Inicio ColumnasOpinión de: FELIZ DÍA DEL LOCUTOR.

FELIZ DÍA DEL LOCUTOR.

by Luis Alberto Zavala Ramos

Cómo olvidar aquellos tiempos en que la familia se reunía por las noches en la sala de la casa a escuchar la radio. Aquellas épocas de inolvidables programas del El Panzón Panceco y Rita Rey; de: El Caballero de la Blanca Cabellera “El Dr. IQ”, El Tío Gamboín, etc. Percibíamos en aquellas épocas de los “cincuenta” y principios de los “sesenta”, voces impostadas que obligaban a escuchar la radio, como la de Enrique Rambal, personificando al Obispo de Nueva York, Fulton J. Sheen; un gran locutor de inolvidables programas fue Luis Ignacio Santibáñez, posteriormente León Michel quien incursionó más en la televisión, y varios que de momento vuelan a mi memoria.  Los anuncios de aquella época eran un tanto melodiosos en lugar de gritos chillones y estrepitosos.

En nuestra ciudad, aún pueden existir muy buenas voces, solamente que, ya no se ha tenido el tiempo suficiente para poder hacer un juicio correcto, pero sí puedo hablar de excelente huella que dejaron muchos locutores, como el inolvidable Juan Rodolfo Arámbula (El Oso), quien fuera campeón estatal de oratoria.  Tres lustros después, qué decir del ahora Doctor en Oftalmología Francisco Javier Moreno Barboza, quien por mucho tiempo fue un culto locutor de las excelentes radiodifusoras XEDU y XEND, merecedor también de un campeonato estatal de declamación. El muy conocido y estimado Tello Montes, también (q.e.d.), en aquellos momentos requerido en cualquier evento para ser maestro de ceremonias, aún recordamos aquel su programa de buena música: “Momentos Románticos”. No había hogar en Durango en donde no se escuchara “Noticias de las Ocho”, con otra de las mejores voces como la del Licenciado Samuel Carlos Guillén (q.e.d). Pudiera olvidar a varios de quienes se tenía el placer de escucharlos por sus conocimientos y voz correcta e impostada, además de su ortoepía se palpaba corrección de conceptos y se notaba en ellos a un señor locutor en toda la extensión de la palabra.

Poco a poco, las cosas de la locución en la radio, al parecer en todo el Estado, se han ido degradando, afortunadamente aún se cuentan algunos de los que desconozco sus nombres, pero que lo hacen bastante bien, tanto en la radio comercial como en las de las instituciones. En Radio Universidad vale la pena mencionar al Médico Javier Armando García y Aurora Soria Hernández, quien ya al parecer se jubiló. De la radio comercial a Don Víctor Manuel Castro, quien en algunas ocasiones aún se deja escuchar. Pero de las últimas voces impostadas de locutores y quien fuera también por mucho tiempo buen articulista en este prestigiado periódico, Don Claudio Mercado Rentería; Don Gustavo Nevárez Martínez, no han aparecido más, siendo que tienen todo lo de un buen locutor. Hoy, por el contrario, al parecer, muchos de los nuevos locutores de la radio, hombres y mujeres, trabajan para exacerbar a la audiencia, gritan y hablan con faltas de ortoepía, la gran mayoría de ellos, quieren hacer su voz más grave, pero logran escucharse como si estuvieran en ese momento haciendo una necesidad en el retrete y además que están estreñidos.  Y, por cuanto a que tengan algo de cultura o conocimientos de lo que hablan, creo que deben estar en constante preparación por el bien de ellos y de los radioescuchas.

En mi humilde opinión y atendiendo a aquellas voces que he mencionado, toda persona que haga uso profesional de la palabra debe tener su voz impostada, es decir, colocada correctamente. Impostar es fijar la voz en las cuerdas vocales para emitir el sonido en su plenitud sin vacilación, ni temblor y sin fingimientos. Cuando no lo está, se habla con esfuerzo y se producen trastornos que el locutor debe evitar. Hablar con la voz impostada es hablar sin esfuerzo, con naturalidad, aprovechando al máximo las condiciones fisiológicas del aparato de fonación.

Además,  la locución radial es una de las actividades en las que nos podemos involucrar si estamos interesados en ser parte del mundo de las comunicaciones, en donde la información lingüística es el motor de las relaciones interpersonales, sociales, económicas y profesionales y su buen o mal uso dependerán de la formación de múltiples personas que escuchan ese aparato, provocando que, si lo que se ha dicho es incorrecto, pueda mal informar o definitivamente degradar  el progreso social en materia de comunicación.

Estando próximo el día 14 de septiembre, señalado como día del locutor, a todas aquellas personas que recuerdo en el presente y que, considero han hecho historia por su correcto desempeño y aunque no los conozca o haya conocido, les envío un fuerte abrazo; y, a todos los demás que llevan a cabo esta labor, ya sedan damas o caballeros, conózcalos o no, sean gritones o no, pujen al hablar o no, también les doy mis mejores deseos y hago votos porque cada vez, progresen más en educación, civismo y cultura pues son verdaderos transmisores de todo lo que pueda enriquecer en conocimientos a los radioescuchas.

 

 

 

 

 

también te podría interesar