De conformidad a la trayectoria que presente quien lo exponga, se considerará que tan cierto será lo que dice o lo que prometa. En la XLIV Convención Nacional del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas, que tuviera lugar en Monterrey, N. L., AMLO, textualmente expresó: “Tengo la fórmula para sacar a México del atraso y sacar a nuestro pueblo de la pobreza”.
No una, sino muchísimas y repetidas veces, ha referido: – “Al margen de la ley, nada; por encima de la ley, nadie”.
De inmediato se dio a conocer la falsedad de su promesa con el memorándum, dado a conocer en el mes de abril del año 2019, dirigido a: Esteban Moctezuma, a Olga Sánchez Cordero y a Carlos Urzúa, violando lo que se encontraba establecido por la ley, pretextando después que, las medidas de la “mal llamada reforma educativa, generaron polarización social y una erosión institucional y que la justicia está encima de la Ley”.
Según le convenga, él o sus asesores, adaptan la excusa aunada con la culpa hacia los neoliberales y de acuerdo a sus intereses. Algo completamente similar a los falsos profetas o pastores, cuando pregonan la fidelidad o la monogamia, asegurando que, por ser ellos los elegidos Dios, les ha mandado a tener relaciones con jovencitas y demás y que, ellas recibirán por ese motivo, la bendición de Dios y gozarán de Su reino en la otra vida.
En un mitin realizado en Izamal, Yucatán, López Obrador el 3 de enero de 2018, prometió acabar con la guerra contra el narco en 3 años, también en otra ocasión juró que, desde el primer día de su gobierno los narcos cambiarían las armas por tractores. Por supuesto que las excusas y todo tipo de pretextos ya son totalmente conocidos por nosotros, y siempre los culpables absolutamente de todo y de que nada haya él ha realizado y todas las ocurrencias que hace o está haciendo sean absurdas y desquiciadas, es por causa de los neoliberales, de Calderón y todo aquel que le caiga mal y que se reserve una buena dosis de odio hacia él. (El de turno es Loret de Mola, ante el escándalo de José Ramón en Texas, y que no han encontrado justificación alguna).
No es desconocido para nadie, que los millones tirados a la calle en los espectaculares, con propaganda de acudir a votar el 10 de abril, a una consulta que nadie pidió, pero que se tiene preparada para hacerle el juego en grande al dictador, y que, por ir en contra de la ley, el INE ordenó el retiro de los mismos, pero a modo del gran absolutista y, acostumbrado a violar las leyes y darles la interpretación que le parezca de momento, de manera exprés, sus achichincles de Morena, PT y Verde regularon la propaganda gubernamental, a través de un decreto “interpretación”, para permitir a los funcionarios públicos hacer campaña política, o promover el proceso de revocación de mandato sin sanciones.
De conformidad a lo que expresé en los dos primeros párrafos de este artículo, cabe aplicarlo al refrán “Dime de qué presumes y te diré de qué careces” que se atribuye a personas que se contradicen eso mismo que pregonan.
Pues ha sido el primero en pasar por encima de la ley; de exhibir su deshonestidad, la que supuestamente sería un ejemplo; de ser evidentes sus mentiras y, por si esto fuera poco, de estar hundiendo al país, cuya fórmula desconocida que indicó en Monterrey, nunca dio algún resultado y en la actualidad, en algunas ciudades del país, el crimen organizado es quien manda, y por cuanto a la pobreza extrema se desboca aumentando cada vez más.
Se saldrá con la suya en su consulta de revocación de mandato, con el fin de continuar su actitud dictatorial, que se caracteriza por ser él, el único líder y evidentemente, tener una nula tolerancia al pluralismo político o a las libertades de prensa.
Sus enemigos seremos siempre los que no coincidimos con lo que él hace o dice. Protege a sus adoctrinados a quienes, como si se hubieran aprendido de memoria la lección, hablan y afirman una multitud de mentiras similares que nunca han probado. Y seguirá por siempre, manteniendo a una serie de ignorantes, flojos e inútiles que están contentos por las becas que les regala de nuestros impuestos, mismas que las aumentarán, supuestamente por la veda electoral, pero serán para comprar votos y asegurar la fiesta engrande de su dictador.