Fiscala: la peor enemiga de Morena

“Si me engañas una vez, tuya es la culpa. Si me engañas dos, la culpa es mía.” – Anaxágoras.

 

Vaya que nunca falta el negrito en el arroz, o de plano dos cosas estarían pasando en el Veracruz de las postrimerías de Cuitláhuac García Jiménez.

Mientras, por un lado, se pretendió dilatar el homicidio de un cineasta -mutilado- en la capital, por la intervención de un hermano del mismo mandatario estatal, la Fiscalía General del Estado (FGE) vuelve a ser noticia.

¡Y de qué forma!

Pues mientras el Organismo Público Local Electoral (OPLE) del Estado de Veracruz, entregaba las constancias a los diputados por la vía plurinominal, no hubo nadie de la FGE en espera del arribo del presunto prófugo Fernando Yunes Márquez.

Y aun cuando el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) presentó denuncias por presunto daño patrimonial en las arcas municipales del Puerto de Veracruz tras su desastrosa gestión, el sujeto se pitorreo de todos.

Vamos, es evidente que la titular de la FGE, Verónica Hernández Giandáns es cómplice del personaje, pues por un lado hace como que cumple con la Ley y por otro lado simplemente la dilata, queda claro que esta señora será la única responsable de lo que se le vendrá, seguramente su destitución y su declaratoria de prófuga de la justicia, para terminar, como han terminado todos los que en esa silla se han sentado, en la cárcel por bandidos.

Pero regresando al hecho de que el miembro del Clan Yunes pasee a sus anchas por Xalapa sin el mayor empacho, otras dudas comienzan a surgir.

La presunta declaración del próximo coordinador parlamentario de Morena, Esteban Baustista afirmando que no despreciarán el posible apoyo que esté a patriado pudiera realizar en favor del movimiento de regeneración votando iniciativas que ellos respaldan, es la muestra de un posible acuerdo o de un fuego amigo al interior de Morena.

Fuerte apretón seguramente habrá de dar la gobernadora electa Rocío Nahle García a los legisladores para de inmediato solicitar el que las instancias jurisdiccionales le nieguen la posibilidad de tomar protesta al Yunista, porque al menos ese era el discurso del mismo representante de Morena ante el OPLE, Gabriel Zúñiga Ovando.

Zúñiga Ovandon es un leal militante de Morena, que sigue órdenes directas de su presidente Esteban Ramírez Zepeta, quien se sabe está en comunicación permanente con la gobernadora Electa, Rocío Nahle y quien está en el entendido de no dejar llegar al yunista al Congreso Local.

Es más, en días pasados el mismo Ramírez Zepeta señaló que en Morena se reservaban el derecho de admisión con relación a la posibilidad de que este personaje, hoy prófugo y miembro de un clan que traicionó a la patria como afirman en la oposición se sumará a sus filas, pues evidentemente no comulga con los principios y valores de Morena, y responde más a intereses mezquinos y personales. Cosa que no se permitirá en el partido de la transformación.

La duda flota en el ambiente. ¿Existe un acuerdo cupular con los Yunes? ¿O le pretenden meter un caballo de Troya a Rocío Nahle?

La reacción a tan descarada falta será igual de proporcional a la fuerza de reacción que le están infringiendo a Morena, eso por simple Ley Física.

 

Al tiempo.

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