a presidente municipal a don Juan Chiunti Rico por el solo hecho de que ya tenía 82 años de edad.

 

Político, ganadero, cañero y hotelero, descendiente de familias española e italiana, presidente municipal por Ministerio de Ley en la segunda mitad de los cuarenta, diputado local en 1952, hombre querido y apreciado en toda la Cuenca del Papaloapan, luego de ser rechazado se postuló por el PRD y derrotó al PRI y a Yunes Linares en forma abrumadora.

 

En aquel entonces, el PRI, que dirigía Miguel Ángel, perdió en 93 municipios de 210 que eran, casi la mitad. En otras ocasiones he recordado que al día siguiente de la elección nos convocó a conferencia de prensa para, con mucha vergüenza profesional, renunciar con carácter de irrevocable a la dirigencia.)

 

No deja de despertar curiosidad qué harán los “arribistas”, que dice Manuel Huerta que acaban de llegar de otros partidos solo para utilizar las siglas y colores guinda, si no les dan la candidatura, ¿acaso se regresarán a sus ex partidos o se brincarán a otro que sí los abandere y los lleve como sus candidatos?

 

¿O es que acaso está equivocado Manuel, no son “arribistas” sino verdaderos “transformadores sociales”, convencidos, dispuestos a prenderse fuego en la Plaza Lerdo de Xalapa para demostrar su amor sin condiciones a Morena pero antes anunciar que se suman a los candidatos que decida su partido?

 

Lo cierto es que en política no hay nada definitivo hasta que no es definitivo y que puede más la ambición que la convicción.

 

¿Garantiza conformidad el hecho de que gobierna Rocío?

 

¿Sólo porque Rocío Nahle es la gobernadora esta vez no se va a calentar el proceso electoral municipal dentro del partido mayoritario, que es el suyo?

 

Faltan casi dos meses para que Morena dé a conocer la lista definitiva (el 13-14 de marzo) de sus candidatos, y es posible que la incertidumbre contenga momentáneamente la calma, las ansias de los toreros.

 

Las elecciones municipales son las más cercanas a la gente y en Veracruz históricamente han enardecido a los electores al grado de llegar a la violencia.

 

En los años de esplendor del PRI, a pesar de la férrea disciplina que se imponía y mantenía desde la cúpula la mayor parte del tiempo, llegados los procesos electorales municipales se despertaban, encendían y desbordaban las pasiones, que costaba mucho calmar.

 

Hay quienes recuerdan todavía las quemas de los palacios municipales de Pánuco, Las Choapas y Misantla, las tomas de palacios municipales como el de Acayucan, las tomas y bloqueos de carreteras, agresiones físicas contra los delegados del PRI, entonces en el poder, etcétera.

 

El viernes pasado, al informar sobre la numeralia de los aspirantes que se registraron, el dirigente estatal Esteban Ramírez Zepeta presumió que el registro fue “transparente, democrático” y que se realizó “en completa calma, si bien hubo mucha algarabía. Pero eso fue solo el registro.

 

Hoy, a la experiencia histórica hay que agregar las nuevas circunstancias, pues no solo están en juego muchos intereses, sino que hay la sospecha de que podría meter las manos la delincuencia en muchos municipios. Ojalá y prevalezca la “completa calma” de la que habló Ramírez Zepeta, aunque lo deseable es que se manifieste la inconformidad, saludable en toda democracia, pero sin llegar a la violencia que sería como pasto seco listo para que la delincuencia le prenda un cerillo.

 

¿Y la cuadra y el cuartel de Ricardo Ahued?

 

Llama la atención que no se apuntó nadie de la caballada de la cuadra del secretario de Gobierno, Ricardo Ahued.

 

Hasta antes de que se supiera lo de Daniela Griego, la vox populi daba por hecho que la plaza estaba controlada por el cuartel del exalcalde de Xalapa.

 

Sonaban y resonaban los nombres del diputado local Antonio Ballesteros o del secretario de Desarrollo Económico, Ernesto Pérez Astorga. Ninguno se inscribió.

 

Ahued es un político profesional y sabe y practica la disciplina. Yo daría por hecho que sabe de antemano que el caso de la capital del estado ya está resuelto y de ahí que haya actuado con toda prudencia.

 

Y no tengo ninguna duda que, institucional y leal a su jefa política, pondrá todo su capital político, que no es poco, a favor de la candidata de su partido y de la causa de su partido.

 

 

también te podría interesar