¡Despierta Cuba! Inusuales protestas en la isla. Los cubanos están hartos por la pandemia, por la situación económica y por la falta de libertad
En San Antonio de los Baños, Palma Soriano, así como en algunas provincias al sur de la Habana, cientos de personas salieron a las calles a protestar. Al parecer los protestantes están hartos del mal manejo de la pandemia por parte del gobierno, asimismo de la atención hospitalaria. Vale mencionar que si algo presumía el gobierno cubano eran sus servicios de Salud. Sin embargo, los cubanos reportan que algunos hospitales están saturados. Durante las protestas, que no se habían visto en Cuba en muchos años, las personas también exigieron libertad. “Abajo la dictadura”, gritaban algunos protestantes en varias de las ciudades cubanas donde la gente salió a manifestarse. El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, quien se encontraba en una de las ciudades donde se llevaron a cabo las protestas declaró: “Un grupo de personas se agrupó en uno de los parques más céntricos para reclamar, incluso se unieron personas revolucionarias que pueden estar confundidas por la desinformación que hay en las redes sociales”. En los últimos meses la pandemia por el coronavirus ha puesto en jaque no sólo los servicios de Salud, sino además la ya paupérrima economía de los cubanos.
YosStop busca conmover con sus cartas: “Jamás he sido mala persona, jamás he dañado a alguien”. Quienes han visto sus videos no le creen
“Patética generación” es el título de uno de los videos de Yoseline Hoffman, conocida en redes sociales como YosStop. En ese video se advierte a una mujer desequilibrada, que lastima la dignidad de las personas, sin importarle si son mujeres, incluso menores de edad. La diarrea verbal de YosStop se desboca hasta que rebasa el excusado de su canal de YouTube; no nos dejen mentir, sólo vean el video. A pesar de ello YosStop escribe cartas que pretenden ser conmovedoras, cartas en las que ahora ella se viste de blanca paloma: “Soy terca, necia, orgullosa, soberbia, mal hablada, egocéntrica. Tengo muchos defectos y áreas de oportunidad, pero jamás he sido mala persona, jamás he dañado a alguien con intención, al contrario, creo que soy transparente y honesta, tanto que es un problema a veces. Dicen que la vida no es injusta. ¿Tú que crees?”. La carta fue entregada a su novio, quien dice que ella está “triste de que está situación se disfrace de falsa ‘justicia’”. YosStop ignora lo que es la ley, por lo mismo ni siquiera advierte si la ha transgredido o no. “Sé que hay que aguantar vara, sé que esto se va a resolver, pero ¿cuándo?, ¿cuánto tiempo?, ¿qué pasará en mi ausencia? No lo sé… ¿Qué tanto es suficiente? No lo sé… lo que sí sé es que espero con ansias que esto termine”. Pues no le queda de otra más que aguantar vara, porque ella va a recibir una sanción ejemplar, para que todos los que se sienten influencers piensen más en lo que dicen.
¡Pinche generación de cristal! Ya están vacunando a los menores de 30 años y abundan los reportes de dolor de brazo
A más del 90 por ciento de lo vacunados, mayores de 30 años, entre ellos los adultos mayores, nos dolió el brazo después de que nos pusieron la dosis de la vacuna contra el coronavirus. A otros les dio diarrea, unos sufrieron fiebres, dolor de hueso, pero sobrevivimos; nadie se andaba quejando. Pues resulta que en redes sociales la generación de cristal, esa que se queja por todo, ya posicionó el hashtag #Paracetamol, porque es el medicamento que les están recomendando para que alivien su dolor de brazo después de ser vacunados. Y es que como ya empezaron a vacunar a la población de 18 a 30 años, muchos de ellos nacidos en este milenio, las quejas de que les duele el brazo “cañón”, empezaron a verse en los mensajes de las redes sociales. Incluso el video de una joven argentina que se pone a llorar porque le pusieron la vacuna china se ha viralizado, pues es todo un espectáculo ver a una generación tan chillona, tan rajada, como diríamos en México. Ya sólo falta que se desmayen esos de 18 a 30 años a la hora que les pongan la vacuna, cuando los adultos mayores aguantaron sin quejarse. No cabe duda, está generación de cristal quiere que oigamos sus chillidos en redes sociales. Pero ya sabe lo que dice el dicho, «a chillidos de marrano, oídos de chicharronero».
Armando Ortiz Twitter: @aortiz52 @lbajopalabra