Noventa años después de que se tensaron las relaciones entre el Gobierno del Estado y la Iglesia católica en Veracruz hasta llegar al rompimiento, ayer asomó la sombra de aquel conflicto cuando el Arzobispo de la Diócesis de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, arremetió de frente contra las autoridades del Gobierno del Estado y municipal por los actos de vandalismo que tuvieron lugar el pasado 8 de junio que causaron daños a edificios públicos, privados y religiosos.
En su homilía dominical, el prelado citó por sus nombres al gobernador Cuitláhuac García Jiménez, al secretario de Gobierno Eric Cisneros Burgos y al presidente municipal Hipólito Rodríguez Herrero de haberse reunido y haber dado un mensaje después de los hechos, pero señaló que no “se comprometieron para que esto se remediara, dijeron que quien quisiera podía presentar denuncias a la Fiscalía pero hasta ahí quedó todo”.
Con un tono inusual el mitrado denunció: “Todo lo hicieron con absoluta impunidad (los vándalos), con toda tranquilidad y, para variar, otra vez destruyeron nuestro templo expiatorio (El Beaterio), y pues nadie los detuvo”.
Señaló que esa “es una permisión demasiado amplia”, que proceden (los autores) “con toda impunidad porque saben que no les van a hacer nada. Ni pagan su culpa ni resarcen los daños que causan”.
Expuso que “este tipo de acciones no es buen ejemplo para la sociedad”, ya que se fomentan las agresiones y la violencia, y que atentan contra el estado de derecho porque además van contra terceros, contra personas que no tienen nada que ver. “Le pedimos a Dios y a la autoridades que esto no se vuelva a repetir y que sea controlado”.
Sus palabras las recogió la reportera Noreli Morales, del portal alcalorpolitico.
Hasta ayer, los señalamientos contra el gobierno los había venido haciendo el vocero de la Arquidiócesis, José Manuel Suazo Reyes, pero ahora fue el propio Arzobispo quien pasó a la ofensiva.
La denuncia tiene además otra dimensión porque se dio en la víspera de que el presidente Andrés Manuel López Obrador encabece la mañana de este lunes la reunión nacional de seguridad en las instalaciones de la 26 Zona Militar cercanas a la capital del Estado, en la que estará acompañado por todo el gabinete de seguridad ciudadana.
En 1930 el gobernador Adalberto Tejeda, fanático anticlerical, no obstante que el presidente Emilio Portes Gil ya había dado por terminada la Guerra Cristera, decretó su propia ley y procedió a clausurar templos y a perseguir a los ministros de culto, acción que tuvo como punto culminante la agresión a tiros contra varios sacerdotes en el puerto de Veracruz que dejó como saldo la muerte del padre Darío Acosta Zurita. El entonces obispo Rafael Guízar y Valencia, hoy declarado santo, se opuso a la acción oficial y también sufrió la persecución.
Luego de que se superó aquel conflicto, los siguientes gobernadores mantuvieron buenas relaciones con la cúpula religiosa de Veracruz e incluso los apoyaron en la reconstrucción o en la edificación de nuevos templos, e incluso el inmediato anterior, Miguel Ángel Yunes Linares, dio marcha atrás a un intento de legislar sobre el aborto y se mostró varias veces al lado de los jerarcas religiosos.
Con la actual administración ha habido abierta confrontación por el mismo tema y por el del matrimonio igualitario, entre personas del mismo sexo, que la Iglesia considera como un grave atentado contra la vida desde su concepción así como contra la familia, respectivamente. Una reforma al Código Civil el pasado 12 de mayo, que la institución religiosa interpretó como un paso hacia esto último, agrió la relación con el gobierno de Morena.
Las gotas que derramaron el vaso fueron los actos vandálicos contra templos católicos el 1 de junio, con pintas a favor del aborto, y siete días después durante una protesta por la muerte de una persona presuntamente a manos de policía estatal en el Cuartel San José.
En Veracruz se estima que de 8 millones 100 mil habitantes, aproximadamente 7 millones son católicos, fieles que podrían inclinar el resultado de la votación a favor de determinado partido
Desde anoche habrían llegado a Xalapa el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, así como los secretarios de la Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval, y de Marina, José Rafael Ojeda Durán, entre otros.
AMLO realiza su visita 14 al Estado
En medio de ese panorama, el presidente Andrés Manuel López Obrador tendrá actividades este lunes en la 26 Zona Militar Xalapa, ubicada en el municipio de Emiliano Zapata, y en un vivero del municipio de Perote. Anoche llegó a pernoctar en las inmediaciones de la capital del Estado.
No se duda que luego de la reunión de seguridad, en su conferencia mañanera, que tendrá lugar en la misma base militar, le ponga una estrellita en la frente al gobernador Cuitláhuac García Jiménez (CGJ) por los tantos políticos que ha logrado a su favor en los últimos días.
Tampoco se duda que entre una actividad y otra se reúna con CGJ y con el delegado federal Manuel Huerta (ha rebasado las expectativas de la aplicación de programas sociales en el Estado, que significarán muchos votos), para checar que estén aceitando debidamente la maquinaria electoral para el próximo año.
Decir que viene a Xalapa es solo eso, un decir, porque estará alejado de la población, y los lugares en los que estará no son de fácil acceso para sus fans o para quienes quieran ir a hacerle protestas. Su staff sigue estricto: no más de cincuenta personas estarán en sus dos actividades y la mayor parte de ellas no podrán acercársele.
La de este lunes será la visita número 14 que realice al Estado desde que tomó posesión. A Xalapa no venía desde el 2 de diciembre de 2018, cuando apenas tenía unas horas como presidente. Regresa casi una semana después de que estuvo en el sur de la entidad, como que Veracruz le interesa sobremanera por el tamaño de su padrón electoral.
Y Cuitláhuac le dará otra buena nueva
Una vez más, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez seguramente lo recibirá con la información de que la reforma “electoral” de su administración prácticamente quedó asegurada una vez que más de 107 cabildos la aprobaron.
Se tiene previsto que la próxima semana en sesión legislativa se cumpla el proceso legal y se dé el paso para que el Ejecutivo la promulgue, a reserva de que parte de la oposición ha anunciado ya que impugnará la reforma en tribunales.
Regresa Mónica
Una buena noticia para los cientos de clientes de la carismática Mónica Landa Galicia, figura muy popular en Xalapa por su estanquillo de periódicos, revistas y otras novedades en pleno corazón de la ciudad: vuelve este lunes a sus actividades y se le desea que continúe con el éxito que la ha caracterizado.
Porque ya vamos de salida, dice AMLO
En un mensaje de video, el presidente López Obrador dijo ayer que, “ahora sí, el país ya va de salida de la pandemia de Covid-19”.
“Estamos dejando atrás la etapa más difícil de la pandemia de Covid-19”, manifestó, aunque matizó: “No es echar al vuelo las campanas, no es cantar victoria, pero considero que ya pasó lo más difícil, lo más riesgoso”, y pidió a la población salir y cuidarse sola.
Aunque Veracruz sigue en semáforo rojo, seguramente por días inhábiles y por quincena, Xalapa tuvo ayer un día con bastante movilidad tanto en restaurantes como en los centros comerciales, casi como en cualquier día normal.
Lo que se advirtió es que ahora sí casi toda la población usa cubrebocas o máscaras protectoras, acepta de buena gana el gel para las manos y cubre la distancia que se recomienda.
“El Gansito” Padilla
La prensa deportiva informó que murió ayer Aarón “El Gansito” Padilla a los 77 años, víctima de covid-19, quien jugó con la Selección Nacional de Futbol en los mundiales de 1966 y 1970. Creo que muy pocos recuerdan que el extremo izquierdo jugó en aquel partido del 17 de marzo de 1967 cuando se inauguró el estadio Luis “Pirata” Fuente, con la selección nacional que dirigía entonces “Nacho” Trelles. La declaratoria inaugural la hizo el presidente Díaz Ordaz, acompañado del gobernador Fernando López Arias. Ahí estuve, tenía yo 17 años. Cuántos recuerdos.