El sendero para la democracia y libertad de los mexicanos es Xóchilt Gálvez. No son sus dientes o peso lo que importa- eso es fútil- sino su fuerza. Su indiscutible liderazgo. En el desánimo generalizado del camino erróneo de la nada aparecía una mujer valiente que enfrentaba al presidente. La única que desafiaba al Estado y a los mismos partidos desprestigiados con pujanza. Llegó y su personalidad arrolla. Inteligencia indiscutible y fuerza de guerrera que ha podido superar todos los ataques a su persona. La pobreza no es una limitante cuando se aspira a lo mejor. Paliar el dolor de las carencias elementales. *** Valentía, convicción al enfrentarse a la misógina y machismo de un presidente colérico, resentido, lleno de odio. Un ser vacío de sentimientos que solo ve por su negocio y usa los apoyos sociales para comprar el voto. Xóchilt recoge la angustia, dolor de cientos de miles de madres rascando con sus manos ensangrentadas la tierra donde anhelan encontrar los restos de sus seres perdidos. Que han esperado por años sin rendirse verlos regresar. Le duele la incertidumbre de los padres de niños y mujeres con cáncer que no hay medicamentos para su alivio. *** Sabe del derroche en los elefantes blancos que en algún momento será terrible para la economía maltrecha del país. Esta consciente de eso y más. Ella sí es un Quijote que se enfrenta a los molinos. Su sencillez habla. Los mexicanos no tenemos otra ruta para salir del abismo. El destino reta. Sacude y tiene luz propia. ¡Animo Xóchilt! Te necesitamos. *** La justicia tarda, pero llega. Aquellos que han dilapidado el dinero del erario tienen que pagar. Esos cientos de miles de millones que servirían a beneficios públicos tirados en promover a su candidata. *** Senadores y diputados corruptos ya acomodados en los congresos de MORENA. *** Y para las agruras…