Genuinamente mexicano es el hombre que accede- en realidad tengo un conocimiento muy superficial al respecto- a hablar del corrido: Ignacio López Tarso. El recio actor, en su reducido y discreto despacho de la Secretaria General de la ANDA- dónde sólo sobresale un dibujo a lápiz de Nájera en la caracterización del personaje de su película El Gallo de Oro y una barrica de tequila con su nombre grabado como única ostentación personal- con voz sonora relata: “mi interés por decir, contar, narrar el corrido es darle la importancia mayor al texto, que es lo que realmente vale”. Es la introducción de la entrevista con uno de los grandes del cine , teatro y televisión nacionales. De la Época de Oro. El líder sindical me pareció frío. El artista fue un poco más relajado. Fumaba unos cigarros franceses de tabaco oscuro. De rasgos fuertes y mirada penetrante, el actor de carácter nos habló sobre el corrido mexicano. El Gallo de Oro fue basado en una novela de Juan Rulfo. Con una adaptación realizada por Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez. Tal vez por ello y su elocuente actuación la distinguía cómo único documento valioso en su pared. Fue un honor poder conversar con un gran actor, de inmensa cultura y gran sensibilidad. Un pequeño homenaje de mi parte. En paz descanse.