– Agradecemos al prolijo comunicador capitalino Octavio Raziel García nos comparta esta interesante colaboración, denominada “Mujercitas”.
Definitivamente, el hombre no entiende; no sobrevive tan fácilmente a tener una pareja hasta que la muerte los separe. Quiere una extra -y si se pueden dos- mejor.
El primero de ellos, Adán, vivió feliz en el Edén con su primera esposa, Lilith de Mesopotamia, quien ya le había dado varios hijos.
Las razones por las que se separó de ella no son muy claras, y a estas alturas del partido, ya ni al caso. Lo cierto es que nuestro primer padre vagó feliz por el Paraíso.
No tenía quien le reclamara el por qué había llegado tarde a casa, si había bebido más de la cuenta, que dejaba la ropa (hojas de parra) tiradas por todos lados, que sí, seguramente, andaba con alguna piruja del rumbo. Total, era un soltero feliz.
Hasta qué…Dios lo vio dormir como un bebé y se aprovechó de ello para quitarle una costilla y presentarle a quien sería su nueva esposa: Eva, esto es, una creatura de segunda desde entonces.
No le fue muy bien a Adán, pues Eva le resultó una mujer metiche, intrigosa y que andaba de amiga de una serpiente, la cual pensó que a la chava le habían faltado dos neuronas y caería fácil en la tentación del Árbol de la Sabiduría.
El resto de la historia lo saben bien hasta los párvulos de la doctrina en cualesquiera las tres religiones monoteístas bien conocidas.
El viaje de la mujer por la historia ha estado plagado de mitos o leyendas, siempre sujetas a los varones. Incluidas las vestales romanas o las tres diosas griegas: Artemisa, Atenea y Hestia; hasta las guerreras de la isla de Lesbos. (¿A ellas también se les homenajeará con motivo del Día Internacional de la Mujer?)
En el Oriente, las mujeres eran (y son) sumisas al extremo. Las japonesas morían al gangrenarse sus pies achicados y eran incapaces de alzar la vista. Continúa la costumbre de que deben de ir tres pasos atrás del varón y diez pasos adelante en las zonas minadas.
En Mesoamérica, las niñas aztecas, mayas y de otras naciones amerindias eran educadas con rigor y, sobre todo, con valentía por las continuas guerras que enfrentaban entre los pueblos de este continente.
En el sitio que pusieron los españoles a Tenochtitlán, se escribió que las mujeres se arremangaban sus faldellines y peleaban con tanto valor como los caballeros águila o tigre.
Las tres religiones monoteístas: judaísmo, islamismo y cristianismo, no han variado el trato del hombre a las mujeres desde que Jehová, Mahoma y Cristo se las encargó.
Las judías siguen relegadas en la sinagoga y son una carga hasta a la hora de la dote; las musulmanas tienen como única función en la vida ser muñecas inflables para el gusto de su dueño; en tanto que las cristianas, sobre todo las atrapadas por las sectas, entraron en una vorágine sin salida. (las hay católicas emancipadas).
Del machismo mexicano hay muchos libros que les recomendaría, pero no hay espacio. En nuestro país, la participación histórica de la mujer ha sido importante, aunque no siempre reconocida: en la conspiración de independencia; luego, como soldaderas cargando el chilpayate a la espalda y torteando en el campo, amén de ser enfermeras valiosas en esa guerra. Y luego, como sufragantes, fueron más manejables por los políticos que les hicieron creer que ya eran ciudadanas de primera.
Con el siglo XXI nació el “#MeToo” y sus imitaciones planetarias, que está cosechando efectos contraproducentes.
Lo que en un principio fue un freno a las prácticas abusivas de numerosos varones, no sólo de Hollywood, sino en todos los ámbitos, se ha convertido en un riesgo que no queremos correr ningún mortal.
Según informes de Bloomberg, de la Fawcett Society y del PEW Research Center, dedicado a estudiar problemas, actitudes y tendencias en los Estados Unidos y en el mundo, se ha establecido en Wall Street una regla tácita que consiste en “evitar a las mujeres a toda costa”.
Esto es, no ir a almorzar (a cenar, ni pensarlo) con compañeras de oficina; no sentarse a su lado en el avión en un viaje de trabajo; pernoctar en hotel distinto y evitar reuniones a solas con una colega.
Así las cosas, habrá que pensárselo dos o tres veces antes de contratar a una mujer y evaluar los riesgos implícitos de una decisión semejante; convertirse en “mentor” de alguna de ellas, imposible. Hay quienes rechazan dirigirles una tesis, por si las moscas.
Como van las cosas, tendremos que dejar de trabajar con mujeres, asesorarlas o contratarlas; no por juzgarlas inferiores ni menos capacitadas, sino potencialmente problemáticas y dañinas a la sana convivencia de una empresa.
Hay, ciertamente, porcentajes muy altos de ellas que nunca se han sentido acosadas, ni menospreciadas, ni intimidadas, ni han sido ‘toqueteadas’, pero, con todo, pagarán el pato por el miedo al “#MeToo”.
Cierro este homenaje a las féminas con motivo de “su día” con esta referencia bíblica: Es la historia de Iosef y la bella esposa de su amo egipcio, Potifar. Iosef era un siervo fiel, extremadamente escrupuloso y exitoso en el cumplimiento de sus obligaciones.
Su único problema era ser demasiado apuesto. La esposa de Potifar intentó seducir a Iosef. Pero cuando no lo logró porque Iosef se negaba a traicionar a su amo, la amante rechazada -en un ataque de furia- lo acusó de intentar violarla, una mentira que como consecuencia llevó a Iosef a una prisión inmerecida y de por vida.
LOS REFLECTORES POLITICOS
– Agradecemos al versátil comunicador Primitivo López que nos comparta su leída columna “Y punto”.
* Será el martes o miércoles de la semana que viene cuando ocurra una segunda reunión entre el gobernador tamaulipeco Francisco García Cabeza de Vaca con el Administrador General de Aduanas (AGA) Ricardo Peralta Saucedo en esta ciudad fronteriza, nos adelantó el alcalde Enrique Rivas Cuéllar.
El evento será para continuar con el procedimiento de descentralización de la
dependencia federal. Posiblemente se defina el edificio en donde operaría la Administración General de Aduanas, como lo anunció el presidente de la Repúblicaa, Andrés Manuel López Obrador.
La primera reunión se dio en pasado 31 de enero, en la sede de la Asociación de Agentes Aduanales de Nuevo Laredo, en el que abordaron diversos proyectos para fortalecer el liderazgo internacional de Tamaulipas en materia de comercio exterior.
Rivas Cuéllar cito varios espacios disponibles para AGA:
1.- El edificio curvo, en el puente internacional Puerta a las Américas, donde
hace unos años operó la Administración Local de la Aduana.
Formaría parte del Complejo de dependencias federales ya existentes en la zona, donde se ubica el SAT, el INM, CAPUFE, INDAABIN y la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA).
2.-La segunda opción es el edificio de la Antigua Aduana, donde durante
muchos años operó la Aduana neolaredense.
3.- También se ofrecerá al administrador Peralta terrenos aledaños al puente internacional Comercio Mundial, donde construiría un edificio en base a sus necesidades.
Rivas Cuéllar aclaró que dependerá de AGA la decisión en cuanto a tiempos, es decir, de forma inmediata o a largo plazo, no máximo de dos años.
“Ya es un hecho que llegará a esta ciudad la AGA. Ya estamos analizando cada detalle, no puede llegar de manera abrupta, tendrá que ir estableciéndose de manera gradual y esto contribuirá a que Nuevo Laredo regrese a los carriles de alta competencia y recupere el liderazgo como ciudad”, remata Rivas Cuellar.
Por cierto, más que satisfecho el alcalde Enrique Rivas Cuéllar con los frutos logrados durante su estancia en Washington, porque consiguió dos objetivos:
1.- Que no existe tal emergencia migratoria en la frontera México-Americana, como lo ha hecho saber el presidente Donald Trump; por el contrario, hay trabajo conjunto entre los dos Laredos, con proyectos binacionales.
De esta manera cambia la apreciación de lo que en realidad se vive en la
frontera.
2.- Que Washington está volteando a ver a Nuevo Laredo, pero con una
mirada centrada en el potencial del comercio internacional
3.- Los alcaldes de los dos Laredos buscan evitar la construcción de un muro que divida esta región fronteriza, por lo que el mayor de Laredo, Texas Pete
Sáenz, junto con el alcalde Enrique Rivas, presentó en Washington un proyecto para generar lugares de recreación y esparcimiento en ambos lados del río Bravo.
“Buscamos que en este territorio de Laredo no exista la construcción de un
muro, sino lugares de recreación en la orilla del río Bravo, y es el proyecto que está presentando la ciudad de Laredo, Texas; nosotros tenemos que hacer lo mismo en la ciudad de México”, contó el munícipe neolaredense.
También comentó que se envió el mensaje de unidad que existe en los dos Laredos y adelantó que ya se prepara una agenda en la ciudad de México, a la cual está invitado Sáenz, para presentar el proyecto de lugares de esparcimiento al gobierno federal.
En la propuesta recordarán que las zonas aledañas al río pertenecen al resguardo federal; en esta visita también se darán a conocer proyectos que
potencialicen la región.
En Washington, Rivas Cuéllar visitó la Embajada de México, donde dialogó con personal del SAT sobre temas relacionados con la mejora de la infraestructura del Puente 3 y del proyecto para el Puente 4. Más redituable no pudo ser el periplo.
* En fecha reciente, la Cámara de Diputados entregó la medalla “Sor Juana Inés de la Cruz” a la maestra y senadora Ifigenia Martínez Hernández, a quien reconoció por su labor y lucha en la vida política y su aportación como funcionaria y académica, así como por su participación en la defensa de los derechos humanos y la autonomía universitaria.
En sesión solemne con motivo del Día Internacional de la Mujer, el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara baja, Porfirio Muñoz Ledo, destacó: “Mayor es mi regocijo al entregar la presea con la que pretendemos reavivar la estirpe de la musa y que este empeño coincida con la trayectoria vital de mi hermana en la vida pública de México” y la mujer más destacada del país. NOS LEEMOS LA PROXIMA SEMANA. …Y PUNTO
LENGUA EN ESCABECHE
– El presidente Andrés Manuel López Obrador aseveró en fecha reciente que los productores del país “son héroes”, porque resistieron todo el periodo en el que se abandonó al campo de México y siguen produciendo “a pesar de los pesares”.
Al encabezar en Encarnación de Díaz, Jalisco la presentación del programa Precios de Garantía para Pequeños y Medianos Productores de Leche, indicó que se cambiará la política y se regresará a apoyar al campo, por lo que pidió cuidar que estos apoyos lleguen de manera directa a los productores del país.
Refirió que antes, para justificar el abandono al campo los gobiernos “satanizaron la palabra subsidio”, cuando en otros países, como Estados Unidos, Canadá y varios de Europa, se apoya y subsidia a los productores.
En este marco, López Obrador refrendó que la corrupción e impunidad es el principal problema de México, “el cáncer que estaba destruyendo a México”, por lo que será desterrada del país y no habrá necesidad de aumentar impuestos.
– El gobernador Cuitláhuac García Jiménez entregó el Premio Estatal a la Mujer Veracruzana 2019, a la ciudadana Norma Romero Vázquez, coordinadora de la organización Las Patronas, caracterizada por su labor humanitaria a favor de los migrantes centroamericanos.
En sesión solemne del Congreso del Estado, el Ejecutivo estatal expresó que Las Patronas representan la lucha de las mujeres en México, por lo que les manifestó su respeto, admiración y gratitud a Romero Vázquez y a todas las integrantes de dicha organización, por el trabajo que han venido haciendo con amor, solidaridad y espíritu humano hacia los migrantes
Dijo que con esa distinción se premia no solo esa labor, sino la reiteración de muchas mujeres por abrirse un camino aun en condiciones muy difíciles y que están dispuestas a dar más por los demás
Agregó que el Día Internacional de la Mujer es para reconocer a las mujeres por lo que son, por lo que hacen y por aquellas que se han destacado en la lucha por sus derechos.
– A mis estimados lectores de “Los reporteros somos noticia”, les comento que dadas las difíciles circunstancias económicas de la prolongada “cuesta” del inicio de este año, me ví en la necesidad de suspender temporalmente este envío, por lo que ahora apelo a su benevolencia para solicitarles la compra de una suscripción semestral de $50.00, depositando en la cuenta Banamex
4766840812776990. Agradeciendo como siempre sus atenciones, que estén bien y seguimos en comunicación.
– El martes 12 de este mes, los alumnos de la Facultad de Trabajo Social de la Universidad Veracruzana mostrarán diversas gráficas en una Expo Foto que será instalada en la vestíbulo de la USBI, según oportuna información divulgada por la vocera universitaria en la Vicerrectoría Poza Rica-Tuxpan, Alma Celia San Martín.
. Recientemente, la chévere sección “Cápsulas políticas y algo más”, del portal informativo Crónica del Poder comentó que Omar Alemán Chang, Oscar Olvera y Elisa Guadarrama están de manteles largos, ya que su revista Líder Veracruz cumple 15 años de haber iniciado publicaciones.
La portada de aniversario trae una foto del Secretario de Educación de Veracruz, Zenyazen Escobar, con su respectiva entrevista. Esta revista se publica también en los Estados de Puebla y Tlaxcala. ¡Muchas felicitaciones a los amigos y sus colaboradores!
RECUERDOS DEL MACUILTEPETL
– Nuestro agradecimiento al dinámico comunicador capitalino José Antonio Aspiros Villagómez por enviarnos sus Textos en libertad, esta vez con el sugestivo título de “Hace quince lustros y catorce sexenios”.
La letra impresa nos ha acompañado desde casi mediados del segundo sexenio de este relato, que abarca los 15 lustros transcurridos entre 1944 y 2019.
Del “Silabario de san Miguel”, del que sólo sabrán ahora nuestros compañeros del INAPAM, brincan nuestros recuerdos al “Libro de oro de los niños”, obsequio navideño con dedicatoria impresa de los abuelos en 1948, y de nosotros a nuestros nietos, más de 12 lustros después (2010).
Más adelante, en la era del furibundo macartismo anticomunista (¿será pleonasmo?) leímos tanto una revista que enviaba al abuelo la Embajada de Estados Unidos, como las historietas de Walt Disney -no tan inocentes, según el libro de Dorfman y Mattelart, “Para leer al pato Donald”- y otros tebeos a que se refiere Umberto Eco en uno de sus libros, como “El ratón Mickey, periodista”, editado en 1946.
Disfrutamos además de versiones infantiles de novelas decimonónicas -Salgari, Verne, Dumas, etcétera- o tomadas de las historias de “Las mil y una noches”, varias de las cuales leímos completas después. Los domingos no nos faltaba -mientras vivió el abuelo- la sección de muñequitos de Excélsior.
En aquellos tiempos todavía pasaban por Tacubaya los pregoneros surgidos en la época novohispana; eran vendedores de chichicuilotes, camotes, guajolotes.
También iban los aboneros con su mercancía -ropa- sobre un hombro; pasaban a vender perfumes, globos, azucarillos, gelatinas (les decíamos “jaletinas”) y la fauna callejera se componía de perros, un oso viejo que bailaba al son del pandero y una burra que ordeñaban afuera de la casa y nos daban su leche como cura de alguna de las enfermedades padecidas al parecer a los cuatro años: varicela, sarampión, tosferina y hepatitis.
Había muchas misceláneas y una “moderna“ tienda 1-2-3; también pulquerías y un café de chinos con un televisor donde -a finales del segundo lustro- vimos la Carrera Panamericana que se canceló por sangrienta en el sexenio de Ruiz Cortines (1954) como ahora nos privan, por costoso, del Gran Premio de México, al cabo de cinco años en ambos casos.
En ese y muchos otros aspectos fue memorable el sexenio de Adolfo López Mateos: él impulsó la llegada de la Fórmula Uno a México, a la par que disponía que los libros de texto de primaria fueran únicos, obligatorios y gratuitos, no sin ruidosas protestas de los editores y del opositor Partido Acción Nacional.
Muy cerca de casa estaba el cine Unión, donde exhibían películas mexicanas tal vez de la llamada “época de oro”, sobre temas campiranos con sombrerudos a caballo, empistolados, enamorados (ya muy mayorcitos) y borrachos, así como otras de tipo urbano, con rumberas, bandoleros, coches, vecindades y pobreza. Íbamos los viernes.
Y por las noches, desde el patio de la casa aprendimos a conocer por sus nombres y posiciones lo que ya no se ve en los cielos de la CDMX: las estrellas, las constelaciones. También nos emocionaron y despertaron temprano interés por las ciencias, las estrellas fugaces y las lluvias de estrellas, lo mismo que los ‘canales’ de Marte que vieron los astrónomos Schiaparelli y Lowell.
Por esas calles de nuestra infancia tenían su terminal los camiones que llamaban “postergados” -quién sabe por qué- y que iban de Tacubaya a la Villa de Guadalupe, unos por la ruta de Tacuba y cruzaban por la actual segunda sección del bosque de Chapultepec, y otros por la vía de San Juan de Letrán, esa avenida que, junto con su continuación, Niño Perdido, se llama Eje Central Lázaro Cárdenas desde el sexenio de José López Portillo.
Chapultepec, por cierto, fue el lugar de nuestros paseos dominicales de la mano del abuelo, quien había sido teniente coronel durante la Revolución.
Ahí nos hizo una silueta de perfil un señor de nombre Francisco Paz y Puente, que a eso se dedicaba. Otro destino dominical era Chimalistac, donde supimos desde entonces de un escritor llamado Federico Gamboa, aunque de su famosa novela “Santa” sólo conocimos entonces el título y no el pícaro argumento.
Antes del paseo íbamos a misa en la parroquia de la colonia San Miguel Chapultepec, donde el recuerdo más remoto es de cuando, en brazos del abuelo y él de pie porque las bancas se habían llenado, nos dijo cuando tocaban el órgano y tal vez cantaban algo en latín: “Aquí también hay música, pero es de otro tipo”.
En el sexenio de Miguel Alemán se terminó de construir la Ciudad Universitaria. En sus jardines fue colocada una estatua de ese presidente de la República, que lustros después sufrió dos atentados y desapareció.
Fuimos a conocer ese campus aún inconcluso en un tranvía -transporte favorito del abuelo- que abordamos frente al edificio Hipódromo donde antes estuvo una inmensa propiedad del yerno de Porfirio Díaz.
Tenía un enorme anuncio luminoso del calzado Canadá, que luego fue cambiado por el de la Coca Cola. Esa mansión fue fragmentada y sólo quedó la Fundación Mier, en cuya esquina de avenida Jalisco y Antonio Maceo, casi frente al cine Ermita, cada diciembre colocaban en el jardín con vistas a la calle un gran Nacimiento, pero que nada le pedía al que poníamos en el patio de la casa, con muchas ramas, musgo, heno, faroles, serpentinas y foquitos.
El recorrido hacia CU era por las avenidas Revolución y Mixcoac, cuando los rieles estaban sobre montículos de tierra y abajo, a los lados, las calles para el transporte de gasolina.
También íbamos -no siempre en tranvía, sino en camiones de la ruta Colonias Urbanas- a San Pedro de los Pinos, donde vivía la bisabuela Teresita, cerca del que fue domicilio de nuestro hoy colega y amigo Carlos Ravelo Galindo, con quien compartimos recuerdos de aquellos rumbos.
En uno de esos autobuses vimos una vez al sargento Manuel de la Rosa, un militar veterano de la guerra de Intervención, quien habría nacido en 1839 y aún andaba solo en la calle.
En el sexenio de Ruiz Cortines fuimos a las primarias ‘Luis Vives’ y ‘República de Costa Rica’ (ésta, frente al ‘árbol bendito’ y con festivales en su estupendo auditorio al aire libre, animados por artistas de la ANDA pues era compañera nuestra Sonia, la sobrina de Pedro Infante).
El Instituto ‘Luis Vives’, básicamente para hijos de antiguos refugiados españoles, estaba en la esquina de Observatorio y Parque Lira, separada solamente por el mercado de Cartagena de la Academia Militarizada México en la que pretendía inscribirnos después el abuelo, pero su enfermedad le impidió hacerlo.
Supimos que le pedía a Dios vivir al menos dos lustros más para dejarnos ya mayores, y una noche, él ya fallecido, lo vimos de pie y observándonos en el pasillo que había entre la cocina y el comedor de la casa que había construido en 1923, mismo año en que hizo la suya el coronel abuelo del escritor Gabriel García Márquez. Ambos vivimos con nuestros respectivos abuelos militares.
De manera que terminamos la primaria en la escuela ‘Costa Rica’ ya mencionada y luego la secundaria, en la Tres matutina ‘Héroes de Chapultepec’.
Tres recuerdos más de la primaria: 1) al terminarla -cuando faltaban dos años para que concluyera el sexenio de Ruiz Cortines- nos llevaron por segunda vez al Registro Civil de donde salimos ya con dos apellidos, porque sólo teníamos el materno.
2) Al grupo de niños que salíamos de sexto (las niñas estaban aparte) nos hicieron un desayuno en la llamada Casa Amarilla, y 3) en ese plantel del que era directora la maestra María Elena Escarza y conserje un señor de apellido Meza, aprendimos el Himno Nacional Mexicano con todas sus estrofas, incluidas las que le quitó en su sexenio Miguel de la Madrid, porque mencionaban a Agustín de Iturbide y a Antonio López de Santa Anna.
En la Casa Amarilla -hoy sede de la alcaldía Miguel Hidalgo y próxima a convertirse en museo- vivía Edmundo Victoria, un compañero de la primaria e hijo del director de la Casa Hogar para Varones que ahí existió, y era jefe de la imprenta del lugar el padre de otro condiscípulo de apellidos Díaz Díaz.
Separado por una angosta calle empedrada estaba el Parque Lira, que un día fue abierto al público y lo visitamos varias veces. Al poniente estaba la estación Tacubaya del ferrocarril que iba de México a Cuernavaca.
Se avecinaba un nuevo sexenio, el de Adolfo López Mateos, durante el cual hicimos anticipadamente el servicio militar al cumplir tres lustros, y pudimos ver a ese presidente durante la jura de bandera en la Plaza de la Constitución. Y volvimos a verlo cuando, ya reporteros al cabo de cuatro décadas y tres sexenios, cubrimos sus últimas actividades como gobernante. (Este relato continuará)
CAMINANDO POR ENRIQUEZ
– Gracias a la bien informada comunicadora Yamiri Rodríguez Madrid por enviarnos su reciente colaboración titulada “Los 500 años de Veracruz”.
Esta semana, Veracruz tuvo un espacio considerable en la agenda legislativa con motivo de sus 500 años como el primer ayuntamiento del continente americano.
En reciente sesión en el Palacio Legislativo de San Lázaro, se aprobó tanto la conformación de un grupo de trabajo que apoye la organización de dichos festejos, así como la aprobación de una moneda de 20 pesos que conmemore este hecho histórico.
Aunque la magna celebración es el próximo 22 de abril, es decir, estamos a poco más de un mes, el gobierno estatal aún no presenta el programa especial para este festejo, lo que muchos han tomado como una señal de desdén por la fecha.
Por cierto, la legisladora panista, Mariana Dunyaska García Rojas fue la promotora de que se acuñe esta moneda de 20 pesos para conmemorar los 500 años, lo cual se aprobó esta semana.
Asimismo, la oriunda de Medellín de Bravo, ya organizó una exposición fotográfica denominada “Veracruz Puerta del Mar” y una de artesanías Pabellón 500 años”.
El grupo Tlenhuicani, de la UV, es presencia obligada, al igual que la Orquesta Sinfónica Daniel Ayala, de la Escuela Municipal Bellas Artes del puerto de Veracruz. Y se presentará el libro de la mujer veracruzana “Nacidas con la luna plata”.
Anilú Ingram Vallines, del puerto jarocho fue quien impulsó, desde septiembre del año pasado la creación de una comisión especial que acompañara todos los esfuerzos de los festejos, lo que finalizó en comisión de trabajo.
El presidente municipal porteño, Fernando Yunes Márquez, aprovechó su visita a España, en la Feria Internacional del Turismo, para llevar de regalo algunos libros e invitar al rey hispano a estos festejos.
Y, por supuesto, la sociedad civil que ha trabajado sin descanso por hacer de estos 500 años un hecho inolvidable.
Lo cierto es que a cómo vamos, los 500 años pueden recibir el mismo apoyo gubernamental que el Carnaval, a pesar de su trascendencia.