“El apresuramiento es padre del fracaso.” – Herodoto.
Nada queda del Partido fundado por Plutarco Elías Calles en los años de la post revolución mexicana, mucho menos queda ya, nada del ideario que dio origen a esa gesta armada que causo la muerte de poco más de dos millones de hermanos.
En pleno siglo XXI, al otrora hegemónico partido, calificado del ejemplo mismo de la “Dictadura Perfecta” para los partidos totalitarios de Latinoamérica por el premio Nobel peruano, Mario Vargas Llosa, se sume en la encrucijada de evolucionar o morir.
La propuesta más cercana a una posible subsistencia en el escenario nacional se la da, la construcción de estos nuevos modelos de Coalición entre institutos políticos, que bajo la falaz fórmula de “Gobiernos de Coalición” pretenden transitar hacia su futuro.
Dirigidos por la misma clase política que ha controlado al país en los últimos seis lustros, el PRI, navega sobre aguas turbulentas, bajo el liderazgo de personajes carentes de todo a todo, de formación política, doctrinal, filosófica, y mucho menos ideológica.
La existencias de aquellos grandes politólogos que le conformaron, que bajo sus siglas aglutinaron a lo mejor y más granado de esa clase política en formación, que luchaba bajo el principio del debate de las ideas para la construcción de un México con sentido y rumbo, se obnubiló, con la llegada de los egresados de Yale y Harvard, quienes ante pusieron los conceptos de los “Chicago boys” a las necesidades apremiantes de un país, que se alejó de esa filosofía política de priorizar a la nación en el concierto mundial por encima de presiones e intereses de los Estados Unidos.
Hoy entregados a los intereses trasnacionales, el PRI, actúa más como un títeres sin cabeza, que como ese poderoso partido político.
El contubernio construido por sus liderazgos, encabezados por Emilio Gamboa, Cesar Camacho, los Beltrones, los Murillo Karam, los del grupos Atlacomulco, hacen que ese partido sea la burla, con un dirigente como Enrique Ochoa Reza, clon de Antonio Pino Mora conocido en el celuloide como “Clavillazo”, a quien solo nos falta escucharle reventarse sus famosas frases —”¡Pura vida!”, “¡Ahí nomás!”, en tono de alegría o “¡Nunca me hagan eso!”, “¡Méndigos!”, en tono de reproche.
Ejemplo claro de todo esto, es lo que ocurre en Veracruz, en donde el mismo dirigente nacional avala, las guangas decisiones de su dirigente Renato Alarcón Guevara, a quien por mucho le quedo grande la silla de la Avenida Ruiz Cortines y Francisco Moreno en Xalapa.
El poco control y la pilmama que representa el Renacuajo Alarcón al frente de su partido, seleccionado únicamente por ser el débil personaje que es y así ser mangoneado por cualquiera, provocó que este miércoles los diputados federales dieran el manotazo y acomodaron a Lilian Zepahua, integrante de su grupo, como la Secretaria General Provisional del CDE del PRI, entre otras cosas para ser la que lleve los pantalones en este fracasado Instituto político en suplencia de este mal logrado intento de político –que cual renacuajo, no maduro para convertirse en Sapo- que ante los pocos meses que le quedan enfrente sigue haciendo, lo que ya se han comenzado a llamar como una más de sus “Renacuadas”.
Y es que es sabido por todos que a Renacuajo todos le hacen el feo, incluso desde su llegada los diputados federales liderados por Jorge Carvallo y Erik Lagos se negaron a trabajar de la mano con Alarcón, e incluso sentenciaron no aparecerse más en Veracruz ni para actividades propias del partido y menos para acompañarle en eventos de la dirigente estatal.
Para todos es sabido que Carvallo tiene especial interés en manejar de cerca al partido sobre todo porque tiene la prioridad en este momento de acomodarse en otro hueso como la senaduría o hasta de trabajar negocios de interés para Fidel Herrera quien se siente prácticamente exiliado de Veracruz, por ello este día impuso a Lilian en este punto estratégico en el PRI.
A Renato solo le bastaron dos periodicazos y el intento de sacarle sus escandalitos para hacer uso de las prerrogativas a su antojo o de sus negocios con sus cuates como Miguel Ángel Macías Parra –un remedo de operador político, quien llegado el momento vende a su madre por 30 monedas, como lo hiciera con su paso por la dirigencia del Frente Juvenil Revolucionario- para ablandarlo y solicitarle este puesto para la diputada federal.
El iluso dirigente quien es el principal interesado en no pelearse con el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, vende la idea de que ahora con la incorporación de Lilian los diputados aparecerán más por Veracruz y saldrán a rebatirle al gobernador todas sus acciones, mientras el continúa viviendo bajo las enaguas de la heredera del Clan “Zepahua”ahora secretaria General de su partido.
Triste final para el PRI en Veracruz con tan frágil dirigencia.
Sextante.
Vaya que existe toda intensión por partirle la madre al PRI…
Y es que al menos así queda demostrado con la conformación de la megacoalición de partidos denominada Frente Ciudadano por Michoacán.
“Sin descartar a nadie”, ni siquiera a figuras controvertidas del oficialismo michoacano, como el ex gobernador Fausto Vallejo (cuyo hijo fue vinculado con el narcotraficante La Tuta), este día el PAN, PRD, Movimiento Ciudadano y el Verde Ecologista (PVEM), registraron ante el Instituto Electoral de Michoacán (IEM) el Frente Ciudadano por Michoacán.
Con esta alianza política, dichos partidos buscarán consolidarse en diciembre como una coalición electoral para 2018.
El destino del PRI será el mismo que el de los saurios en la tierra… y se llama extinción.
Al tiempo.
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