Karime

    Karime Macías de Duarte, mujer de complexión delgada, estatura promedio de la mujer mexicana, piel clara, pelo de tono rojizo tenue, sonrisa nerviosa o fingida y aparentando mayor edad que su esposo, así lucía en los pasillos del Palacio Legislativo de Veracruz, el día que Javier Duarte de Ochoa rindió protesta como gobernador de esta entidad.

    Durante el recorrido que hizo la novel pareja que ese día comenzaba a gobernar Veracruz, en compañía del ex gobernador saliente, poro no por ello, resignado a dejar el “pinche poder”, el nefasto Fidel Herrera Beltrán y otros acomedidos de la desprestigiada clase política veracruzana, hizo su debut ante los veracruzanos presentes y los no, a través de los medios de comunicación.

    Mujer que según las informaciones que comenzaron a circular en torno a su actividad, curso una carrera universitaria, en una de las universidades más prestigiadas del país, como lo es la Iberoamericana, en donde conoció a su esposo, y también en informaciones que circularon dos o tres años después de su llegad al poder, se informó que había alcanzado el grado de doctora. El cual también ya siendo gobernador lo alcanzó su rollizo esposo de parte de una universidad de España. Situación que unos años antes, cuando detentó el “pinche poder” aquí en Veracruz, su jefe y creador, en medio de un gran sospechosismo, también alcanzó, por parte de la Universidad Veracruzana. Pues en esos años a diferencia de la actualidad, todos los servidores públicos de esos corruptos sexenios obtuvieron al grado de doctores. En qué carrera y en cual institución. La mayoría de las veces nunca se supo, pero casi todos eran “doctores”.

    Lo que sí fue evidente, que la señora o doctora Karime no le interesó el estar al frente del DIF del Estado de Veracruz y menos dedicarse a las actividades que la institución lleva a cabo entre la población más desprotegida de la entidad. Pues sus tareas en las acciones de gobierno le ocupaban la mayor parte de su tiempo, las cuales llevaba a cabo con la finalidad de apoyar a su corrupto esposo.

    Como era secreto a voces, la Señora y algunas de sus familiares más cercanas, tomaban decisiones de gobierno lo que no estaba dentro de sus atribuciones como Primera Dama de Veracruz, pero debido a la prepotencia con que se manejó durante ese sexenio, lo hacía.

    Es por este comportamiento que se le ha relacionado en algunos de los delitos que se cometieron en ese tiempo. De los cuales hay pruebas como el manejo de algunas tarjetas de crédito en gran escala, así como transferencias de efectivo a empresas que supuestamente son fantasmas.

    Por el momento la petición de extradición ya está hecha, lo que también de alguna forma puede echar abajo la especulación que ha estado circulando sobre negociaciones entre el recluso Javier Duarte de Ochoa y la actual administración federal. Hay que esperar y no mucho para ver qué sucede. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el lunes. noti-sigloxx@hotmail.com (Fech. Púb. Vier. 1-noviembre-19)

Related posts

Iniciativa priista: sí o …

Las mesas directivas del Congreso de la Unión.

¿Cuál traición a la patria?