Verónica Hernández Giadans protestó decir verdad, mintió y negoció su salida con diputados del Congreso de Veracruz

La fiscal general llegó al “matadero” ante la encomienda de exhibirla como incompetente, traidora, oportunista, lacaya y sobre todo, corrupta. Antes de la comparecencia, ella negoció y aceptó irse de la FGE,  en febrero.

***Citó la frase “Es tiempo de mujeres”, cuando ella misma ha violentado el derecho de las víctimas.

No es un logro el asegurar que 81 mil 131 carpetas de investigación se han conformado durante la titularidad de la hoy apestada en el gobierno de Rocío Nahle, la fiscal general Verónica Hernández Giadans, pues dependencias federales confirman que los delitos van en aumento. Y es la misma, quién engañó a diputados durante su comparecencia, al asegurar que durante su gestión disminuyeron los delitos y bajó la incidencia delictiva, cuando esta declaración es falsa. La realidad es que las víctimas no tienen confianza en la institución y no denuncian.

Con cifras alegres,  la fiscal incómoda asegura la disminución de los feminicidios y secuestros, pero en sus datos se evidencia que aún con sentencias de 70 y hasta 140 años, el aumento de éstos se ha disparado.

Recordemos, que la fiscal juró ante el pleno decir la verdad y Verónica Hernández Giadans mintió de manera descarada, pues nunca ha priorizado los derechos humanos, tampoco actúa conforme a derecho, ni respeta los protocolos, alegando dar resultados del 91 por ciento y aportando cifras falsas ante diputados locales.

Es una constante, que las carpetas de investigación sean manipuladas por órdenes de esta fiscal general, quien amenaza a los jueces de control y los obliga a que vinculen a proceso a los investigados con pruebas imaginarias, sin sustento y testigos falsos.Y a los indiciados no se les comprueba ser culpables, pero mientras, su presunción de inocencia se pierde en algún cajón de escritorio.

Veracruz, primer lugar en sentencias, según las mismas cifras alegres de Verónica Hernández Giadans, quien cumplió el acuerdo de no llevar aplaudidores, pocos invitados y ella, en momentos de desesperación, era enfática al presumir sus logros, sin que nadie le aplaudiera. Una comparecencia plana y extraña, pues las negociaciones para evitar la “No agresión”, ya se habían pactado antes de la comparecencia. “No te cuestionamos, pero entregar el cargo”, le advertían.

El tema obligado por parte de la oposición era: “Sumisión ante el exgobernador Cuitláhuac García Jiménez”, pero nadie fue valiente, al citar también al exsecretario de Gobierno Eric Cisneros Burgos, quien usó el poder para su beneficio personal y con ayuda de Verónica Hernández Giadans, se aplicó una cacería gubernamental en contra de políticos que le estorbaban al conocido como “Bola 8” y era “el poder detrás del trono”.

Comparecer para asegurar que todo está bien, en nada ayuda a Veracruz. “Las mujeres en Veracruz vivimos con miedo”, era la constante queja de mujeres diputadas, quienes cuestionaban a esta funcionaria protegida por la terrible administración de Cuitláhuac García.

Y Héctor Yunes Landa acorraló a la fiscal general con sus preguntas, pero ella, cínicamente respondía de manera superficial y se apegaba a la secrecía en la investigación ministerial. Y el mismo diputado local del PRI expresó el reclamo de familiares de víctimas de no ser atendidos. Es más, a algunos los dejó esperando por dos horas y nunca fueron recibidos, ya que la señora no tenía argumentos para justificar su incompetencia.

El mismo Héctor Yunes le puso sal a la herida, al recordar que según la SEDENA, Cuitláhuac García tuvo vínculos con el crimen organizado. Verónica, como distractor, se fue a estadísticas y aseguró que en la FGE se hacía un buen trabajo. Y el diputado cerró su intervención al detallar que Veracruz tiene el primer lugar por la falta de resoluciones de investigaciones.

Y para cerrar este terrible ejercicio de rendición de cuentas, aparece Victoria Gutiérrez Pérez, terrible legisladora de Morena, quien se equivocó de ruta y se dedicó a ser la defensora de la 4T, de forma patética, con un discurso porril, como si estuviese en un evento proselitista, pero comprensible, pues debe agradecer su diputación plurinominal. Atacó a la oposición, cuando debe cuestionar a la fiscal general y pone a los gobiernos de la 4T como los “gobiernos de amor”.

Y dijo la extraviada diputada pluri: “No actuamos con venganza, jamás lo hacemos en este gobierno”, según esta diputada de Morena, quien sigue con el mismo discurso de Cuitláhuac García al barrer y criticar a las administraciones pasadas, cuando el mismo Cuitláhuac ya es del pasado. Y luego se contradice, pues confirmó el endeudamiento de los gobiernos estatales y esta diputada plurinominal se contradijo y mostró su ignorancia. Y para rematar, Victoria Gutiérrez pregunta a la fiscal general: “Cómo se pronuncia su apellido”, causando asombro y vergüenza entre la bancada de Morena.

Lo más interesante: Verónica Hernández Giadans negoció dejar el cargo en febrero, así que estemos pendientes de su próxima salida y posible ingreso al Penal de Pacho Viejo.

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