El adiós de Anilú

“El verdadero carácter siempre aparece en las grandes circunstancias.” – Napoleón Bonaparte.

Dicen que todo lo que empieza debe de terminar, así la tarde de este martes 20 de diciembre fue el final de 20 años de militancia en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) para Anilú Ingram Vallines.

Dos veces diputada local y una federal, la porteña acumuló mucha experiencia como buena tribuna en su paso por el Poder Legislativo.

Trunca aspirante a la gubernatura por el PRI, demostró lo que para muchos es un berrinche por no haber logrado obtener un nuevo espacio político –o como coloquialmente dicen por no lograr un hueso- o confirmó que tenía más pantalones que muchos compañeros.

La realidad para la sociedad podrá estar marcada por esa posible dualidad, lo cierto es que con ella, se van más de 800 priistas que a lo largo y ancho del territorio veracruzano no coinciden con el comportamiento de Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas.

Un presidente nacional indiferente a la realidad del país, incapaz de ganar una elección –los resultados de los procesos anteriores, confirman que no gana ni su seccional-, que se ha encargado de desmantelar lo que quedaba del Instituto Político, para conservar un cascarón en el que solo tienen lugar sus aduladores, cómplices y soplanucas con los que se siente cómodo para terminar de acabar con los ideales de ese PRI otrora poderoso.

La legisladora local, afirmó “He presentado mi renuncia a mi militancia porque en el PRI de Alito, ¡yo no me quedo! En un acto de conciencia, congruencia y amor a mi estado, no podía quedarme a ser cómplice por omisión, del secuestro de una institución política que sí sirvió a México por casi un siglo, pero que hoy solo sirve a los intereses más oscuros, los caprichos de un hombre sin escrúpulos, los acuerdos debajo de la mesa y el hambre de poder de un grupo que nada ve por el bien común”, sentenció en conferencia de prensa celebrada en el Gran Hotel “Mocambo” de Boca del Río en la que estuvo acompañada por el actual Alcalde de Cuajimalpa, Adrián Rubalcava y el ex gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat.

Luego de agradecer a toda la gente valiosa que conoció a su paso por el PRI, informó que quienes la acompañaron son integrantes el Grupo Veracruz, cuadros destacados de la política veracruzana como ex presidentes del partido, ex alcaldes y ex diputados federales y locales, así como ediles en funciones y estructura territorial, se suman a la Alianza Progresista presentada este martes 19 en la Ciudad de México.

Con ella seguramente inicia la desbandada de militantes, que no encuentran ya espacio en un instituto político maniatado, secuestrado y en donde las actuales dirigencias no escuchan las voces de la militancia, que es finalmente la razón de ser de los institutos políticos.

El boquete que habrá de infringir significa un mayor reto para el actual aspirante a la gubernatura, José Francisco Yunes Zorrilla, quien inexplicablemente no le importó consensar con todos los cuadros a pesar de las diferencias de opinión, y con ellos, intentar conservar una militancia valiosa que en estos momentos debiera sumar.

Aun cuando la campaña está por empezar para los aspirantes a la gubernatura, la realidad es que los integrantes de la que será la Coalición Fuerza y Corazón por Veracruz, nace sin fuerza, sin corazón y sin un Veracruz.

Esperemos que apoyos como el anunciado por Julen Rementería del Puerto le alcancen a Pepe Yunes para lograr dar una pelea honrosa, porque de seguir los anuncios de renuncias, al rato el PRI ni representantes de casilla va a tener el domingo 2 de junio de 2024, día de la elección.

Anilú Ingram encontrará nuevo derrotero en el Partido Verde Ecologista (PVEM) donde seguramente aportará su capacidad y talento político por el bien de Veracruz y sobre todo de su gente.

 

Al tiempo.

 

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Twitter: @LuisBaqueiro_mx

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