Que el “sapo” que filtró información de las propiedades de la candidata Nahle fue el “caza chichifos” Ramírez Zepeta. Se indignó porque lo ningunearon

Que el “sapo” que filtró información de las propiedades de la candidata Nahle fue el “caza chichifos” Ramírez Zepeta. Se indignó porque lo ningunearon

El periodista Raymundo Jiménez, uno de los más informados sobre lo que pasa en el estado de Veracruz, revela en su más reciente columna, Al Pie de la Letra, que las sospechas sobre la filtración de información sobre las propiedades de la candidata Nahle recaen cobre el “caza chichifos” Esteban Ramírez Zepeta. Y es que el dirigente estatal de Morena ya andaba prometiendo a sus “muchachitos” cargos de elección popular. ¡Imagine usted! Si por Ramírez Zepeta fuera, hubiéramos tenido al primer escort de Mil Eróticos como diputado en el Congreso veracruzano. Dice el periodista Raymundo Jiménez sobre una reunión urgente llevada a cabo en Casa Veracruz: “En cuanto trascendió este conciliábulo y se esparció en las redes sociales, del círculo cercano al gobernador comenzaron a investigar sobre el autor de la filtración. En un principio se lo atribuyeron a alguno de los exfuncionarios de la Secretaría de Gobierno que recién fueron separados de sus cargos por órdenes de Nahle y que aún mantienen contactos en la administración. Sin embargo, ayer trascendió que las sospechas habrían recaído en el dirigente estatal de Morena, Esteban Ramírez Zepeta, quien últimamente andaría muy resentido por el supuesto ninguneo de la candidata a gobernadora”. A Ramírez Zepeta, siendo dirigente estatal de Morena, le ofrecieron ser suplente en una diputación plurinominal donde el titular era Diego Castañeda Aburto, secretario particular de la señora Nahle. Inconforme por ese ninguneo, al parecer Ramírez Zepeta buscó la manera de vengarse; al todo indica que se vengó. Ya lo dice el dicho, “no es indio el que no se venga”.

Loret de Mola dice: “El presidente López Obrador sabe lo que están haciendo sus hijos. Lo facilita. Lo permite. Es cómplice”

El presidente López Obrador pide pruebas sobre la corrupción de sus hijos, sobre la corrupción de sus colaboradores, pero cuando se las llevan, no las acepta, ni siquiera las quiere recibir. Entonces, ¿para qué sigue pidiendo pruebas? Pues la solicitud de pruebas es parte de su discurso, su intento por hacer ver que él no está enterado, porque no tiene pruebas. Pero López Obrador sí está enterado. Así lo dice el periodista Carlos Loret de Mola: “El presidente López Obrador sabe lo que están haciendo sus hijos. Lo facilita. Lo permite. Es cómplice”. En su columna publicada en El Universal el periodista anota: “Un reportaje de Mario Gutiérrez Vega y Mauricio Rubí en Latinus, presentó nuevas grabaciones telefónicas de Amílcar Olán en donde platica de una reunión con el presidente López Obrador, a quien dice que va a alcanzar en Oaxaca para amarrar unos negocios en la refinería de Salina Cruz. López Obrador conoce a Amílcar Olán. Se ha reunido con él. Es amigo de sus hijos desde la infancia. Y sabe dónde tiene metidas las manos, como engrane central de este pulpo de tráfico de influencias que es El Clan: Tren Maya, Dos Bocas, Pemex, CFE, medicinas”. Pero no sólo eso, Amílcar Olán, prestanombres de los hijos de López Obrador, sabe que de ganar Javier May la gubernatura de Tabasco, él se cubrirá de más impunidad y asegura que hasta senador llegará a ser.

AMLO, el rey de los miserables. Sobre el caso de Emiliano: “Es mentira que querían secuestrar a su madre. Creo que quisieron llevárselo a él. Todo lo magnifican. Me quieren perjudicar”

En México cuando asesinan a un niño de 11 años, la víctima no es el niño, la víctima es López Obrador. Al ser cuestionado en su conferencia mañanera sobre el caso de Emiliano, el niño asesinado a las puertas de su casa en Paraíso, Tabasco, el presidente no mandó condolencias a sus familiares del niño asesinado, antes bien el presidente dijo que todo lo sucedido se magnificó para perjudicarlo. En la mañanera el presidente declaró: “Muy lamentable lo que pasó en mi tierra en Paraíso con este niño, nada más que se están haciendo las investigaciones ya se tiene avances para detener a los responsables. Lo que se manejó mucho ayer es que lo habían asesinado porque él quiso evitar que secuestraran a su mamá, su abuelita habló, pero no tiene que ver con el supuesto secuestro de la madre. Creo que quisieron llevárselo a él. Todo lo magnifican, me quieren perjudicar. Qué se puede esperar si su dios es el dinero”. Así de miserable el presidente de México que ignora que lo que está pasando en el país es responsabilidad suya. Pues con su política de “abrazos, no balazos”, le ha dado a los delincuentes licencia para matar, hasta a los menores de edad.

Armando Ortiz                        Twitter: @aortiz52                  @lbajopalabra

Related posts

Yasmín Esquivel, el cinismo y descaro llevado a su máxima expresión. Plagió su tesis de licenciatura, pero dice “soy una mujer producto de la cultura del esfuerzo y de valores”

El México que nos heredó López Obrador: PEMEX, la peor empresa del mundo, reporta pérdidas por 161 mil 500 millones de pesos mexicanos