A dos meses de concluir el ejercicio fiscal de este año, al menos las secretarías de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP) y de Desarrollo Social (Sedesol) del Gobierno del Estado tienen un subejercicio de 2 mil 713 millones de pesos, lo que sería el reflejo de una mala planeación de sus programas de obras.
Cuando a más tardar en diciembre deberían estar siendo ya entregadas obras programadas, el titular de la Sedesol, Guillermo Fernández Sánchez, declaró el viernes pasado que aunque ya se licitaron los recursos que le asignaron a su dependencia las obras no se han iniciado todavía.
Por su parte, el titular de la SIOP, Elio Hernández Gutiérrez, informó que han asignado ya 75 por ciento de mil 790 millones de pesos que se le etiquetaron para obras de infraestructura carretera, aunque no informó qué avances tienen.
La reportera Isabel Ortega, del portal e-consulta.com Veracruz, actualizó el viernes último información sobre el tema con base en el propio portal de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan).
Así, pudo establecer que 2,713 millones de pesos están en la Tesorería estatal y que el gasto reportado en el Tercer Informe Trimestral del año corresponde solo al etiquetado para nómina.
El viernes también, sorpresivamente, durante una conferencia de prensa en Poza Rica, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez reconoció que las lluvias “le ganaron a su administración” por lo que se tuvo que detener la construcción de algunas obras, en especial en el sur del Estado, aunque garantizó que todas estarán concluidas en marzo próximo.
Por experiencia de años, funcionarios administrativos, exdiputados locales que han tenido que ver con la asignación de presupuestos, expresidentes municipales y constructores saben que las licitaciones y asignación de obras se deben hacer entre los meses de marzo y abril de cada año.
Recurso que no se ejerza tendrá que ser devuelto
Las obras deben estar concluidas en diciembre antes de que termine el año y salvo excepciones y cuando se justifique pueden ser entregadas hasta marzo del año siguiente. Todo el recurso que no se ejerza deberá ser reintegrado al gobierno federal.
Si esto llegara a suceder, el problema se agravaría pues se recortarían recursos para el próximo año en las áreas en las que no se ejercieron, pues el gobierno federal daría por hecho que si no se usaron fue porque no se necesitan.
A ello habría que añadir que para el próximo año todas las entidades federativas sufrirán un recorte de recursos federales, que tan solo en el caso de la SIOP de entre 400 y 500 millones de pesos, según ha adelantado ya su titular.
Los tres funcionarios aludidos, el gobernador y los de la SIOP y la Sedesol, en diversas declaraciones de prensa han aceptado que hay retrasos pero aseguran que no hay problema alguno, que no habrá subejercicio y lo que debe ser la excepción la han convertido en la generalidad: que entregarán las obras hasta marzo próximo.
El pasado 17 de septiembre, Fernández Sánchez reconoció que apenas estaban en el proceso de licitación pero según él, una parte de lo asignado, 480 millones de pesos del Fondo de Infraestructura Social para las Entidades (FISE) se puede aplicar hasta marzo de 2020. También declaró que en caso de que no lo usaran buscarían pedir una prórroga.
Se advierte que desconoce la normatividad ya que un solo peso presupuestado para este año no se puede transferir para el siguiente y tampoco lo que no se ejerza se pueda acumular. Si no se invierte se tiene que devolver. A partir del 1 de enero de 2020 se tienen que estar ejerciendo ya los fondos del presupuesto para ese año.
De acuerdo a su dicho ya se licitaron todos los proyectos para este año aunque no se ha iniciado las obras, y si lo hicieron así para no perder los recursos debieron haber hecho adjudicaciones directas, aunque está por verse que puedan concluir a tiempo las 16 mil obras que asegura que tienen proyectadas.
Su justificación del retraso fue: “Tuvimos que dispersar las obras en todo el estado. Estamos haciendo licitaciones para que concursen todos los arquitectos, los colegios, los constructores en todo el estado. Hicimos 48 contratos y se vuelven de mucho papeleo”.
Por su parte, el 11 de septiembre Hernández Gutiérrez también tuvo su justificación: “Arrancamos un poco tarde porque se cambió todo lo que son las obras que nos había dejado el gobierno anterior, se rehizo en obras que queremos hacer nosotros o que pensamos hacer, entonces empezó un poco tarde el proceso de licitación y todo, vamos un poco lentos pero no vamos a caer en subejercicio”.
Igual, demostró desconocimiento de la normatividad, pues según él tienen hasta marzo próximo para “acarrear” los recursos.
Las explicaciones del gobernador
El 18 de septiembre, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, salió a secundarlos en sus declaraciones. Dijo que no caerían en subejercicio, que no existía problema y que contaban hasta marzo de 2020 para ejercer los recursos.
Dio su propia explicación técnica: “Cuando se ejercen presupuestos que van a licitaciones, las licitaciones no se pagan de inmediato, tienen que ejecutar la obra y entonces se tiene que esperar, hay un pago inicial y ese es el porcentaje que ahorita sale como avance, este presupuesto, obviamente vamos a esperar hasta que terminen las obras, las supervisiones, que entreguen bien y entonces de inmediato se hace el pago y ahí se complete todo, lo que ahorita parece como subejercicio realmente no lo es, es que estamos esperando a que terminen, hasta marzo”.
El viernes anterior, cuando salió con que les “ganaron” las lluvias, ofreció otra explicación técnica: “No es sencilla esa parte…”. Dijo que se avanzó “bastante bastante” mientras no llovió, pero “cuando llegan (las lluvias) no es lo mismo empezar a raspar, por ejemplo las carreteras, a levantar, porque, obviamente, podría empeorar la cosa” (alcalorpolitico.com).
Trató de justificar los retrasos diciendo que no fue por el tiempo que tomó entregar el Plan Veracruzano de Desarrollo al Congreso local (en abril pasado) ya que esto no debe hacerse necesariamente al iniciar el gobierno.
Nachón los habría cuestionado
“Prosa aprisa” tiene la versión de que a inicios de septiembre pasado, durante una reunión interna de trabajo, el secretario de Desarrollo Económico, Enrique Nachón García, con una experiencia de muchos años en la función pública les hizo ver el problema y con una explicación técnica a detalle les explicó que no les daría tiempo aplicar los recursos y que se podrían perder muchos fondos.
Según un testimonio, les reprochó que tuvieran miedo o indecisión a ejercer los fondos y ante el optimismo de quienes le aseguraban que sí daría tiempo, les recordó que él tenía un presupuesto asignado para promover, colocar, vender los productos del campo que se hubieran cosechado, pero que se había dejado pasar la época de siembra por lo que este año no habría productos que ofrecer y que su presupuesto se perderá.
El dinero del presupuesto de este año se tiene en la Sefiplan y estaría siendo canalizado a través de la Subsecretaría de Planeación, cuyo titular es José Manuel Pozos del Ángel, hijo del presidente de la Mesa Directiva de la LXV Legislatura, o sea, la responsabilidad de los subejercicios que se están presentando hasta ahora es de los responsables de planeación de cada dependencia, que responden directamente al secretario respectivo.
Mientras, cunde el desempleo, no se crean fuentes de trabajo, las economías regionales están estancadas, ha disminuido el consumo y los inversionistas privados tienen desconfianza en el gobierno y muchas empresas han quebrado.
Julen, ¿adelanto de lo que viene?
El informe de actividades legislativas que rindió el senador panista Julen Rementería del Puerto el viernes pasado en un hotel de Boca del Río mostró su poder de convocatoria con otras fuerzas políticas, un detalle que no se puede dejar pasar inadvertido.
Entre otros, logró que lo acompañaran los coordinadores de las fracciones legislativas representadas en el Senado: Mauricio Kuri del PAN; Dante Delgado de Movimiento Ciudadano; Miguel Ángel Mancera del PRD y Miguel Ángel Osorio Chong del PRI.
Además estuvieron los senadores Claudia Ruiz Massieu, Xóchitl Gálvez, Ismael García Cabeza de Vaca, Erandi Bermúdez, Lupita Murguía, Manuel Añorve y Víctor Fuentes; más de un centenar de alcaldes del PRI, PRD, PAN y Movimiento Ciudadano; diputados federales y locales de esos partidos; líderes de cámaras empresariales y de asociaciones civiles, así como académicos.
Julen podría ser en 2024 no solo el candidato del PAN a la gubernatura sino también encabezar un gran frente pluripartidista para enfrentar a quien postule Morena. Lo del viernes puso ser ya un adelanto. Por el momento no se ve a nadie más que pueda competir con posibilidad de éxito contra las huestes de AMLO.