“No es difícil tener éxito. Lo difícil es merecerlo”. – Albert Camus.
En apenas nueve meses, Veracruz ha pasado de ser un estado con enormes retos estructurales a convertirse en un referente de la política, la economía y la democracia en el país. El ritmo de transformaciones que vive la entidad no es casualidad: responde a una agenda clara de inversión, desarrollo e institucionalidad que coloca a la entidad en la ruta de un nuevo liderazgo nacional.
El miércoles 10 de septiembre se convirtió en una muestra tangible de este proceso. Por la mañana, el director del IMSS, Zoé Robledo, acompañado de la gobernadora Rocío Nahle García, anunció inversiones históricas en materia de salud. El proyecto más relevante: la construcción del nuevo Hospital Regional de Especialidades en Minatitlán, con una inversión cercana a los 3 mil millones de pesos y capacidad para 302 camas. La obra sustituirá al Hospital General No. 32, con más de medio siglo de servicio, y ofrecerá atención de alta especialidad con tecnología de última generación.
Además, se confirmó la construcción de 90 Centros de Educación y Cuidado Infantil (CECI) y nueve Unidades de Medicina Familiar Plus en 75 municipios. Estas acciones no son menores: representan un esfuerzo estructural por fortalecer el acceso a la salud y el bienestar en una de las regiones históricamente más olvidadas del país.
Ese mismo día, por la tarde, Veracruz volvió a colocarse en el centro del mapa energético del mundo. En el World Trade Center de Boca del Río, la inauguración del Sexto Congreso Internacional de Energía, Gas, Petroquímica y Refinación reunió a cinco embajadores, al director de Pemex y al subsecretario de Hidrocarburos, además de representantes de la industria energética y tecnológica. Con stands llenos y un ambiente de colaboración, el encuentro confirmó que Veracruz es la plataforma energética más importante de México.
La gobernadora Rocío Nahle subrayó que con la Cuarta Transformación se recuperó la soberanía energética y se reactivaron complejos petroquímicos como Cangrejera y Morelos, además de proyectos de cogeneración eléctrica y producción de fertilizantes. Estas inversiones no solo refuerzan la autosuficiencia energética, sino que también garantizan empleos y crecimiento sostenido para la región.
A ello se suma la visita reciente de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien junto a su gabinete ratificó la confianza federal en el rumbo que Veracruz está tomando.
Hoy, la entidad no solo se distingue por su ubicación estratégica, sino por una conducción política que articula salud, energía e inversión social en un mismo eje de transformación. Veracruz deja de ser espectador para convertirse en protagonista. En nueve meses, comienza a consolidarse como el verdadero epicentro del cambio nacional.
Al tiempo.
astrolabiopoliticomx@gmail.com
“X” antes Twitter: @LuisBaqueiro_mx