Rocío Nahle, ya nos está acostumbrando a sus mentiras. Dice que su aumento no venía en el presupuesto, pero ella firmó el documento del presupuesto
Rocío Nahle miente constantemente. La mentira se ha convertido en una estrategia de la Cuarta Transformación. En agosto de 2025 Raquel Buenrostro, secretaria Anticorrupción del gobierno de Claudia Sheinbaum declaró: “Nada más decirle que nosotros desde que empezamos el caso tuvimos pláticas y acercamientos con la Gobernadora y nos verificó que Núñez Albarrán nunca ha trabajado en el gobierno de Veracruz”. Núñez Albarrán, después de cometer actos de corrupción en Pemex, recibió refugio en el gobierno de Rocío Nahle, pero la gobernadora dijo que ese sujeto no trabajaba en su gobierno. En Libertad bajo Palabra demostramos lo contrario con documentos del propio gobierno de Veracruz. Ahora la gobernadora Nahle, sobre el tema de su aumento salarial declaró: “Yo ni sabía, yo no sabía que iba a haber aumento salarial, ni siquiera está en el presupuesto. En el presupuesto va un aumento a la burocracia sobre todo a personal de confianza y creo que de ahí se tomó”. Sin embargo, documentos oficiales que se dieron a conocer muestran que la señora Nahle sí conocía el presupuesto que incluye su aumento salarial. Tan lo conocía que la gobernadora firmó ese documento. ¿Para qué mentir? Para qué si tarde o temprano los muertos arrojados al lago flotan. La mentira sólo deslegitima al gobernante, lo vuelve indigno, oscuro, espurio.
Según el general Trevilla, Carlos Manzo es culpable de su propia muerte. “El protocolo no falló”, Manzo no aceptó propuesta de protección de la GN
Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, tenía su propia escolta. Pero también contaba con escoltas de la Guardia Nacional, de la que no confiaba al 100 por ciento, por ello su primer círculo de guardias eran los de su confianza. A pesar de eso un joven de 17 años se acercó lo suficiente a Carlos Manzo como para dispararle hasta en 7 ocasiones. Obvio es pensar que el protocolo de protección falló, sin embargo el general Ricardo Trevilla, secretario de la Defensa Nacional (Defensa) declaró que el protocolo no falló: “El protocolo no falló, falló el otro. Hablo del protocolo de nosotros, de la Guardia Nacional. Lo que vamos a hacer es concientizar más a las personas que serán resguardadas para que cooperen con la implementación de estos mecanismos. Si desde un principio hubiera aceptado que fuera personal de la Guardia Nacional —que tiene cursos de protección a funcionarios— se habría incrementado su nivel de seguridad”. Es decir, al no aceptar Carlos Manzo que miembros de la Guardia Nacional estuvieran en su primer círculo de protección, entonces él seguiría vivo. ¿Tan vivo como el tirador, a quien tenían controlado y al que finalmente abatieron? ¿Para qué? ¿Para que no hablara?
Según los voceros de la 4T la Generación Z no tiene personalidad social, sólo se deja manipular por la derecha
En las últimas semanas, varios voceros y columnistas de izquierda en México y América Latina han repetido una tesis polémica: la Generación Z (nacidos entre 1997 y 2012) no tiene “personalidad social propia” y se habría convertido en un bloque electoral que “se deja manipular fácilmente por la derecha” en redes sociales, especialmente TikTok y X. Según estos voceros los jóvenes rechazan el discurso oficialista de la 4T y Morena porque “consumen contenido de influencers conservadores”. Además de qué prefieren temas como libertad económica, meritocracia y rechazo al asistencialismo antes que la narrativa de “lucha de clases” tradicional. Sin embargo, analistas independientes señalan que la Gen Z no es “de derecha” por ideología pura, sino que responde a tres factores concretos: El crecimiento en la precariedad: nacieron con la crisis del 2008 y se formaron con la pandemia; desconfían del Estado que les falló. La Generación Z, al tener acceso irrestricto a información contrasta en tiempo real los discursos oficiales con la realidad (inflación, inseguridad, desempleo juvenil del 8.2 %). Es una generación de jóvenes que rechaza el autoritarismo discursivo. Lejos de ser “manipulados”, la Generación Z está construyendo su propia personalidad política: libertaria en lo económico, progresista en lo social y profundamente escéptica del poder establecido, sea de izquierda o derecha. El verdadero desafío para la izquierda no es insultarlos, sino entender por qué perdió a toda una generación.
Armando Ortiz Twitter: @aortiz52 @lbajopalabra