Y seguimos evidenciando corruptelas en el Gobierno de Cuitláhuac García, administración que ha reclutado a inexpertos, ambiciosos y traidores a la institución. Hoy, nuevamente toca a la Secretaría de Gobierno, en donde los negocios, cobros de moches y sobornos son permitidos por su titular, un ladrón en Mulegé, Baja California Sur y hoy, ambicioso Secretario de Gobierno, Eric Patrocinio Cisneros Burgos. Eso explica el por qué las anomalías en la Unidad Administrativa de la SEGOB, en específico, en el Departamento de Recursos Materiales y en la Oficina de Adquisiciones, integrados por verdaderos pillos.
Los llamados “Pillos de la SEGOB”, compuesto por jóvenes inexpertos, prepotentes y soberbios, quienes asumen lealtad a su titular Eric Cisneros, pero en realidad, son como buitres esperando que el Jefe caiga y todos ataquen para ganar espacios y cargos. Un ejemplo que no sabe el propio Terrible Eric es el robo en compras. Hemos investigado este tema y se han detectado anomalías en las compras bajo un mal proceso y omisión de protocolos administrativos. Detectamos, que gracias a la poca experiencia gubernamental, el Jefe de la Unidad Administrativa Raúl Galindo Cabañas, quien en lugar de atender dichas anomalías, se asume como el brazo derecho de Eric Patrocinio y “sobrinito” de la actual Fiscal General del Estado, Verónica Hernández Giadans.
Y las hienas andan en manada… Jorge Ignacio Álvarez, Jefe del Departamento de Recursos Materiales, una de sus pocas experiencias laborales fue ser empleado de Atención a Clientes en Walt Disney World, este personaje aparte de presumir a todos sus colaboradores que él no tiene necesidad de trabajar y está en SEGOB sólo para distraerse un rato, asegurando que a él le sobra el dinero. A este millonario imaginario lo ponen ahí por ser amigo de Raúl Galindo, cuando los dos estudiaron la carrera de Finanzas y Contaduría Pública en la Universidad Anáhuac, durante el periodo 2011-2015.
Hace unos meses, empleados con más experiencia fueron puestos a disposición, no para hacer recortes de personal, sino para meter a más amigos de la carrera. Y después se supo que además de querer sus plazas, también los trabajadores con mayor tiempo en la SEGOB no quisieron firmar documentos como órdenes de pago, cuadros comparativos, cotizaciones falsas, ni todo lo que ha favorecido a sus incondicionales proveedores.
Y los llamados “Pillos de SEGOB”, ante su ineptitud para la administración, también muestran ineficacia, llevando a la Secretaría de Gobierno en un caos, comprobándose con anomalías, como cambiar tres veces al Jefe de Adquisiciones, quienes llegaron sin experiencia y nulo conocimiento, de la misma Ley de Adquisiciones, fijada por el ORFIS…
Si bien, desde un principio se impuso una administración proyectada en adjudicaciones directas, aun cuando tenían que ser licitaciones por el monto del contrato, lo que hacen estos “Pillos de SEGOB” es otorgar los contratos a incondicionales proveedores, quienes están dispuestos a pagar el 30 por ciento de moche o soborno, en un solo pago, cuando se dé el adelanto… Los procedimientos son ilegales, como los realizados a una dependencia tan sensible como es la Comisión Estatal de Búsqueda, la cual, tiene contacto con familiares de las personas desaparecidas y los recursos para su búsqueda son triangulados de manera vergonzosa, imponiendo a empresas beneficiadas en el Gobierno de Javier Duarte y proveedores a modo para sacar su tajada, pues en la SEGOB todos ganan.
Qué dirían las familias de los desaparecidos, cuando existen turbios negocios en la adquisición de Equipo Especializado para realizar acciones de búsqueda de personas desaparecidas en escenario forense en territorio veracruzano, coordinadas por la Comisión Estatal de Búsqueda; Adquisición de bienes informáticos para la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas y la Adquisición de Vehículos Terrestres para la ejecución y el seguimiento de acciones de búsqueda de personas desaparecidas o no localizadas coordinadas por la Comisión Estatal de Búsqueda en territorio veracruzano… En todos existen anomalías, oscuras negociaciones en el otorgamiento de contratos y los recursos son mutilados, incumpliendo con los protocolos definidos desde la Secretaría de Gobernación.
Pillos y más pillos en la Secretaría de Gobierno, mientras tenemos a un Gobernador, quien aún no entiende su función en el Gabinete, ni por lo que fue elegido. Da tristeza, pues el enojo y decepción de sus votantes, será el arma letal para la oposición en el 2021.
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