Con índice de fuego, como pocas veces en la historia del país un legislador por Veracruz ha hecho una denuncia en la más alta tribuna, la Cámara alta del Congreso de la Unión, Ricardo Ahued Bardahuil señaló que en el gabinete del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, no obstante su condición de senador, lo tratan con desprecio cuando les llama para una reunión de urgencia del tema de seguridad. “No hay quien nos conteste”.
Con una valentía inusitada, haciendo a un lado intereses partidistas y pensando en Veracruz y sus habitantes, el legislador puso los puntos sobre las íes en el tema de violencia e inseguridad en el Estado y así como defendió al presidente y al gobernador Cuitláhuac García Jiménez, también reconoció en voz alta y con todas sus letras, sin ningún reparo, que los veracruzanos “están aterrorizados”. “Yo no vine a tapar nada de lo que pasa en Veracruz”.
El exalcalde de Xalapa e integrante del grupo parlamentario del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) intervino en la sesión del martes del Senado de la República luego de que el problema de la inseguridad en Veracruz tras la masacre en Minatitlán escaló tanto a la Cámara de Diputados como a la de Senadores y provocó enfrentamientos entre legisladores panistas y morenistas así como críticas de los senadores veracruzanos Indira Rosales San Román y Julen Rementería del Puerto, del PAN, escamuzas verbales en las que también participaron sus homólogas Gloria Sánchez Hernández y Claudia Esther Balderas Espinoza, de Morena.
Aunque su intervención inicialmente fue para solicitarle al presidente de la mesa directiva del Senado, Matí Batres Guadarrama, buscar una reunión de trabajo con el secretario de Seguridad Pública del gobierno federal, Alfonso Durazo Montaño, para tratar con él el problema que se vive en Veracruz, sustentó su solicitud pintando el terrible panorama que ensombrece a la entidad.
Dirigiéndose en especial a los senadores veracruzanos, dijo que el tema debía ser tomado con toda seriedad por “las desgracias” que viven los deudos. Les demandó “acceder” a una plática seria, constructiva, en otro nivel, con el secretario Durazo “para abonar y ayudar”. Les pidió no seguir ofendiendo ni culpando. “El país está ensangrentado y pudiéramos seguir ofendiendo, que si tiene la culpa una administración, que si viene decayendo otra, y por los muertos no se vale que estemos en este escenario de echar culpas”, les reprochó.
“Veracruz está en México y México está ensangrentado”, recordó y expresó que lo que hicieron los demás se está heredando, “es lógico”, pero pidió ir viendo hacia el frente.
Los veracruzanos, “aterrorizados”
Dirigiéndose a todos los senadores, les dijo que si los invita a Coatzacoalcos, “y hablo por los veracruzanos que votaron por mi, están aterrorizados. Si van al norte, también. Eso no lo vamos a ocultar”, aunque defendió que el gobierno de Cuitláhuac García Jiménez “está haciendo un gran esfuerzo con todo lo que está a su alcance, tampoco lo podemos escatimar”. Mencionó que recibió un gobierno sin recursos, sin patrullas, con la policía desarticulada y “con una serie de problemas”.
Les demandó a los legisladores veracruzanos ayudar al gobernador, “que sí se está fajando en el tema de seguridad” y dijo que él no lo culpa ni al presidente por algo que es responsabilidad de todos. Les reprochó entonces que en un escenario de disputas políticas “no abonamos a la tristeza de los que están allá llorando a los muertos en Minatitlán, a los que ayer asesinaron en Xalapa a las doce del día, al que asesinaron antier en Coatepec a las cinco de la tarde”.
Ahued improvisaba. Sin perder el control señalaba, a veces alzaba la voz e incluso cuando una vez sus compañeros senadores se quisieron parar para aplaudirle, les solicitó que se sentaran. Y siguió.
Propuso decirle a Durazo Montaño los graves problemas que hay en la colindancia con Oaxaca, Puebla y Tlaxcala. Dio a conocer que en días pasados la Canacar le reportó que tan solo en una semana 14 tráilers sufrieron asalto a mano armada
“Yo sí vivo en Veracruz y tengo mi familia en Veracruz, y créanme que sí me preocupa vivir ahí como atravesar Tlaxcala, como ir a Guanajuato, porque allá también tengo familia, y da pavor hoy recorrer el país, pero no lo vamos a resolver con estos pleitos que hacemos partidizando la seguridad, mal haríamos en estar partidizando la seguridad, porque el problema es más grande que cualquier partido político de este país”.
Expresó su bienvenida a las críticas “pero constructivas, bienvenido que tengamos que decir lo que sucede en Veracruz, yo no vine a tapar nada de lo que pasa en Veracruz, pero tampoco vengo a culpar al gobernador, tampoco vengo a culpar al presidente de la república a ciento y tantos días que llegó”.
Señaló que la economía del país se ha venido abajo en los últimos años “y ya no me voy a ir para atrás porque entraría yo al diálogo y ofensas de partidos en el gobierno, eso no me interesa, me interesa que se pacifique Veracruz”.
Fue enfático al expresar que tiene fe, “totalmente”, en el presidente y en el gobernador, y fue entonces cuando denunció el trato con desprecio que le dan en el gabinete federal.
Insistió en que no ocultaba lo que sucede en Veracruz pero apuntó que buscando culpables no se solucionará nada. Remató diciendo que el tema sí trae a Veracruz “temblando todos los días”.
Agenda de AMLO no incluye tema de seguridad
De acuerdo a la agenda del presidente Andrés Manuel López Obrador para su visita el fin de semana al sur del Estado, no se contempla nada que tenga que ver con el tema de la inseguridad.
Salvo que anuncien un cambio de última hora, llegará el viernes al medio día al aeropuerto de Canticas en el municipio de Cosoleacaque para trasladarse enseguida al municipio de Coatzacoalcos donde supervisará la planta de fertilizantes y conocerá la ampliación del puerto. Esos actos serán privados.
Ese mismo día, a las 17:30 horas, estará en Minatitlán para encabezar un acto de los Programas Integrales de Bienestar. Pernoctará en esta ciudad. El sábado 27 recorrerá y supervisará de manera privada la refinería “Lázaro Cárdenas”. Luego se trasladará al estado de Oaxaca.