La guerrilla M-19 y su colusión con los culpables de la matanza del 2 de octubre de 1968 son los inicios de Claudia Sheinbaum Pardo, primera mujer presidenta de este país y tristemente obediente a las órdenes de López Obrador.
Hemos leído en notas periodísticas sobre la toma de protesta de Claudia Sheinbaum Pardo y algunos medios de comunicación nacionales la llaman “presidente”. Hay que aclarar, aunque nos guste o no, se impone el criterio de la Real Academia de la Lengua Española, la cual, subraya qué en el contexto de la gramática académica y contemporánea, el sustantivo “presidenta” es la forma correcta y debe emplearse con minúscula, siguiendo las normativas establecidas por la RAE y la Asociación de Academias de la Lengua Española. Ante la ausencia de importantes líderes de Estado a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum como nueva mandataria de México, lo que eclipsó este solemne evento, fue la “ocurrente” declaración del presidente de Colombia Gustavo Francisco Petro Urrego, quien no pudo contener el comentario y lo soltó como bomba, asegurando que Claudia Sheinbaum Pardo fue militante de la guerrilla del M-19 en México, la misma, incrustó a Omar García Harfuch como secretario de Seguridad Y Protección Ciudadana en este nuevo sexenio y omiten ser nieto de Marcelino García Barragán, quien fue secretario de Defensa Nacional en el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz y el encargado de la matanza de estudiantes del 02 de octubre de 1968, en Tlatelolco, en la hoy Ciudad de México. Les cuento.
Nunca olvidemos, que cada 02 de octubre, en México se conmemora la matanza, masacre, ejecución, desaparición y asesinatos de estudiantes en la Plaza de Las Tres Culturas, en Tlatelolco, en el entonces Distrito Federal, bajo la operatividad de militares, quienes estaban al mando de Marcelino García Barragán, el entonces secretario de la Defensa Nacional, durante el sexenio de Gustavo Díaz Ordaz y fue quien dirigió la masacre, detención y desaparición de centenares de estudiantes.
Muchos familiares de estas víctimas en Tlatelolco nunca pudieron localizarlos.
Recordemos otro suceso vergonzoso perpetrado por militares durante el gobierno de Luis Echeverría Álvarez, sobre el caso de Jesús Piedra Ibarra, hijo de Rosario Ibarra de Piedra acusado en 1973 de pertenecer a un grupo armado comunista llamado Liga Comunista 23 de septiembre y desaparecido en 1974, tras el asesinato del policía Guillermo Villareal Valdés. Esta desaparición fue perpetrada por militares y policías. Rosario Ibarra fue una activista de los derechos humanos con su colectivo Eureka y durante la entrega de la Medalla Belisario Domínguez, ésta no fue aceptada por Rosario Ibarra, quien dijo: “No quiero que mi lucha quede inconclusa. Es por eso qué dejo en tus manos la custodia de tan preciado reconocimiento y te pido (dirigiéndose al entonces presidente Andrés Manuel López Obrador) que me la devuelvas junto con la verdad sobre el paradero de nuestros queridos y añorados hijos y familiares.
Algo que nunca ocurrió en el sexenio de López Obrador y Rosario Ibarra murió sin conocer la verdad histórica. Muy al contrario, su hija Rosario Piedra Ibarra, actual titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, quien sólo atiende las necesidades de López Obrador y la CNDH se ha convertido en un florero, sin atender miles de injusticias.
Recordemos que Marcelino García Barragán es el abuelo paterno de Omar García Harfuch, protegido de Claudia Sheinbaum y será el secretario de Seguridad Y Protección Ciudadana, una dependencia sin policía, sin elementos, pues la Guardia Nacional. La Policía Federal de Caminos y la Policía Federal son manejadas por la Marina y el Ejército Nacional.
Quizá, para meter “jiribilla” o protagonismo a la toma de protesta de Claudia Sheinbaum, el presidente de Colombia Gustavo Francisco Petro Urrego informó, destapó o lo sacó a colación al asegurar y sin que nadie le preguntara, que la ahora presidenta de México fue integrante y militante, igual que él, en la guerrilla M-19 de Colombia, confirmando lo difundido en redes sociales durante la campaña presidencial en México y nadie lo había comprobado. La liga de esta declaración: https://www.proceso.com.mx/nacional/2024/9/30/claudia-sheinbaum-fue-militante-de-la-guerrilla-del-m-19-revela-petro-337675.html?fbclid=IwY2xjawFpMcJleHRuA2FlbQIxMQABHe5raIJCQqsXzIR9ff-PGG1ihqF4VLZCO2j2IsW2uXhexK2t_IbcIjiIWQ_aem_97ZYqr0xIkbb80zHpvhHrw
Y la pregunta obligada: ¿Por qué el equipo de la candidata a la Presidencia de México, Xóchitl Gálvez Ruiz no revisaron esta información que afectaría la imagen de Claudia Sheinbaum Pardo? Fácil, fue por demasiada confianza, incompetencia en su equipo de investigación y enorme omisión. Se confiaron y por eso perdieron.
Recordemos que el M-19 surgió como guerrilla en enero de 1974 y en marzo de 1990, se disolvió tras firmar un acuerdo de paz con el gobierno del presidente colombiano Virgilio Barco, convirtiéndose en un partido político en el mismo año. El Movimiento 19 de Abril (M-19) es un grupo guerrillero que imponía sus ideas mediante las armas. Con base al medio de comunicación con la liga: https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-61860867 en ella se confirma que el M-19 robó la espada de Simón Bolívar en 1974, hasta el secuestro y asesinato del líder sindical José Raquel Mercado.
Lo interesante, que la actual presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo se integró a grupos armados y antagónicos, quienes usaban su voz y exigencia con las armas, algo ilegal y violenta la Constitución de nuestro país, siendo estas guerrillas perseguidas por el Ejército mexicano.
Por último, ¿La nueva mandataria federal realizará acciones como guerrillera? o ¿Asumirá el papel de jefa de las Fuerzas Armadas, bajo un proyecto para la pacificación de México? Si continúa con la misma constante de López Obrador, sobre “Abrazos y no balazos”, se relajará aún más la seguridad y los militares no podrán controlar la soberanía del país. Y esa misma soberanía, con su pasado guerrillero y aliada de dictadores, fue la causa de la pírrica presencia de líderes de Estado a su toma de posesión. Fueron 16 mandatarios y jefes de Estado, entre ellos dictadores como Cuba y líderes de presunta izquierda, quienes son investigados por la DEA en Estados Unidos. por su apoyo y colusión con grupos criminales como Colombia, Honduras, Guatemala y Brasil, todos ellos con baja aceptación y constantes manifestaciones sociales. Y la esposa de Joe Biden, asistió y se asegura que vino con el mensaje nada agradable para la propia Claudia Sheinbaum, quien deberá de sacudirse a López Obrador o saldrán a la luz las investigaciones de la DEA y sacarán más evidencia de cómo en realidad esta nueva ungida mandataria ganó la Presidencia de México.
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