Al parecer me he quedado con la gana de cambiar de tema, para que no se piense que tengo consigna de señalar errores o desatinos del presidente, pero sus comentarios, sus olvidos, sus ocurrencias son temas obligados a comentarlos con mis escasos lectores, que de verdad mucho quisiera que pudieran servir para abrir los ojos y quitar el teflón de los cerebros de muchos que aún siguen creyendo en él.
No soy asiduo a las conferencias mañaneras, pero llego a saber de ellas, por lo que nos presentan los noticieros, alcanzando a percatarme de algo que vale la pena comentar y que ha sido pronunciado textualmente, así: “No secuestran a un pobre, secuestran al que tiene. Entonces ¿cómo evitamos el secuestro? Con una sociedad mejor. Con justicia y así somos libres de verdad”. Al parecer nos está invitando a ser pobres y no tener aspiraciones de ninguna clase.
Tal vez olvida lo que le sucedió a “Carlos” un niño de trece años, quien después de haber salido de la secundaria, fue secuestrado y sus familiares accedieron a pagar 100 mil pesos de rescate, pero de momento entregaron 6 mil seiscientos pesos, con la promesa de conseguir el faltante, no obstante, Carlos apareció muerto en el Cerro del Estropajo, en Xalapa, Veracruz. No creo que Carlos o su familia hayan sido muy ricos.
Por otra parte, a diario se mencionan los robos y extorsiones que aparecen por doquier. Si abordas un transporte urbano, estás en peligro que te roben celular y cartera, al igual que a los demás ricos y potentados que usan esos medios para transportarse.
Si abres una taquería, tienes que pagar el derecho de piso, al igual que los demás millonarios que se dedican a ese ramo.
También nos pide, que nos conformemos con un par de zapatos, que evitemos lujos, así como evadir comidas exóticas, que consumamos nuestros alimentos tradicionales, como arroz, frijol y maíz; pero tales alimentos son en su mayoría importados para que podamos completar la alimentación recomendada. Tan solo el arroz, la mayoría que se consume en nuestro país lo importamos de E. U., Uruguay y Argentina. Gran parte del frijol nuestro país lo importa de E. U., Canadá y China. El maíz amarillo para forraje también se importa por nuestro país de E. U., de Argentina y Brasil. Del que sí se pudiera señalar, que abastece bien su consumo, es el maíz blanco.
Sin embargo, debemos comentar que, el presupuesto del campo sufrió un recorte del 34% desde el 2018.
Y, tal vez quiera patentizar que solo su secretario de relaciones exteriores sí pueda exhibir un Rolex de casi 800 mil pesos, y que, vivió por un largo tiempo en París, para que no le tocara nada de culpa de la línea 12 del metro. O bien, Fernández Noroña que presume de comunista, pero que solo acude a París porque le encanta comer bien en los restaurantes de alta calidad, pero el pueblo bueno y sabio tiene que conformarse con un par de zapatos, evitar lujos y comer arroz, frijol y maíz, aunque se tenga que importar más, pues el campo ya no da con menos presupuesto, pues se ha decidido que los ninis lo reciban, aunque no produzcan para nadie, pero serán peones de él y de su partido.
En sus homilías ha solicitado se tenga respeto a su investidura. Recordará cuando a Fox le dijo: “Ya cállate chachalaca”. Cuando llamó a Calderón “comandante borolas”. Cómo se ha expresado continuamente y casi a diario, de muchas personas a las que tilda como: “fifís”, “mediocres”, “pirrurris”, “Riqui riquin canallín”, y a muchos los encierra dentro de un paquete a los que les ha apodado “la mafia del poder”.
Sobre un foro que se había programado para el miércoles 17, convocado por Conapred (Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación), y que fuera cancelado, al parecer debido a una recomendación de Beatriz Gutiérrez Müller, quien se opuso a la invitación que dicho Consejo hiciera al conductor Chumel Torres, quien esperaba una disculpa de él, ante los ataques que supuestamente hiciera a su hijo menor de edad, al crear un anuncio así: “Abriendo la Conversación. – El Palacio del Chocoflan. – La Radio de la República.”
Ante esta pregunta el presidente confesó no conocer dicho organismo, creado en abril de 2003 por la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, no obstante que el día 20 de noviembre del año de 2019, la secretaria de gobernación informara que el presidente designó para los próximos cuatro años, a Mónica Maccise Duayhe, como la nueva presidenta del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, en sustitución de Alexandra Haas.
Pero según el presidente, esta institución forma parte del grupo de organismos burocráticos, que fueron creados en gobiernos anteriores, pero que no cumplen con sus funciones.
Tal parece que el presidente desea un pueblo conformista, de mediocres, fracasados, frustrados sin aspiraciones ni ilusión de progreso, quien desea que no tengamos nada para que no suframos secuestros o pérdidas por si nos roban. Que es notoria su escasa visión de los problemas sociales, quien en campaña indicaba que todo lo malo se corregiría desde el mismo día de su toma de protesta, y que, ante los hechos que se le muestran desconoce el problema de la criminalidad, pero que no es de un pleito entre ricos y pobres, a quienes él está empeñado en enfrentar. Qué mientras él pide respeto para la investidura presidencial, con la mayor displicencia, sí puede insultar, apodar, denostar, imponer y hacer lo que le venga en gana, no obstante, las normas establecidas ante la pandemia, y en contra de quien se le antoje de cualquier núcleo de la sociedad.
Y si discriminación consiste en otorgar un trato peor a una persona en comparación con otras, pues al no saber la existencia del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, ya la está discriminando, aunque presuma de humanista.
Y, de conformidad a la frase que he transcrito al principio, con relación a sus mañaneras, respecto al secuestro y que finaliza: “Con una sociedad mejor. Con justicia y así somos libres de verdad”. Que lamentable que nada de lo prometido en campaña se haya cumplido, pues hasta la vida de los juzgadores y su familia esté en riesgo actualmente. Como el crimen reciente del Licenciado Uriel Villegas y su señora esposa, quienes cobardemente fueron asesinados en presencia de sus menores hijas.