A dos días de que el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), seguramente llevará a cabo su próximo Congreso Nacional Extraordinario, las situaciones al interior de esta organización continúan como estuvieron durante el pasado año 2019, de una gran confrontación interna.
Ya que lamentablemente para todos sus dirigentes y militantes desde que se publicó la convocatoria para la renovación de su dirigencia nacional, la rebatinga inició, encabezada por Yeidkol Polevnsky, cuyo verdadero nombre era: Citlali Ibañez Ávila (nieta del ex presidente Ávila Camacho), presidenta del Comité Ejecutivo Nacional de esta agrupación política.
A partir de esa publicación, la señora Polevsnky inició una persecución interna contra aquellos que veía y consideraba sus posibles adversario para poder reelegirse en la importante posición. Siendo el caso más notorio el intento de expulsión del senador suplente de Ricardo Monrreal, Alejandro Rojas Díaz-duran, quien por su experiencia y calidad política, no solamente no se dejó, sino también le respondió cuestionando su pésima actuación al frente de MORENA, exhibiéndola públicamente.
Siendo a partir de ese momento que inicia la inestabilidad al interior del movimiento creado por Andrés Manuel López Obrador y que a la fecha continúa y que le puede acarrear un alto costo en el próximo proceso electoral. Además de haber exhibido ante la población mexicana las debilidades en cuanto a la personalidad y capacidad política de algunos de sus dirigentes y lo más grave, el pequeño padrón electoral que tiene a nivel nacional. Padrón con el cual la actual dirigente nacional trataba de llevar a cabo la elección de renovación del Comité Ejecutivo Nacional o sea su reelección. Pues se opuso desde ese entonces a que antes de la elección se abriera la afiliación a todos aquellos que desearan integrarse a MORENA, actitud con la que los otros dirigentes no estuvieron de acuerdo. Pues después del triunfo obtenido con el cual se llegó la Presidencia de la República, era lógico que la militancia había crecido y por tanto el padrón también.
Así tenemos que la persecución e intento de expulsión de integrantes de MORENA que consideraba amenazas para sus negras intenciones continuó. Lo que por lógica afecto los intentos de renovación de la dirigencia, como sucedió el pasado mes de diciembre en que no se pudo efectuar por las irregularidades que detecto la autoridad electoral.
Quedando solamente como contrincantes aspirantes a la presidencia nacional, tanto por sus trayectorias como fuerza política: los legisladores, Mario Delgado, Bertha Luján y Alejandro Rojas. Y lógicamente Yeidkol o Citlali, como a usted le guste más llamarla.
Aspirantes todos ellos con una fuerza e imagen política al interior de MORENA muy superior a la de Polevnsky. Ya que en encuesta realizada el pasado 20019, por Facebook, sobre quien debería ocupar la dirigencia nacional de esta organización política los resultados fueron: Mario Delgado, 35 %; Alejandro Rojas, 42 %; Bertha Luján, 13 % y Yeidol Polevnsky, 10 %.
Pero independientemente de lo anterior, que tan legal para la autoridad electoral podrá ser el acto del próximo domingo 26 del presente mes. Pues el Consejo Nacional que lo convocó no tiene el reconocimiento del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Aunque la presidenta de este Consejo, Bertha Luján dice que es válido pues también lo convocaron 18 Consejos Estatales y según sus estatutos este número de consejos es suficiente para validarlo.
La legisladora Luján tiene la preocupación de sacar a MORENA de la crisis en que se encuentra y tiene razón, pues está en puerta un proceso electoral de gran importancia para todas las fuerzas políticas del país, pues de los resultados que se tengan, dependerá el futuro de la política en México.
¿Pero se llevará a cabo el acto del próximo domingo? Esto solamente depende de los integrantes de MORENA, que asistan o no. Independientemente de la opinión del TEPJF. Usted qué OPINA estimado lector. Hasta el lunes. Noti-sigloxxi@hotmail.com (Fech. Púb. Vier. 24-enero-20)