Este domingo el alcalde de Xalapa, Ricardo Ahued, hizo un recorrido por la calle de Sayago para supervisar las obras de pavimentación, y por poco se va de espaldas al darse cuenta que no había nadie laborando cuando el compromiso era que trabajarían sábados y domingos.
Visiblemente molesto, realizó un video que de inmediato subió a sus redes en el que ofreció disculpas a los vecinos por el atraso en los trabajos y advirtió: “El que no pueda que deje la obra. No puede haber ni personal mío ni empresa, con esta falta de compromiso para cumplirle a la gente”.
Quizá por eso, minutos después se presentó en Sayago una cuadrilla de entre 10 y 12 trabajadores que hicieron como que hacían y no hicieron mucho. Pero en el resto de las arterias donde se están haciendo trabajos de rehabilitación o pavimentación (Av. Xalapa, Ávila Camacho, Vicente Guerrero, Clavijero y Xalapeños Ilustres que fueron las que recorrió este servidor, lector), no había ni un obrero trabajando.
Si bien el alcalde no quiere que las cosas se hagan al trancazo, tampoco desea que haya tortuguismo como en la administración anterior donde, para pavimentar menos de 300 metros lineales de la calle de Lucio, se tardaron ocho meses y la calle se cuarteó con las lluvias una semana después de ser abierta a la circulación.
Hoy lunes Ricardo hablará tanto con el personal Obras Públicas del Ayuntamiento, como con los representantes de las empresas para leerles la cartilla. Y quizá ahí se entere que los responsables de cumplir los numerosos compromisos en materia de obra pública hechos por el propio alcalde, no anticiparon la elaboración de proyectos ejecutivos y presupuestos.
Esta falta de previsión ha impactado negativamente ya que no se consideraron los trabajos de rehabilitación ya existentes, como las líneas de conducción de agua potable y drenaje, lo que provocó retrasos, pues la ejecución se detuvo en la Dirección de Obras municipal.
Quizá en esa reunión salgan a relucir los vicios en los que han incurrido el Director de Obras Públicas, Guillermo Ávila Devezze y el subdirector de Planeación y Proyectos, Gerardo Lobato Guzmán, ambos arquitectos.
Estos funcionarios tienen a empresas y constructores como Grucver, Diego López Méndez y Edwin Pável García en la lista de sus consentidos, y son los favorecidos a la hora de asignarles obras. Para darle una embarrada de legalidad al asunto Lobato Guzmán invita a otras empresas disque a concursar, pero solo sirven de comparsas porque las licitaciones favorecerán a los constructores que él ya definió.
Otro problema son las obras que realiza el propio Ayuntamiento – cuyo responsable es Rey David Hernández- donde no hay control del material, pues generalmente se modifican las cantidades para los insumos. Va un ejemplo, si se necesitan 100 bultos de cemento para una obra, a mitad de la misma se compran cantidades superiores a las requeridas, lo que hace pensar que se está desviando material.
Ayer domingo Ricardo Ahued fue muy claro: “Cualquier empresa que se atrase y no cumpla, jamás volverá a tener una obra en la administración de nosotros. Y también le voy a exigir al personal mío de Obras Públicas y también a los supervisores, que den cuenta de lo que está pasando ahorita. No vamos a tolerar esto. El que no esté en el ritmo y comprometido con la gente de Xalapa, no tiene nada qué hacer”.
Puedes apostar lector a que hoy el alcalde hablará fuerte y claro, y quizá algunos funcionarios municipales y empresas se tengan que ir de tan raspados que saldrán de la reunión.
El encontronazo es inevitable. Pero es mejor un manotazo a tiempo sobre el escritorio, a que tanto constructores como funcionarios poco escrupulosos sigan haciendo sus desmanes.
El kilometraje recorrido de Zenyazen Escobar
Nomás por curiosidad periodística, revisé las giras de trabajo de los secretarios de Educación de Veracruz de los últimos 15 gobiernos, es decir, de Marco Antonio Muñoz Turnbull a Cuitláhuac García Jiménez, y ninguno recorrió el kilometraje que lleva recorrido el actual titular de la SEV, Zenyazen Escobar García … y lo que le falta.
Durante su gira este fin de semana por la Huasteca Veracruzana, Zenyazen fue enterado por la directora del Instituto Tecnológico Superior de Pánuco, Jeanett Martínez Etienne, que esa era la primera vez que un Secretario de Educación de Veracruz visitaba ese plantel y que además no llegaba con las manos vacías, sino con una inversión de 18 millones de pesos para un laboratorio de prácticas y equipamiento.
Visiblemente emocionado, Zenyazen dijo que son más de 200 millones de pesos los que se han invertido en los Tecnológicos veracruzanos y anunció que los 30 mil jóvenes que no alcanzaron un espacio en la Universidad Veracruzana, tienen opciones de seguir sus estudios en alguno de los 25 Tecnológicos, cinco Escuelas Normales Públicas o en el Colegio de Veracruz.
Escobar García estuvo en Álamo-Temapache y Pánuco sedes de Expo Ferias Educativas, donde la comunidad estudiantil compartió con él sus costumbres y tradiciones a través de bailes y danzas, así como la música de los sones y huapangos huastecos.
Los periplos de Zenyazen tienen como fin rescatar los planteles escolares abandonados por años y dotar de presupuesto donde haga falta. Pero además, vigilar que cada peso invertido se aplique en las escuelas y no se desvíe en asuntos poco claros.
Quizá por eso la fiesta que hicieron los alumnos del Tec de Pánuco, que tuvieron por vez primera en más de 25 años de ese plantel, la oportunidad de convivir con el primer Secretario de Educación que los visita.
De regreso a la capital veracruzana, Escobar García se reunió con más de 60 periodistas en conocido hotel de Poza Rica, donde contestó la batería de preguntas que le hicieron y habló de los avances que la dependencia a su cargo ha logrado los últimos tres años.