Cuánta mezquindad del gobierno de MORENA al demeritar la unión ciudadana. El Peje solo sirve a su partido. No cuaja como jefe de Estado. Su tribuna de Palacio Nacional- propiedad de la Nación- sirve diariamente para hacer campaña. No produce. Genera odios y enconos en contra de la clase productiva. Ya no molesta porque sabemos sus trillados argumentos. Dejémoslo con sus aberraciones. Lo importante es que se demostró la altura que la ciudadanía alcanzó. Era patriotismo lo que flotaba en el ambiente festivo, alegre, de concordia en todos los lugares donde nos reunimos. Esa emoción, al llanto, de cantar el Himno Nacional a todo pulmón. Estremecedor en aquello de “un soldado en cada hijo te dio”. Los apátridas solo buscan no dejar el poder. Se hunden en su ambición.