Ya es cliente conocido de la casa, o un viejo conocido, de tanto venir y estar entre nosotros.
Oootrrraaa vez, de nuevo, dentro de una semana, el viernes 31 el presidente Andrés Manuel López Obrador estará en el Estado.
Su sexta visita la realizará a Coatepec para instalar el primer Centro Integrador para el Desarrollo y el Bienestar, el primero en el país y el primero de mil que su gobierno tiene proyectado para Veracruz.
El miércoles, el súper delegado Manuel Huerta adelantó que dará a conocer los alcances que el programa Producción para el Bienestar, en su apartado del café, tendrá en todas las regiones del país. Ese programa, aquí se va a estrenar.
En el caso concreto del café, dos días antes, en Tezonapa informó que se apoyará a casi tres mil cafeticultores del municipio y sus alrededores, a quienes se les dará cinco mil pesos anuales.
En Tezonapa, el lunes 20 entregó los primeros pagos, de siete mil trescientos pesos anuales, que beneficiarán a 12 mil productores de caña de azúcar de los municipios de Omealca, Tezonapa, Yanga, Cuitláhuac, Amatlán, Tierra Blanca y de algunas comunidades de Córdoba.
Tal vez se diga que cinco mil pesos y siete mil trescientos anuales, respectivamente, sea muy poco, pero para mucha gente necesitada (y que vota), representa una verdadera fortuna. Sí, pero a ver quién te regala ese dinero, dirán los beneficiados.
Por lo que explicó el delegado y se entiende, se trata de toda una estrategia para facilitarle a la gente la atención de los programas sociales, que la montaña morena vaya a ellos.
Tiene su chiste. Luego del censo de beneficiarios que se hizo, y en algunos lugares todavía se hace, casa por casa, en esos centros podrá acudir la gente a darse de alta, de baja, a hacer cambios y a recibir asesorías sobre los programas sociales federales.
Con un plus: en cada uno habrá un cajero automático en los que se cobrará comisiones más bajas que en los de los bancos comerciales. Dijo que con ello se pretende acercar los servicios financieros a todas las personas.
Uso la palabra estrategia porque en el trasfondo de todo se advierte que de lo que se trata es de ir concentrando la prestación de servicios, como en este caso bancarios, por parte del gobierno, desplazando a los grandes corporativos.
No está mal y con ello Morena hecho gobierno matará dos pájaros con un mismo tiro: permitirá a muchos mexicanos que no tienen acceso a los servicios de los grandes bancos poder tenerlos ahora, e irá sembrando la gran parcela que es Veracruz para cosechar muchos votos de agradecimiento en 2021.
Esos cajeros, según explicó el delegado Huerta, serán del Banco del Bienestar del Pueblo y estarán instalados en las zonas más alejadas.
Lo tienen todo tan bien calculado que ofreció un dato interesante: en el país existen 580 municipios en los que hay cajeros automáticos, la mayoría en las cabeceras municipales y cobran altas comisiones de entre 28 y 35 pesos. El Banco del Bienestar del Pueblo, dijo, va a cobrar comisiones mucho más baratas.
Pero, a todas luces, les interesa Veracruz. No es gratuito que aquí estén poniendo la mayor atención, que aquí vayan a iniciar sus programas, si se toma en cuenta que el Estado tiene uno de los tres mayores padrones electorales del país junto con el Estado de México y la Ciudad de México.
Y junio lo abrirá AMLO en el Estado también, porque el sábado 1 irá a Tezonapa y seguramente al puerto de Veracruz para conmemorar el Día de la Marina.
López Obrador viene y va del altiplano a Veracruz y viceversa y no afloja la plaza. Y utiliza al súper delegado Huerta como su operador cuando el trabajo lo pudo haber hecho el gobernador Cuitláhuac García, aunque por alguna razón prefiere tener el control y el manejo directo y no delegárselo. Por algo será. O porque no confía en su equipo y tampoco se confía.
Le fallan a Morena sus alcaldes
Cuando pensábamos que solamente en Xalapa el alcalde (primero) de Morena había fallado y causado mucha decepción, ahora vemos que ha ocurrido lo mismo con los habitantes de la Ciudad de México (CDMX) con la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
En sus ediciones del domingo, el diario El País y la revista Proceso, dos publicaciones influyentes se ocuparon de la primera gran crisis del equivalente de alcaldesa de la capital del país, a quien responsabilizan de no haber actuado a tiempo para atenuar la emisión de contaminantes que ahoga a la CDMX.
La señalan de haber actuado de manera “tardía” y cometido omisiones “graves” al atender la crisis ambiental de la semana pasada.
El País recordó que es una científica que tenía como prioridad la defensa del medio ambiente, pero que vio cómo en una semana su especialidad le estalló en la mesa de su despacho y enfrenta ahora su primera gran crisis.
Dijo que su imagen quedó golpeada ante la tardanza en adoptar medidas y la falta de autocrítica ante un problema que, según los expertos, se veía venir. Ante las críticas que se desataron en su contra volvió a la cantaleta de culpar al gobierno anterior: “El Gobierno anterior no nos dejó un protocolo”.
Proceso recordó que desde septiembre de 2016 la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAME) había alertado de la falta de tecnología para medir las emisiones de partículas contaminantes PM2.5 y con base en ella emitir protocolos a fin de evitar daños a la salud pública.
Algo por lo que más la critican es porque ella fue secretaria de Medio Ambiente en el gobierno del entonces jefe de Gobierno Andrés Manuel López Obrador.
Uno, pues, el de Xalapa, porque no tenía ninguna experiencia política y administrativa al llegar al cargo, la otra, la de la CDMX, porque sí la tenía, había ocupado la secretaría del ramo y además es una científica experta en el tema.
La realidad se va imponiendo. Están faltando a la expectativa que despertaron y dejando mal al partido que los postuló, Morena. Los ciudadanos y electores, quienes sufren las consecuencias, califican y registran, pero también la oposición. Así como van las cosas, difícilmente el partido de AMLO volverá a tener una copiosa votación como la de 2018 y a alcanzar tantos triunfos electorales como entonces.
Morena perfila candidata para Xalapa
La versión surgió en abril, durante la Semana Santa: el próximo candidato a la alcaldía de Xalapa por el partido Morena será, en definitiva, una mujer.
La especie alentó enseguida la esperanza de las diputadas locales Rosalinda Galindo Silva y Ana Miriam Ferráez Centeno, quienes sueñan con ser la principal munícipe de la capital.
Pero la aclaración cayó como balde de agua fría: no, ninguna de ellas tiene en este momento la posibilidad, porque la candidatura estaría destinada para la actual titular del Instituto de Pensiones del Estado, la exlegisladora local Daniel Guadalupe Griego Ceballos.
En la elección de julio de 2018 ella ganó la diputación federal por el distrito VIII de Xalapa pero un pequeño gran olvido que tuvo dio al traste con todo: no renunció a tiempo, para cumplir con el término legal, como consejera del INE, por lo que la Sala Superior del Tribunal Electoral de la Federación le retiró la constancia y la invalidó.
Morena piensa que ella puede no solo rescatar al electorado que se ha decepcionado de Morena a causa del alcalde Hipólito Rodríguez, sino enmendar todos sus desaciertos si logra llegar al Palacio Municipal.
Seguramente deben estar tomando en cuenta también que en 2021 ya no habrá efecto López Obrador y que Morena y sus candidatos y luego autoridades no han resultado lo que se creía de ellos. La contienda les resultará más complicada.