Al gobierno federal de MORENA no le interesa la nación sino la politiquería. De manera obsesiva y enfermiza su Tlatoani, todos los días y horas del tiempo, se dedica en crear distractores de la tragedia que vive México. No le importan los muertos, desaparecidos, hambre, violencia, crisis económica y un sin fin más. Lo suyo es trascender a través de la riqueza y el poder. Lo primero con un saqueo millonario al erario manejado en opacidad y la creación de elefantes blancos. Lo segundo tratando de retenerlo violando la ley, amenazando, juzgando a sus supuestos enemigos. Su odio y rencor es más grande que el dolor de los ciudadanos. Se quiere perpetuar y sus engaños son como un martirio diario en su particular tribuna: la mañanera. Alguien, algo tiene que frenarlo. No está bien. Es un hombre desquiciado, obnibulado, perdido en su laberinto. Quienes no quieran ver la realidad, atentarán con nuestra seguridad. Hay muchos millones de mexicanos que están arrepentidos de haber votado por MORENA. Mismos que presentan efectos de la enfermedad: la ambición desmedida. Estamos a tiempo, pronto sería muy tarde. 9 periodistas asesinados en cuatro meses, es algo de análisis profundo pues son más de 30 en este sexenio. Van en contra de la libertad de expresión. Después todos serán rehenes.