Los policías recibían órdenes y el gobierno de Cuitláhuac García los quieren utilizar como chivos expiatorios y cargarles toda la culpa.
Con la detención de Juan Carlos “N” y Joel “N”, estos exelementos de la Policía Fuerza Civil, pertenecientes a la Secretaría de Seguridad Pública, son los mismos a quienes se les creó una Carpeta de Investigación muy desaseada, omisa con los autores intelectuales, sólo culpando a dos policías de todo y con la firme intención de proteger a los jefes policiacos encargados del desalojo, quienes fueron los responsables de dar la orden del retiro violento de manifestantes y asesinado a dos habitantes de Totalco, en el municipio de Perote. El pasado 20 de junio, los inconformes habían cerrado las vías de comunicación de la carretera Perote-Puebla, a la altura de las Granjas Carroll, ante la falta de diálogo entre la CAEV, la Secretaría de Gobierno y Política Regional, dependencias con gran omisión a los verdaderos problemas de Veracruz y le “aventaron la papa caliente” a la SSP con terribles resultados y víctimas qué lamentar.
Aquí el gran tema es el acaparamiento de agua por parte de una empresa extranjera en Perote y la contaminación al medio ambiente, pues Granjas Carroll fue sancionada desde marzo de 2023, por la Procuraduría de Medio Ambiente y el gobierno de Cuitláhuac García guardó silencio cómplice.
Este viernes se confirmó que únicamente dos policías de baja jerarquía y quienes acataban órdenes fueron vinculados a proceso y utilizados como medio por los mandos de la SSP y del Gobierno del Estado. La tropa de SSP está molesta y nos comenta: “Como ya es del conocimiento de la ciudadanía, el día de ayer la FGE dio a conocer con bombo y platillo la supuesta detención de dos compañeros operativos de esta Secretaría por el caso de Totalco, pero la gran pregunta es ¿Hasta cuándo nos seguirán sacrificando y poniendo como su trofeo ante la ciudadanía? ¿Será que también detendrán a algún mando? Es muy sencillo seguir exhibiéndonos, es muy fácil lavarse las manos para los jefes, siempre ellos se libran, siempre ellos nos dejan en el olvido cuando el problema explota”.
Y es que elementos de SSP nos advierten que los jefes policiacos siempre presumen tener “línea” del secretario de Seguridad Pública Cuauhtémoc Zúñiga Bonilla, con distintivo “Gato Choncho”, y del subsecretario de SSP, con distintivo Baltazar o del director de Operaciones, con distintivo Tigre, quienes siempre recalcan seguir una instrucción o de lo contrario “los van a reventar”. Con la detención de Juan Carlos “N” y Joel “N” sacrifican al más débil, siendo personal operativo. Resulta injusto que los jefes no respaldan a la tropa y en las reuniones operativas, esos mismos jefes afirman que harán “paros”, cualquier problema generado siempre estarán para respaldarlos, siendo todo esto una mentira, dejándolos en el olvido con tal de cuidar el cargo y su placa de altos jefes de SSP.
Lo lamentable, la falta de ética y no tener remordimiento de conciencia del aún secretario de Seguridad Pública en Veracruz, Cuauhtémoc Zúñiga, quien sólo está interesado en ser uno de los nuevos millonarios de la administración de Cuitláhuac García y violentar los derechos de la ciudadanía. No es un secreto la enorme cifra de dinero reportada al titular de SSP cada mes, por todos los agrupamientos y delegaciones en Veracruz. También existen comandancias en puntos estratégicos, gracias a su ubicación geográfica y generan muchos ingresos, contabilizando 24 comandancias que aportan en promedio $200 mil pesos, contabilizando $4 millones 800 mil pesos de sobornos.
Existen otras corporaciones que generan dinero aparte, como la División de Policía, Seguridad en Centros Penitenciarios, Policía Vial, Grupo Motorizado y Fuerza de Reacción. Estas comandancias son punto y aparte, pues todos los elementos operativos que han estado en alguna de ellas saben los números de dinero que pueden llegar a reportar y si hacemos cifras, cada una de ellas por sí solas pueden llegar a reportar hasta $500 mil pesos cada mes, siendo un total de $2 millones 500 mil pesos.
Un negocio redondo para los pillos que comandan la SSP en Veracruz. Y Cuitláhuac García lo sabe.
No debemos olvidar los ingresos que genera la aún existente Fuerza Civil, la misma ha sido señalada de estar en manos del Policía acusado de comandar grupos delincuenciales, Andrés Humberto Segura Barradas, con distintivo Fénix, al ser independiente de los demás agrupamientos y con presencia en diferentes puntos importantes y estratégicos del Estado. En ingresos, puede llegar a generar hasta un millón de pesos mensuales y se está ingresando mes con mes se calcula la cantidad de $8 millones 300 mil pesos, sin contar lo que le reporta su “Cartel de los Corralones”, que semana a semana ingresan vehículos de manera arbitraria a los diferentes corralones del estado y ya hemos informado en anterior entrega que algunos empresarios de grúas tienen negocios con integrantes del crimen organizado. La liga para recordar esta entrega en: https://periodicoveraz.com/el-cartel-de-los-corralones-es-conformado-por-altos-funcionarios-de-ssp-veracruz/
Estas empresas de grúas exponen la vida de los ciudadanos, sin importarle al secretario de SSP, ni al subsecretario, mucho menos al Director de Operaciones. A ellos, lo único que quieren es poder terminar su mandato con dinero para resolver lo que les resta de vida, sin importar a quien afecten, pues ellos saben perfectamente que su ciclo está por terminar. Lo mismo ocurre con policías de bajo rango, a quienes los entregan como moneda de cambio, con tal de mantener limpia su placa y nombramiento de titular de SSP.
Y finalmente, compartimos un reclamo generalizado de los policías en la SSP en Veracruz: “En nombre de todos mis compañeros operativos de esta Secretaría le pedimos encarecidamente al Señor Gobernador que se llegue a las últimas consecuencias y que también los mandos sean juzgados, porque nosotros como operativos no nos mandamos solos y el abuso de autoridad también lo comete quien va al mando del operativo y nos da la instrucción de ir sobre los ciudadanos, si en realidad se hará justicia, entonces que se haga hasta las últimas consecuencias y no solo con unos cuántos. Muchas veces se nos quiere juzgar como unos auténticos delincuentes, cuando los verdaderos delincuentes son los que están en las oficinas dando órdenes a través del radio, ellos son los que en realidad se están haciendo ricos a costa de ordenarnos hacer cosas que no están acorde con la ley y muchas veces en contra de nuestra voluntad”.
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