Este lunes el gobernador Cuitláhuac García se levantó sobradito de entusiasmo y dijo que en lo que va del año se han registrado 19 días sin homicidios dolosos en Veracruz.
La bronca es que de ahí no pasa. En 2022 dijo exactamente lo mismo, solo que para contabilizar esos 19 días sin homicidios tuvieron que pasar seis meses porque el anuncio lo hizo hasta julio de ese año.
Pero en la realidad del 2024, son 106 días los que han transcurrido del 1 de enero al 15 de abril, si se le restan los 19 con saldo blanco quedan 87 en los que se registraron asesinatos, balaceras, masacres, feminicidios y se contabilizaron decenas de desmembrados.
De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el primer bimestre de este año aumentaron en la entidad los secuestros, el abuso sexual, la extorsión y el narcomenudeo comparados con el 2023.
Parafraseando a los abuelos; “¿entonces dónde está la ganancia?”
Veracruz no sólo es muertes con violencia y delitos a lo bárbaro; también es fuego.
En 106 días se han registrado 78 incendios forestales que el personal contra incendios no ha podido controlar porque no hay personal contra incendios.
Con eso de la austeridad republicana una de las dependencias más cepilladas fue la Dirección de Protección Civil cuyo personal sobreviviente hace lo que puede junto con elementos del Ejército, policías y las personas afectadas.
En Nogales, el fuego llegó a dos comunidades y dejó sin techo a diez familias por las que el gobernador no ha hecho absolutamente nada.
¿Visitó ya los lugares siniestrados?
Uta no, cómo vas a creer lector. Ni que fuera bombero.
El incendio que se desató hace tres días en el paraje Ocozotitla del Cerro perteneciente al municipio de Río Blanco (una zona densamente boscosa y de difícil acceso) ha afectado hasta el momento 15 hectáreas, pero amenaza con arrasarlo todo entre otras cosas, las pertenecías de decenas de familias, ante la falta de agua provocada por la sequía inclemente.
Lo bueno es que el gobernador ya prometió un avión con material químico para sofocarlo cuando mínimo se necesitan cuatro aviones o helicópteros.
Y ya que hablé de sequía, más de la mitad del territorio estatal la padece desde hace más de un año, pero se ha recrudecido en los primeros meses de este 2024.
Ya no es noticia que habitantes de municipios del norte, centro y sur de Veracruz protesten en las plazas y cierren carreteras en demanda de agua.
En Xalapa el destino alcanzó a los xalapeños sobre todo de la periferia donde es común ver a pipas repartiendo el vital líquido a la población sedienta.
El alcalde Ricardo Ahued dijo que se necesitan 2 mil millones de pesos para ductos y tuberías que traerán el agua de zonas lejanas y con ello se resolverá el abasto en la ciudad. Pero el gobernador ni lo volteó a ver.
Mira que insinuar que le suelte 2 mil millones de pesos en tiempos electorales y cuando le faltan unos meses para entregar a su sucesor lo que queda de Veracruz, vaya ocurrencia.
El martes en la mañana fue asesinado a balazos el ex alcalde de Tlilapan, Félix Cruz Lastre, quien era asesor del ayuntamiento de Rafael Delgado. Su esposa resultó herida en el ataque.
Con lo anterior, el día 20 sin asesinatos violentos tendrá que seguir esperando, pero se crispa el panorama electoral porque con el asesinato de Félix suman diez los actores políticos atacados, cuando el propio gobernador prometió que estos crímenes no se repetirían como sucedió en 2021.
“Estamos encaminados a garantizar las condiciones de democracia y seguridad en las elecciones”, dijo hace unas semanas. Pero diez políticos violentados lo están contradiciendo.
En fin lector, mientras Veracruz sigue hundiéndose en todos los sentidos, este lunes Cuitláhuac García se subió al campanario a tañer las campanas porque la entidad lleva 19 días sin homicidios dolosos en lo que va de este año.
Futa…
Qué desvergüenza y qué inmoralidad, pero sobre todo, qué falta de respeto al millón 600 mil veracruzanos que con su voto no sólo lo llevaron al poder sino que además, quisieron hacerlo gente.