Enmoladas
Es una verdadera tristeza que Veracruz, nido de grandes empresas a nivel incluso internacional, ha sido abandonado. Quienes han obtenido inmensas fortunas – a través de las riquezas del estado-que benefician a más de 5 de sus generaciones, no alcen la voz. Uno de los territorios más ricos en todos sentidos, empobrecidos y con municipios de los más miserables del mundo. Efectivamente desde Miguel Alemán a la fecha, nos tocaron los grandes saqueadores. Todos hicieron mayores fortunas y los de hoy siguen el mismo camino pero con más avidez. No les importa la seria problemática de la ciudadania en los sentidos políticos, económicos y sociales. No impugnan a gobiernos torpes, omisos, ignaros que tanto lastiman. Negocian, acuerdan y se venden por unos denarios. Que vergüenza. No creemos sea un honor ostentar apellidos como Chedraui o Fernández, que les falta una poca de gracia y otra cosita…
La soberbia del peor representante publico de MORENA Cuitláhuac García, es preocupante. Es desagradable por donde se le observe, por su pataneria. El hazme reír a nivel nacional, considerado el peor gobernador de la República. Cobijado por el gobierno federal, se asume dueño del estado y le incomodan las observaciones. Estos ignaros olvidan que son servidores públicos, que ganan sueldos proporcionados por el erario. Avergüenza a la Universidad Veracruzana por su estulticia. Como si no hubiese pasado nunca por ahí. Servil y lacayuno con su líder, es el mejor ejemplo del 90 por ciento de lealtad y 10 de capacidad. Reprobado en todos los temas políticos, sociales, económicos Veracruz se le diluye en las manos. Al igual que en Guerrero que se protegió a un violador con nexos con el narco, se impone con la fuerza del estado. No lleva las riendas de gobierno, pues lo suyo es como lo de Duarte: la frivolidad. Los siervos de la mayoría en el congreso local, son cómplices de palomear sus tonterías. Habría que exigirles se extienda una ley que proteja a los ciudadanos de los ultrajes del mandatario. Viven en una burbuja la cual cuando explote, les hará caer al abismo más profundo como a los duartistas.
Continuamos en los distractores políticos y no ponemos atención, a lo que realmente nos afecta. Si bien es cierto que la economía debe activarse, también lo es que eso no significa libertad absoluta en los protocolos del Covid. Los otros datos del gobierno son alentadores, pero la realidad es lo contrario. Infórmese con el registro mismo del gobierno y dupliquelos y sobre eso esta la realidad. En Veracruz donde los fracasos en salud, como en otros rubros, son visibles la gente está muy cómoda y despreocupada. El tráfico en la capital se ha intensificado y las plazas comerciales están a reventar. Algunos usan cubre bocas, pero muchos no. Hay negocios que no tienen los elementos precautorios, como el aparato para medir la temperatura, el gel y ni siquiera ven lo de la limpieza. La relajación es casi total. El gobierno federal con gran irresponsabilidad, está más preocupado en congregar a miles al tercer informe presidencial, que en la nueva cepa que ya se presenta en varios países. Están haciendo lo mismo de cuando inició el Covid y traen el mismo discurso triunfalista y desdeñoso, con la estulticia de Gatell a quien habría que hacer juicio político. Solo nosotros tenemos la responsabilidad de cuidarnos. Por el bien de todos vacúnense y sigan el protocolo. A ellos no les importa porque están blindados con el erario, que les proporciona los mejores médicos y carísimas medicinas, mientras al pueblo apenas le alcanza para la canasta básica.
Considerado el peor gobernador del país, por varios medios importantes de comunicación a nivel nacional, la nave de Cuitláhuac García hace agua. En tres años de su fallida administración, la obra pública importante no existe. Admira los millones de pesos que ha regresado a la Federación, cuando el estado se hunde con una problemática básica. Seguridad, salud, economía son un fracaso, pues se confirma la falta de oficio en el arte de gobernar. Los feminicidios, secuestros, desapariciones son un martirio a la alza. Los carteles de la droga, en discusión abierta en la lucha por el territorio. Nada a cambiado del Duartismo. El Cui es más fiestero que Javier y las orgias más escandalosas que el del hoy en prisión. Perdieron la oportunidad, que la suerte les dio. Al igual que el alcalde de Xalapa, que deja un verdadero caos en una ciudad antes considerada de las Flores. Dos académicos, que avergüenzan a la UV. Esta el tema de la corrupción, la cual es visible en muchos de los funcionarios públicos del gobierno. El cambio no llegó y MORENA en Veracruz, no ha dado buenos resultados. Se suma a Puebla y Morelos, que registran organismos civiles de prestigio, como los peores gobiernos. Quienes transitan por el estado y la capital, atestiguan las lamentables situaciones que se padecen. No se puede ocultar y nadie en el centro tiene un interés particular por desprestigiar. Son los hechos. La pobreza y miseria, en cada esquina y rincón de todos los municipios.
Para quienes trabajamos es difícil comprender, porque la clase gobernante no lo hace. Cuando eres empleado y recibes un sueldo, estás obligado a cumplir con lo establecido en tu contrato. Aunque es en la mayoría del pais, según reportes, en Veracruz con poca obra pública, mucho desempleo, violencia, desorganizacion los del poder están en la grilla. Armando grupos afines y tratando de liquidar a los contras del mismo partido. Las divisiones internas, son públicas. Un inepto gobernador, que todo el tiempo está sonriente y se pone alzar el brazo al dedazo del Tlatoani. Tres años y no se ubica, en lo que es una administración. Copia exacta de su presidente, olvida que aquel es eso y todos le festejan sus gracejadas, para complacerlo y no despertar su ira a flor de piel. Cui hace el ridículo. En el estado de lo que más se habla es de la sucesión y el gobernador anda cuidando a su sucesor. De verdad, pónganse a trabajar. No pagamos para que nos peguen, decía López Portillo. Millones de pesos del erario tirados a la basura… de sus cuentas bancarias. Los veracruzanos abatidos, en todos sentidos.