Negado para hablar en público porque nunca aprendió; con un coeficiente intelectual por debajo de la medianía; con limitados conocimientos sociales y políticos, pero con sobrada fidelidad hacia su mentor y trepado en la cresta del tsunami obradorista del 2018, Cuitláhuac García no tuvo problemas para ganar la gubernatura de Veracruz en su segundo intento. Los problemas llegaron después, cuando en el ejercicio del poder sacó a relucir al represor intolerante que lleva dentro.
Sus abusos de autoridad traspasaron las fronteras de la entidad, lo mismo que la violencia en que tiene sumido a Veracruz.
Sobre esto último el periodista Héctor de Mauleón señala en su columna El Veracruz de Cuitláhuac: “Durante el gobierno del morenista Cuitláhuac García, una oleada siniestra de cuerpos desmembrados, decapitados y embolsados ha cubierto todos los puntos de la geografía veracruzana”.
Agrega que a últimas fechas fueron encontrados 9 en Vega de la Alatorre, 4 en Maltrata, 3 en Tihuatlán, 5 en Cerro Gordo, 5 en Jesús Carranza, 9 en Cosoleacaque y en los primeros cuatro meses de este 2023 se han cometido 11 masacres. Por cuestión de tiempo ya no pudo reportar el hallazgo de dos mujeres y un hombre embolsados en Maltrata este jueves.
“Un reporte hackeado a la Sedena por el colectivo Guacamaya reveló que el crimen organizado recibe apoyo, en Veracruz, de los tres niveles de gobierno. A altos funcionarios de la administración de Cuitláhuac García se les ha acusado de recibir sobornos de manos de la delincuencia. Según la Sedena, el 70% de la superficie del estado registra la presencia y está controlada por grupos criminales”, denuncia.
De Mauleón remata su columna: “Cuitláhuac García es el gobernador que pasea féretros frente a la Suprema Corte, pero no voltea a ver las carrozas fúnebres que recorren, de arriba a abajo, todos, absolutamente todos los caminos de su estado”.
Carlos Marín destaca en su columna en Milenio el espíritu intolerante y represor de Cuitláhuac, que detuvo arbitrariamente a la jueza Angélica Sánchez y ahora persigue de manera implacable a la periodista Claudia Guerrero.
Pero el que se le fue con todo al “honesto gobernador” desde la primera línea de su columna del pasado miércoles, fue Raymundo Riva Palacio: “Cuitláhuac García se escribe con una S mayúscula, de Sátrapa. Gobierna Veracruz de manera déspota, resguardado en el regazo político del presidente Andrés Manuel López Obrador. Es arbitrario y atrabiliario, ensoberbecido por un poder regalado que es, sin embargo, finito. Ni la protección de López Obrador durará para siempre, ni el blindaje que hoy le provee el Presidente será indestructible. Pero los abusos de poder en los que ha incurrido y los excesos retóricos al atacar a todos, no pasarán al olvido”.
Después de enumerar los abusos del gobernador contra sus adversarios políticos a los que tiene encarcelados injustamente; después de denunciar la detención ilegal de la jueza Angélica Sánchez; la arbitraria persecución contra la periodista Claudia Guerrero y de hacer un recuento de las atrocidades que padece la entidad por la incontenible violencia, Raymundo remata con una frase lapidaria y sin duda premonitoria. “Cuitláhuac García debe muchas y habrá de enfrentar consecuencias. Los sátrapas en este país tienen poder e impunidad efímeros. Ya lo verá”.
Con la detención de la jueza Angélica Sánchez y la persecución de la periodista Claudia Guerrero, Cuitláhuac rebasó todos los límites y ha metido en un predicamento a su mentor el presidente e incluso a sus jilgueros de los medios que ya no saben cómo ayudarlo.
Será un lastre para el candidato o candidata de Morena a sucederlo en el cargo. De hecho ya lo empieza a ser.
Una encuesta realizada por Massive Caller revela que aunque Morena sigue arriba en las preferencias electorales rumbo a la gubernatura, la Alianza Va por Veracruz se le acerca peligrosamente.
Morena lleva 44.1 por ciento sobre el 30.2 por ciento del PAN, PRI y PRD, es decir, 14 por ciento de ventaja en números cerrados. Pero en febrero punteaba con 54.3 por ciento de aprobación por el 20.4 por ciento de la Alianza. Y esto está prendiendo los focos rojos en el partido guinda porque en cuatro meses han perdido 10 puntos porcentuales y nadie pone en duda que esto se debe a las malas artes de Cuitláhuac.
Pero sin alcanzar a comprender que está bien sumido en el hoyo, Cuitláhuac aún se dio tiempo para seguir con sus gracejadas. Este jueves sacó a la luz una burda copia de la burda sección de Andrés Manuel “Quién es quién en las mentiras” con el original título de “El Pinocho de la semana” que dará tema para más adelante.
¿Y qué más ha hecho? Pues nada que no sea seguir desgraciando a Veracruz y soñar con que Claudia Sheinbaum se lo llevará como Secretario de Gobernación (si gana la presidencia) después de que la “ayude” en la coordinación de su campaña.
Pobre, como el cerebro no le da para más, no alcanza a dimensionar que ningún sátrapa ha terminado bien en esta vida; ninguno. Y él es un sátrapa.
Ahí le hablan, doña Aurelia
El diputado federal José Francisco Yunes Zorrilla, destacó la solicitud de barras de abogados para iniciar un posible juicio político contra la presidenta del Poder Judicial en Veracruz, Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre.
Yunes Zorrila dijo que es inadmisible la persecución a los impartidores de
justicia y lamentó que la autonomía de los jueces haya sido vulnerada por acatar disposiciones federales.
“Se hace presuponer que hay un total deterioro del Estado de Derecho en Veracruz y el uso faccioso y sesgado de las instituciones de justicia lo cual es un proceso terrible y una alarma de que se está perdiendo la normalidad democrática”, indicó.
El peroteño manifestó que si existen violaciones al marco jurídico federal la Cámara de Diputados se puede iniciar el juicio político. Sin embargo, reconoció que Morena tiene los votos suficientes para evitar que la petición pase tanto a nivel local como federal.
Dijo que se están reviviendo escenarios que tenían al menos 40 años de no ocurrir en la entidad, como la persecución política y la interpretación torcida de la ley de parte de las instituciones que tendrían la obligación constitucional de hacer valer el marco del derecho.
“Hay que ponderar mucho los comentarios informados, conocedores de la materia. Si hay violación a leyes federales evidentemente estarán sujetos los integrantes del Poder Judicial estatal en este caso del Tribunal Superior de Justicia a podérseles iniciar un procedimiento a nivel federal si es que la violación es de nivel jurídico federal o a nivel estatal”.
La imparable bola de nieve ya comenzó a rodar y bueno será que la magistrada presidenta vaya consultando a un buen bufete de abogados.