Debiera Claudia apartarse de Epigmenio Ibarra y Jesús Ramírez Cuevas que son dos parias culpables de los fracasos de su comunicación social. Le escriben unos discursos cada día más agresivos e inocuos. Hacen mucho daño sus consejos sobre el tratamiento a la prensa crítica que la exhibe en su capacidad política. Sus intereses les mueven ya que sirven al llamado clan macuspano. Comentarios que tanto le cuestan y costarán. Son esbirros del ex y tejen el complot. Claudia no solo tiene enemigos dentro del híbrido sino que las ofensas a la ciudadania traspasaron los límites. Su soberbia y despotismo la muestran como lo que es: autoritaria. La verdad no sabemos que quiere festejar. Lo que sí conocemos son los costos millonarios de esas reuniones con sus acarreados de la burocracia que paga el erario. No nos ve, ni nos oye como Salinas. El clamor se volvió nacional. Insistir en que sigue siendo culpable Calderon- 7 años de lo mismo- ya causa lástima que se pasó de lo chusco.