Desconocer avances es faltar a la verdad, dijo Peña Nieto. Y no admitir errores, ¿es lo mismo? Esta cretinez del gobierno priista nacional, es lo que ha llevado al hartazgo y lo tiene en el tercer lugar en las encuestas. No hay sincero reconocimiento de los errores, omisiones, violaciones en todos sentidos. Hablan de si se desconocen “los avances alcanzados, es desinformar y degradar la política”. La clase política paga por la peca, a los medios de comunicación oficiales para no informar con veracidad, comprando su silencio en miles de millones de pesos. La deshonra política, es cuenta de ellos mismos con su corrupción, impunidad, omisión. No hay congruencia en lo que hablan, hacen y de ahí el fastidio. Temerosos y en desesperación encaran a la nación, culpándola de su fracaso. Avances existen sí, pero ¿cómo se explica el gran descontento y rechazo de la mayoría? Son ciegos a la pobreza, extrema violencia y reales oportunidades de crecimiento. Permiten se asesinen a periodistas, poniéndonos en lugares peligrosos en el mundo para su ejercicio. Se les fue el gobierno de las manos. ***No entienden los partidos políticos nacionales, el hastío de la ciudadanía. La cuestión es derrochar el dinero, que no es suyo. Parafernalias costosas, que aplican para sus militantes que están a la caza, de futuros puestos y negocios. Formalmente los que eran precandidatos únicos, son ya candidatos oficiales (sic). Este incesante desfile de personajes, que a la mayoría le importa madres. Mujeres y hombres ávidos de incrustarse y permanecer en el presupuesto, son las hordas que asquean. Se deben modificar los usos y costumbres de las tribus partidistas, que tanto cuestan en sus rituales. Una descomposición total, que permite que funcionarios públicos brinquen de un partido a otro como chapulines, sin la mayor vergüenza. ¡Pobre México!*** “Según declaraciones públicas, para el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida no hay focos rojos en materia de seguridad de cara al proceso electoral. El problema de no entender la falta de respeto que representan estas declaraciones para las víctimas, para las autoridades que día a día exponen su vida, para los ciudadanos comunes que vivimos con temor, nos lleva a repetir acciones y a realizar una mala evaluación de resultados. Señor secretario, recuerde que su trabajo es servirle a México, no a sí mismo ni a su partido. Lo que el país necesita es seriedad y efectividad en acciones y declaraciones, no minimizar la situación o caer en triunfalismos. Debemos recordar que quienes cometen robos con violencia a transeúntes, negocios, casas o vehículos, son principalmente delincuentes comunes y estos delitos son los que más nos afectan como ciudadanos”, afirma Francisco Rivas del Observatorio Nacional Ciudadano. *** Y para las agruras del mole…usted sabrá qué tomar. Hasta la próxima.
LA VERDAD
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