El diccionario de la real academia de la lengua española, define la palabra apocalipsis como:
El país se ve asolado por la guerra, el hambre, la peste y la muerte, que cabalgan dejando lagrimas al pueblo mexicano
La gente no sabe a qué temerle más, porque todo da terror. El jinete de la Guerra se ve representado por los cientos de carteles del crimen organizado ya sean grandes o chicos que operan como filiales de los carteles y otros que son independientes en su operación, agregue las pandillas de Maras y los grupos sofisticados que lavan dinero para el crimen organizado.
El jinete del Hambre, si bien ronda en México desde hace varias décadas, dejó clara su presencia este 2021, con la quiebra de miles de empresas, haciendo a los dueños de los mismos empleados de otros, y millones de desempleados, recortes gubernamentales y un crecimiento en la corrupción de funcionarios en los tres niveles de gobierno, ante la caída de sus ingresos por extorsión a los ciudadanos y empresas.
No hay sector que esté libre, excepto el de las telecomunicaciones que ha hecho su “agosto anual”, lucrando con la necesidad de la población de mantenerse comunicada y simulado las empresas del ramo que se solidarizan con la gente, cuando es mentira su compromiso social.
El sector turístico, está prácticamente desahuciado, muchos hoteles cerraron, algunos con carácter definitivo, en otros hoteles la operación del negocio es exclusivamente con la familia del propietario que atienden la recepción, la cocina del restaurante. Limpieza, mucama, etc., con el fin de mantener la flama de la esperanza de que todo mejore en un futuro próximo.
Ni hablar de las aerolíneas que están con pérdidas e incluso algunas como Interjet que diversos medios estiman que desaparecerá del espacio aéreo entre otras. Muchas aerolíneas han eliminado rutas a nivel internacional y nacional, en el caso de México y en específico del Estado de Veracruz ya no existan vuelos que conecten a la su capital Xalapa, y en el norte el aeropuerto de Tajín, por lo que se aprecia un retroceso en materia de conectividad aérea.
Por lo que se refiere a los cruceros ya ni hablar porque salvo Cozumel, Mazatlán y Puerto Vallarta, el resto de las zonas costeras del país, no desarrollan este tipo de turismo.
El tercer jinete del apocalipsis es la Peste, que está presente con la gran cantidad de muertos y enfermos del Covid 19, que han saturado hospitales, especialmente de las instituciones públicas (a nivel mundial), así como panteones saturados, llegando en algunas ciudades como Nueva York a enterrar a los fallecidos en parques públicos y utilizando camiones refrigerantes para acomodar los cadáveres (si bien en México desde hace años ya se utilizan estos para conservar los cadáveres de victimas del crimen organizado). Agregue otros problemas como el dengue, el Zika, el Chikungunya, la influenza, entre otras epidemias.
Por último está el cuarto jinete del apocalipsis la Muerte, cuya presencia se debe a los tres jinetes anteriores, ya que sino muere la gente por balazos, fallece por el Covid 19, o por hambre ya que tanto acuartelamiento cierre de negocios y plazas, así como el recorte de horario para trabajar los negocios generan hambre y desempleo, además de otros factores que no son pocos. La gente se arriesga salir a las calles porque es un hecho que existe la necesidad de comer tres veces al día y también su familia. En este caso los que tienen menos problemas en estos tiempos son los funcionarios de gobierno de los tres niveles de gobierno, ya que cobran su sueldo sin trabajar (en la gran mayoría de los casos) excepto el sector salud y seguridad pública, que son fundamentales para mantener la estabilidad social en el país.
Como ejemplo, se incluye a los diputados, que no tienen problemas de ninguna especie, ya que gozan de sus jugosos sueldos y complementos que llegan a ser de hasta $400,000 pesos al mes, y solo manipulan la situación actual para jalar agua a su molino. Situación similar la de la alta burocracia del poder judicial con sueldos y prestaciones similares o más altas, que rayan en la grosería.
Sin duda alguna los problemas serían menores si no se tuviera a estos políticos y funcionarios que incluye a hijos, nietos, yernos, tocayos y compadres entre otros que ocupan estos puestos públicos como si fuera patrimonio familiar
La reflexión es suya, hasta la próxima.