En febrero de 1999 -en visita de placer de Don Luis Echeverría Álvarez, Presidente de México (1970-1976) a la Cuenca del Papaloapan- le asistí logísticamente por encomienda del Señor Gobernador del Estado Don Miguel Alemán Velasco, y comentó que “en nuestro País el poder dura cuando mucho seis años y a veces hasta menos”.
Puntualizó también -sentado en típico sillón cuenqeño- en esa charla después de comer, dos apuntes que vienen al presente.
En México a nadie conviene tener un Presidente mermado en su salud. Y además, todos y desde cualquier óptica política estamos obligados a tratar de servir a la nación y al Jefe del Ejecutivo,- máxima autoridad,- al interior y exterior.
Ahora bien, toda figura como Autoridad en el País (Presidente, Gobernador o Alcalde), por razones de orden natural del ejercicio provoca un amplio desgaste en todos los sentidos y en especial en la salud integral por el tiempo y presiones.
Esa disminución o merma eventual no amerita ni debería ir a los abismos de la inconsciencia al grado de vandalizar a niveles de especular y desinformar o tratar de hacerlo ante la comunidad en su conjunto.
Para todos resulta lamentable que haya quienes no tengan respeto al dolor que provoca a los pacientes y sus familiares el portar un virus de altos niveles de daño como ya se conoce que el Covid-19 provoca.
La solidaridad y el respeto que nos ha caracterizado al pueblo de México en momentos de dolor humano en otras latitudes y personalidades del universo público local y extranjero, debe también prevalecer en este momento en favor de la salud de Don Andrés Manuel López Obrador; así lo creo, pienso y siento.
Desde el arranque del sexenio federal el promedio de edad es de casi 60 años, una de las cifras más altas en los tres más recientes mandatos. Situación que por supuesto aumenta la posibilidad y probabilidad de estos vaivenes. Y sin omitir que hay personajes de más de 80 años de edad, pero con capacidades y talentos probados.
Guardemos las especulaciones y no dejemos de observar que la salud física de nuestras autoridades siempre nos aumenta la garantía de que todo estará mejor para todos.
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
Hay quienes aseguran que posterior a la agenda presidencial del día viernes 21 de abril en Veracruz, se extendió a una larga y privada reunión en instalaciones de la conurbación a donde el Jefe del Poder Ejecutivo Federal, y acompañado sólo de sus mandos -militar y naval-, el Secretario de Gobernación y el Gobernador. De ser así; “pa qué adivinar lo que se va a saber en fechas venideras”.
DE SOBREMESA
La coordinación interinstitucional entre el Gobierno del Estado de Veracruz y el Ayuntamiento de Boca del Río entorno al SALSA FEST 2023 para los primeros días de junio próximo, muestra que los esfuerzos coordinados y de la mano con el sector privado, favorece el bienestar y la armonía con impacto en materia de desarrollo económico, turístico y de servicios. ¡Que siga la rumba!
UN CAFÉ PARA LLEVAR
El Hackeo -dicho técnicamente-, es un daño informático – recientemente y extrañamente en los últimos meses ya son varias las dependencias públicas de la Federación a las que incluso les han destruido entre parcial y totalmente sus archivos, ojalá este fenómeno no siga creciendo ni se extienda a otros niveles.
¡ ES CUANTO !