Inicio ColumnasViernes Contemporáneo La catafixia veracruzana. Sacan a Rogelio Franco de la cárcel y meten a Arturo Hérviz. Le achacan daño patrimonial cuando fue alcalde en Ángel R. Cabada

La catafixia veracruzana. Sacan a Rogelio Franco de la cárcel y meten a Arturo Hérviz. Le achacan daño patrimonial cuando fue alcalde en Ángel R. Cabada

by Armando Ortiz

La catafixia veracruzana. Sacan a Rogelio Franco de la cárcel y meten a Arturo Hérviz. Le achacan daño patrimonial cuando fue alcalde en Ángel R. Cabada

Los que conocen la historia del PRD veracruzano nos cuentan que Rogelio Franco llegó a los cargos que ocupó en ese partido, incluyendo diputado y dirigente estatal, porque empezó cargando las maletas de Arturo Hérviz, quien más de una década se empoderó en la dirigencia del PRD Veracruz. Arturo Hérviz, Rogelio Franco, Margarita Guillaumín y otros dirigentes de esa época le cerraron las puertas al novel ingeniero Cuitláhuac García, militante del PRD gracias a su padre, Atanasio García, quien en algún momento alcanzó una diputación local que le sirvió para negociar con Fidel Herrera. Dicen los que conocen la historia del PRD que Hérviz y Franco Castán le olían la estulticia a García Jiménez, por eso mejor lo ocupaban de payaso que de dirigente de alguna cartera del PRD. Dicen que todo eso lo guardó Cuitláhuac García en el rencor, que eso lo acomplejó y lo convirtió en el personaje que es, un gobernador limítrofe, lleno de traumas y con una estulticia que no tiene donde guardarla. Para muchos eso explica que, en este momento, justo el día y la hora en que un juez dicta arresto domiciliario para Rogelio Franco, justo el día en que sale de la cárcel Franco, después de casi 5 años preso, detuvieran a Arturo Hérviz en la zona de los Tuxtlas, sus territorios, y le inventaran eso del desfalco de 20 millones. A manera de catafixia, Hérviz ocupará en prisión el lugar de Franco Castán. Y, lo anticipamos, ahí estaráal menos hasta que Cuitláhuac García deje la gubernatura de Veracruz. Así lo trabajan los traumas, así lo trabaja el rencor.

Cuitláhuac García, como “chivo en cristalería”. Le echa las patrullas de la SSP a Manuel Velasco, la “corcholata” verde. Los encañonaron

El presidente López Obrador tiene la culpa del “mostrito” en el que se convirtió el gobernador Cuitláhuac García. Los padres que tiene hijos saben que no se pueden solapar las pendejadas que los hijos cometan. Y López Obrador le solapó muchas pendejadas a su hijo putativo con “discapacidad política”. Cuitláhuac García tiene todas sus fichas en la apuesta por Claudia Sheinbaum. La “corcholata” Sheinbaum es la única que le garantiza impunidad, es la única que lo libraría de la cárcel. Por ello, en Veracruz sólo la “corcholata” Sheinbaum es bienvenida, y para ella son todos los trabajadores del estado en sus mítines. Otro aspirante presidencial en Veracruz es como un apestado. Eso lo comprobó Manuel Velasco, aspirante presidencial en la coalición de partidos Morena, PT y Verde Ecologista. Publicó Salvador García Soto en sus redes sobre la detención por parte de policías estatales al convoy en el que viajaba Manuel Velasco por Coatzacoalcos: “La corcholata verde Manuel Velasco fue detenido esta tarde en Coatzacoalcos por un convoy de la Policía Estatal de Veracruz que le cerró el paso a su camioneta mientras encañonaron a su chofer, al senador y a sus acompañantes. Los interrogaron por media hora y luego los dejaron ir. ¿Mensaje de Cuitláhuac?”. Que no le quepa duda. En caso de que Claudia Sheinbaum gane la presidencia de la república, todas estas arbitrariedades y excesos le serán perdonadas al gobernador de Veracruz.

“¿Quién te dio permiso para tanta matanza?”. El regreso al Veracruz del horror, de los cuerpos desmembrados arrojados a la calle

En septiembre de 2011, desde el puente del boulevard Adolfo Ruiz Cortines en Boca del Río, Veracruz, fueron arrojados 35 cuerpos; frente a Plaza las Américas, justo abajo del palo donde cuelgan impávidos los Voladores de Papantla. Todos recordamos las fotografías. La revista Proceso llenó su portada con todos esos muertos que de inmediato fuero llamados criminales, porque sólo unos criminales merecían una muerte así. Fueron 35 de un solo golpe. Hace unas semanas, 34 cuerpos fueron encontrados en frigoríficos. Al día siguiente más muertos sobre la carretera Poza Rica-Cazones. En la localidad de La Victoria, Papantla, fue hallado otro cuerpo desmembrado. La mañana de este 18 de agosto, por la zona de La Balastrera, en Nogales, fueron encontrados 3 cuerpos más, embolsados; también en Nogales, la cabeza de un hombre fue colgada de un puente, sus restos quedaron abajo, al lado del puente. En septiembre de 2011 escribí un artículo titulado “En Veracruz la muerte tiene permiso”. Escribí además una recreación onírica de mi encuentro con la muerte, a quien hacía responsable de la matanza: “Esta semana la muerte anduvo rondando nuestras plazas y nos encontró desnudos y no le pudimos decir nada. Ayer por la noche vi cómo se retiraba, y la muy puta llevaba las manos ensangrentadas, la boca llena de esa lascivia hedionda, pues es los últimos días había devorado muchas almas. Ayer por la noche vi cómo se retiraba y no me quise quedar con las ganas de preguntarle: ¿Quién te dio permiso para tanta matanza?”. 12 años después de esos 35 cuerpos arrojados en Boca del Río vuelvo a hacer la misma pregunta: ¿Quién te dio permiso para tanta matanza?

Armando Ortiz                                    Twitter: @aortiz52                             @lbajopalabra

también te podría interesar