Veracruz tardará, por lo menos, tres años para alcanzar los niveles de producción que tenía antes que iniciara la pandemia. Así, para conseguir nuevamente el valor de Producto Interno Bruto (PIBE) que tenía en 2019 (que fue de 828,704 millones de pesos reales de 2013) (mdp) deberá esperar hasta el año 2024. Antes no sería posible ya que la capacidad de crecimiento económico del estado es muy débil debido a las siguientes razones:
- su elevada dependencia de la producción de petróleo,
- su escasa diversificación industrial y exportadora,
- su escasa integración a los mercados internacionales,
- la baja productividad de sus sectores, particularmente el agropecuario y el de servicios.
- La inexistencia de programas gubernamentales de apoyo a las empresas y trabajadores afectados por la pandemia,
- La ausencia de programas para desarrollo de productores o atraer la inversión nacional o extranjera.
Lo más grave es que para el Estado será más tardado recuperar el nivel de bienestar que había en 2019, medido por el valor del PIBE por persona (per cápita). En este caso recuperar la posición que se tenía, sólo será posible hasta 2027 cuando Veracruz alcanzaría un valor de PIBE per cápita de 97,699 pesos (reales de 2013) ligeramente superior al que se registró en 2019 que fue de 91,501 pesos (reales de 2013).
Estos resultados se derivan del comportamiento que ha tenido la economía veracruzana recientemente, que en 2020 registró una caída de -8.4% y en 2021 de 3.5%. Para 2022, en el Observatorio, estimamos que se registrará un crecimiento de 2%, mientras que para 2023 y 2024 esperamos que éste sea de 1.9% en cada uno de esos años.
Responsable de la publicación:
Dr. Hilario Barcelata Chávez. Coordinador del Observatorio