Al grito “de que no me vengan con el cuento de que la ley es la ley” la violencia desborda. Escenas kafkianas donde los policías, guardia nacional y ejército son correteados, agredidos e insultados por una población cansada de sus abusos e inoperancia. Mujeres embarazadas secuestradas para robarles a sus crías; jóvenes desaparecidos que van unas a los prostíbulos y otros de halcones en los cárteles de la droga. Niños y niñas ultrajados primero y luego ultimados para vender sus órganos. Migrantes objetos de la vileza extrema de los encargados del orden que les violan y roban. Escenas dantescas inimaginables de los peores y más viles sometimientos a los que son sometidos. La única verdad histórica de este gobierno oscuro e inoperante es su fracaso en la seguridad como en otros ramos de vital importancia para la nación. Esta desviando miles de millones de pesos para el ejército y no hay resultados. Poblaciones enteras que abandonan todo su patrimonio por la inseguridad y las amenazas de la delincuencia organizada. Pequeñas y medianas empresas amenazadas con el cobro de piso. Delincuentes que salen libres por la alta corrupción de la justicia. Ni la ley ni el orden imperan en este país en el abismo por el peor gobierno de muchos lustros. Los daños son irreparables y cuando la realidad golpeé los rostros podría ser demasiado tarde. Estado fallido
ENMOLADAS
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