La información que va teniendo el columnista es que aun cuando no han dicho en forma abierta que aspiran a la gubernatura, varios funcionarios del gobierno del estado andan ya en plena precampaña no obstante que faltan todavía dos años para las elecciones.
A ellos se les suman el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados Sergio Gutiérrez Luna y el súper delegado de Bienestar Manuel Huerta Ladrón de Guevara.
Del gobierno cuitlahuista, utilizando sus cargos, se mueven el secretario de Gobierno Eric Cisneros, pero últimamente están desatados, gastando un mundo de recursos públicos, el secretario de Educación Zenyazen Escobar García y el subsecretario de Finanzas Eleazar Guerrero Pérez.
Aunque no digan tampoco que quieren, a su manera, trabajando, manteniendo cercanía con sus representados, con los alcaldes y con diversos actores políticos, también están muy activos Ricardo Ahued Bardahuil, José Luis Lima Franco y Juan Javier Gómez Cazarín.
En el caso de los cuitlahuistas, sigo pensando que se movilizan en la creencia de que su grupo político mantendrá el poder hasta para decidir la sucesión, cuando la experiencia dice que el relevo se decidirá en la Ciudad de México y que será determinante el o la candidata presidencial en coordinación con el presidente López Obrador.
Pero no solo eso. Llegado el momento se tendrá que evaluar que la persona por quien más haya interés en postular tenga aceptación popular suficiente para no poner en riesgo el resultado de la elección, de ahí que una buena cantidad de morenos haga precampaña pensando en el resultado de las encuestas internas, pero uno, solo uno será el elegido.
Creo que varios de los mencionados piensan que se puede volver a repetir la chiripada que se dio con Cuitláhuac, quien llegó a la gubernatura gracias al arrastre de AMLO, pero no porque tuviera méritos, y que ellos pueden sucederlo por el solo hecho de que ahora están en el poder y tienen a su disposición costales de dinero del erario, y que son sus amigos.
Más allá de que creo que algunos son unos verdaderos ilusos, que no tienen ninguna posibilidad, hay un hecho cierto: conforman una caballada guinda entre gorda, no flaca pero no gorda, y flaca, pero caballada que está en movimiento y levantando polvo por toda la geografía estatal, mientras que en la oposición no asoma siquiera un caballo lechero.
Los morenos ganan con su activismo en conjunto
Ricardo Raphael, periodista, escritor, académico y analista político se ocupó ayer del tema, aunque con los aspirantes a la presidencia, y de la molestia que ha causado en el dirigente nacional del PRI, Alejandro “Alito” Moreno, la presencia de Marcelo Ebrard, Claudia Sheinbaum, Adán Augusto López y Ricardo Monreal en las campañas de los estados en que se renovarán las gubernaturas el próximo 5 de junio, actos en los que los han aclamado con el grito de “¡Presidente, ¡Presidente!, ¡Presidente!, e hizo un apunte interesante.
En su artículo que publica en Milenio y que tituló “Caballada gorda contra caballada inexistente” comenta que lo que está sucediendo es nuevo para la política mexicana; que el hecho de que los presidenciables sean la principal noticia de los comicios del próximo mes es una jugada perfecta porque Morena gana con el activismo del conjunto.
Dice que es entendible la molestia de “Alito”, quien reclama a Morena de “lucrar con el electorado”, pero entonces le hace un reproche. Apunta que en lugar de lamentarse, habría de interrogarse por qué esta vez los partidos de oposición no pudieron hacer lo mismo.
“¿No era este el momento perfecto para que la alianza Va Por México —que presuntamente se mantendrá unida hasta 2024— placeara sus propios presidenciables?”, pregunta, le pregunta. Cita nombres de panistas, el de “Alito”, ninguno haciendo campaña con sus candidatos a la gubernatura en los seis estados donde habrá elecciones.
Cierra con dos párrafos que para nada son desechables:
“Es dable suponer que el enojo de Alejandro Moreno no sea porque la caballada de la oposición esté flaca, sino por algo peor: porque no tiene caballada.
Zoom: la pluralidad política es indispensable para la democracia, pero la democracia no es responsable de que la oposición se haya quedado sin cartas para competir”.
Las corcholatas de Morena en Veracruz
En Veracruz Morena también tiene sus corcholatas, aunque Cuitláhuac no las haya destapado, y el comentario de Ricardo Raphael aplica muy bien para el estado: mientras que los morenistas calientan la plaza política desde ahora, por ningún lado se ve a la oposición, e incluso se sabe que más de un líder de la mal llamada oposición se entiende con el secretario de Gobierno.
¿No es momento ya de que un opositor, o más de uno, apoyado por los partidos de la alianza Va por México (PRI, PAN, PRD) ande recorriendo el estado, recordándole al electorado que existen, que son una opción? Creo que también es lo mismo: no solo no tienen una caballada aunque sea flaca, sino de plano no tienen caballada.
De acuerdo a los corresponsales del columnista en diferentes ciudades del estado, Sergio Gutiérrez Luna tiene ya saturados los espacios con espectaculares muy visibles, que, hasta donde se tiene entendido, los mandó poner por iniciativa propia la empresa de una revista, seguramente porque le ve futuro, o sea está apostando por él, un poco parecido a lo que Fidel Herrera Beltrán llamó en su campaña “crédito a la palabra”, que pedía a los propietarios o directivos de los medios que lo ayudaran, les decía que no tenía dinero pero que cuando llegara al poder les pagaría con creces el favor.
Luego de él, Zenyazen Escobar García tiene sorprendidos a quienes llevan un registro de los movimientos de todos los aspirantes, a los apuntadores de los diversos competidores, por la gran cantidad de dinero que está gastando en su promoción, que lo ven reflejado en los espacios que le están dando los medios, lo mismo en el sur que en el norte y en el centro del estado, que los lleva a preguntar de dónde saca tantos recursos.
Quien también está gastando carretadas de dinero es el subsecretario de Finanzas Eleazar Guerrero Pérez, quien ya no sabe qué regalar a sus simpatizantes o a quienes quiere que los sean, tanto que a los mismos cercanos a su equipo tiene intrigados por saber qué hace para disponer de los costales de dinero cuando se supone que sirve en un gobierno austero y se desgarra las vestiduras proclamando austeridad.
Consideración aparte, Morena gana terreno con el activismo de todos, así sea cada quien por su lado, mientras no se ve ni se siente la oposición.
Un grueso del priismo jala ya con Sergio Gutiérrez
La pasividad, la inactividad está haciendo que incluso pierdan clientela. He podido ver, constatar, que un considerable grueso de priistas se ha sumado y está acompañando al diputado federal Sergio Gutiérrez, no solo porque lo consideran el menos radical y el más moderado de los morenos, sino también porque los atiende, los escucha, dialoga con ellos, los visita si lo invitan, no lo ven excluyente, sectario. Pero también panistas, perredista y de otras corrientes políticas ya están jalando con él.
Emiliano Zapata proclamó que la tierra es de quien la trabaja. Se puede parafrasear diciendo que el éxito futuro será de quien más sume, y eso solo se puede lograr con el contacto permanente con el electorado, y los únicos que lo tienen por ahora, en forma masiva, son los aspirantes de Morena.