Pseudoperiodistas sin custodios; ¿para qué rasgarse las vestiduras por ellos?
Durante el gobierno de Javier Duarte algunos periodistas contaban con la seguridad directa de personal de la Secretaría de Seguridad Pública. Los periodistas que tenían custodios señalaban que habían recibido amenazas y que por ello requerían de custodios. Lo curioso es que todos esos periodistas eran afines a Javier Duarte de Ochoa. El 14 de mayo de 2012 recibí amenazas graves vía correo electrónico: “Asi que mejor para tu carro, porque sino los malos te van a matar, pero no con un balazo en la frente ni tampoco te van a descuartizar, para nada, tu seras asesinado si sigues de pendejo” (sic). Por esa razón tuve que ir a la entonces PGJ de Amadeo Flores Espinoza. A mí no me ofrecieron custodio, sólo me dijeron que no pensaban que la amenaza fuera seria, pero me advirtieron: “Uno sabe en que se anda metiendo y si por ello debe o no tener miedo”, y en mi cara rompieron las impresiones de los correos electrónicos que había entregado y las arrojaron al bote de la basura. Pero los afines a Duarte tenían una patrulla afuera de su casa, o un policía enfrente, toda la noche a la intemperie. Otros se tomaban fotos con ellos, y con las armas de ellos; otros los usaban para que cargaran las bolsas del mandado; otros los usaron para cometer delitos. Los que si requieren custodios no los piden, y algunos que no requieren se victimizan. De modo que no merece la pena rasgarse las vestiduras por esos pseudoperiodistas, no merece la pena hacerlos víctimas y menos mártires.
¿Por qué esa severidad contra los que en redes sociales incitaron al saqueo?
Usted debe recordar que una las primeras crisis que enfrentó el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares fue en los días de los saqueos que se dieron a consecuencia del famoso gasolinazo. El gobernador se enfrentó a los saqueadores, dio la cara ante un grupo de ciudadanos que escudados en su frustración causaron perjuicios a particulares sin obtener alguna sanción; pero poco pudo hacer. Los llamados a saquear se dieron desde las redes sociales. Sujetos, algunos de ellos miembros del crimen organizado, promovieron estos saqueos y ya sabe usted lo que dice el dicho: “A río revuelto, ganancia de pescadores”. Pues excusados en los supuestos aumentos a la gasolina y las tortillas, algunos vivillos hicieron el llamado a saquear centros comerciales para que, como el año pasado, poner en jaque al gobierno. Pero esta vez los detectaron, los detuvieron y “podrían enfrentar una pena de hasta 30 años de prisión, como establece la Ley”. Se les considera posibles incitadores a cometer un delito, terrorismo o sabotaje. Parece severo, pero si tomamos en cuenta las fatales consecuencias de esta incitación al saqueo, ya no se ve tanto. Esto también es un mensaje para aquellos que se quieran pasar de vivos, y crean que las redes sociales son para originar caos y sacar provecho de ello.
¿Usted presumiría a su amigo Fidel Herrera en redes sociales? Yuri sí
Hay quienes creen que la amistad es irrestricta, que no importa si el amigo cae en desgracia o si se descubre que fue uno de los ladrones más grandes de la historia del estado de Veracruz, o si fue un desgraciado que vendió a todo sus gobernados al grupo criminal de los Zetas; hay personas a quienes eso no les importa y no les basta con aceptar una invitación con ellos, sino que hasta presumen la foto con ellos en sus redes sociales. Y es que la amistad para este tipo de personas está por encima de cualquier defecto o crimen de los amigos. Una de estas personas “iluminadas” por el gesto de la amistad es Yuridia Valenzuela-Canseco, mejor conocida como Yuri, la cantante, la del “pequeño panda, aún no andas y ya queremos verte jugar”. La cantante presumió la foto en Instagram y los “mal pensados” de Notiver dicen que Yuri fue quizá porque Fidel anda queriendo meterla de candidata al senado. Pero a lo mejor Yuri sólo quería cenar con sus amigos y fue en ese plan a visitarlos, en plan de cenadora.
Armando Ortiz aortiz52@hotmail.com