Lo que callamos… los poderes

Para los que andan criticando la democracia mexicana, que si es sin adjetivos, con sustantivos o participios, que si es región cuatro o que no es democracia sino un remedo, allí tienen la grandiosa respuesta de los partidos que están haciendo realidad el principio fundamental de que todo ciudadano puede votar y ser votado. Es decir, que en una democracia, cualquiera puede aspirar a un cargo de representación popular. Y para callar a los criticones, ese principio es literal para estas elecciones: cualquiera puede ser candidato.

Con la pandemia encima, sin poder hacer campañas tradicionales, con limitaciones para ir a entregar tarjetas de supermercado, despensas, playeras, paraguas y gorras (también por limitaciones legales), los partidos están optando por la mercadotecnia. Están invitando a figuras del espectáculo, del deporte o de los medios a ser candidatos. Si el Cuau pudo, sus candidatos por qué no.

Así que en las elecciones de este año ya no sabremos si estaremos en campaña política, en el Canal de las Estrellas o en un palenque. Ganará (se piensa) el más carismático. Por algo Rius nos llamaba Los supermachos, porque aguantábamos de todo (por aquello de la resistencia física de los hombres).

Esta fórmula ya se ha probado antes, con resultados variados, pero ante la inédita situación en que nos colocó el Covid 19, se apuesta por las caras conocidas. La competencia no será entre ideas o propuestas sino por la fama de los candidatos. En el marketing político, la marca es el partido y el producto es el candidato. Todos los partidos gozan de tan mala reputación entre el electorado que con esta estrategia están intentando que se olvide la marca para privilegiar la imagen del producto.

La oposición no ignora que AMLO todavía tiene mucho capital político. La noticia de haber dado positivo a Covid hizo resurgir en las redes el apoyo al Presidente, salió a flote de nuevo la chairomanía que había optado por no contestar a las provocaciones de los opositores de la 4T. Está rolando en las redes una versión de “La bamba” de Byron Barranco de total apoyo a Morena y la 4T. Tal es el caso, que columnistas como Emilio Trinidad Zaldívar afirma que AMLO inventó su enfermedad como estrategia para ganar votos, como si el mismísimo periodista hubiera ido a recoger los resultados de laboratorio del Presidente; Moisés Sánchez Limón también lo deja ir como posibilidad y varios espacios para trascendidos están manejando esta especie para minar la credibilidad presidencial. Pero en las redes hay un rebrote con una cepa más dura de los amlovers.

Por eso los partidos están buscando “figuras” para las candidaturas. ¿Qué no saben de política, de leyes, de economía, de educación o de políticas públicas? Qué importa, lo primordial es ganar.

¿Quién no recuerda la candidatura de Rubén Olivares “El Púas”? Pero, por bien que boxeara, no logró vencer a sus contrincantes. Una estampa sublime de su campaña por una diputación fue cuando un reportero le preguntó si conocía la Constitución Política de nuestro país y contestó que estaba comenzando a leerla. Pues eso mismo quizá estén haciendo los candidatos actuales, pero sin tuitearlo para no “quemarse”. Ya veremos si aguantan una entrevista seria sobre política o si se las hacen.

Por lo pronto Movimiento Ciudadano ya le levantó la mano a Paquita la del Barrio como candidata por la diputación de la localidad de Misantla. La ex Miss Universo, Lupita Jones podría ser la candidata de PRI-PAN-PRD a la gubernatura de Baja California; Carlos Villagrán “Quico” el del “Chavo del Ocho” quiere ser gobernador o presidente municipal de Querétaro por un partido local (registró las dos candidaturas para no errar); el actor Alfredo Adame va por la candidatura de Tlalpan con el nuevo partido Redes Sociales Progresistas, instituto político que también está lanzando al exvocalista de Los Ángeles Azules —Héctor Hernández— para la diputación por Tlalpan; el conductor Patricio “Pato” Zambrano  va con el PRI para ser diputado por Monterrey; el actor, cantante y diputado federal Ernesto Vargas, mejor conocido por el apellido artístico de su mamá, Ernesto D’Alessio que llegó a su curul por el Partido Encuentro Social (PES) ahora va por una diputación local en Nuevo León por Encuentro Solidario sucesor del PES.

Como ha ocurrido en el pasado, los partidos también buscan votos candidateando figuras deportivas. Además del fallido intento del “Púas”, están los casos de Ana Guevara, Cuauhtémoc Blanco, Iridia Salazar, Raúl “El Ratón” Macías, Carlos Hermosillo y Fernando Platas.

Ahora el PES postulará a los exfutbolistas Adolfo “Bofo” Bautista (de los Tecos y también exseleccionado nacional)  para una diputación federal por Jalisco y a Javier “El Abuelo” Cruz para otra por Nuevo León, estado donde es un ídolo. En tanto, el Partido Verde postulará al exportero del América, Adolfo Ríos para que compita por la alcaldía de Querétaro. Al clavadista y medallista olímpico Rommel Pacheco lo está impulsando el PAN para la diputación federal del Distrito 3 de Mérida.

El Partido Redes Sociales Progresistas quiere jugar rudo en las alcaldías Venustiano Carranza, Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero postulando a los luchadores Tinieblas (Manuel Leal Peña), Carístico (Luis Ignacio Uribe) y Blue Demon Jr. (que deberá revelar su nombre real) respectivamente.

Morena también se subió al tren de la fama y tiene como precandidata a la diputación por Naucalpan a la actriz Gabriela Goldsmith y al exentrenador de futbol y comentarista deportivo José Luis Sánchez Solá para una diputación local en Puebla.

Ahora que ya nos acostumbramos al turismo ideológico, donde las plataformas y propuestas no son más que un requisito para el registro, los verdaderos contrincantes serán los asesores de imagen, a ver quién hace “buena comunicación política” para vender su “producto”. ¿Y los ciudadanos? Viendo Netflix, Amazon, el Canal de las Estrellas o La familia Peluche, será casi lo mismo que poner atención a las campañas, con una pequeña diferencia, “The Good Wife” o “Scandal” definitivamente tienen mejor producción y un casting sobresaliente.

ramirezmorales.pilar@gmail.com

Related posts

Sacrificios humanos

No lo digo yo

El moño naranja