Quienes andan corriendo a Cuitláhuac García de la gubernatura casi desde el comienzo de su administración, aseguran que el ingeniero mecánico electricista “ahora sí se va”. Y basan su tesis en declaraciones del propio gobernador con motivo de su Cuatro Informe.
Cuitláhuac anunció que el Informe lo dará el 16 de este mes en Pánuco “en un lugar muy grande, pero sin invitados especiales… Ya tenemos el lugar, va a ser inédito”.
¿Lugar muy grande? Sólo que sea la Unidad Deportiva, el parque principal del municipio o alguno de sus vastos potreros.
Si lee su mensaje en cualquiera de esos sitios será un acto inédito porque no se tiene registro que en la Unidad Deportiva, el parque principal y menos en los potreros panuquenses, gobernador alguno haya rendido un Informe de labores.
La idea es llenar el recinto seleccionado con miles de acarreados para homenajear al gobernador que se nos va porque se integrará en los meses por venir, a la campaña de Claudia Sheinbaum rumbo a la presidencia de la República.
Al menos así me la contaron.
En lo personal lector no creo semejante cuento. Si hay alguien a quien Claudia quiere ver pero a años luz de distancia, es a Cuitláhuac García.
¿Pero por qué si son tan cuates? Cuates sólo para la foto.
Es cierto que cuando se encuentran se sonríen y se apapachan; es cierto que Cuitláhuac no pierde oportunidad de subir a sus redes sus fotos con la Jefa de Gobierno capitalino. Es verdad que en público la señora se expresa muy bien del gobernador veracruzano. Pero de eso a aceptarlo siquiera como carga maletas durante su campaña “ni loca que estuviera”, dicen que dijo.
Aunque la mujer no se manda sola y sabe que si de Palacio Nacional se lo imponen, no le va a quedar de otra que apechugar.
El rumor sobre la inminente salida del gobernador volvió a tomar fuerza porque al parecer la futura candidata de Morena a sucederlo en el cargo, Rocío Nahle, no le tiene confianza; tampoco a los cuitlahuistas. “Rocío tiene presente que si sigue Cuitláhuac en la gubernatura se convertirá en un lastre para su campaña. También desconfía de su gabinete, principalmente de Eric Cisneros al que mi patrona hizo gente pero le ha pagado muy mal”, me dijo un cercano a la zacatecana.
Esto sí es más creíble.
Si uno de los peores gobernadores que tiene el país como lo es Cuitláhuac sigue en el cargo, incidirá negativamente en la campaña de Rocío. Y es que los adversarios del gobernador (que los tiene por racimos), le echarán en cara a la zacatecana todos los desatinos del mandatario estatal lo que provocará que haga una campaña a la defensiva.
En resumen; si a lo que no ha hecho por Veracruz ni como senadora ni como secretaría de Energía se le agrega el lastre de Cuitláhuac, la señora tiene garantizada la derrota.
¿Y quién sería el sustituto de Cuitláhuac? El caballito de batalla de López Obrador: Ricardo Ahued Bardahuil, el flamante alcalde de Xalapa.
¿Y a quien podrían en la alcaldía en sustitución de Ricardo? Ahí es donde la marrana va a torcer el rabo porque, al menos en Morena, no cuentan con un suplente con el empaque y la honestidad de Ricardo que como paradoja, no es militante de ese partido.
Una cosa es segura, si Cuitláhuac sigue en la gubernatura hasta el 2024 hará perder a Rocío. Y si lo mandan a la CDMX a la campaña de Claudia, hará perder a la Jefa de Gobierno. Es decir, tan pésimo para la una como para la otra.
Lo mejor para Morena en Veracruz, la CDMX y para el propio Cuitláhuac, es que López Obrador lo mande a su casa o lo ponga en alguna oficinita de Palacio de Nacional. Si lo deja en la gubernatura la va a regar, pero si se lo manda a Claudia la va a desparramar. Si es que en efecto lo piensa hacer.
Vaya dilema para Andrés Manuel con un sujeto que ha resultado una nulidad casi total, pero que tiene la fortuna de pertenecer a la banda de políticos “honestos y decentes”, virtudes que a excepción del tabasqueño, muy pocos ven.
¿Será que en efecto lo remuevan?
Eso no lo sabremos hasta que suceda.