Después de la entrega de premios más importante en el mundo cinematográfico tenemos que hablar de ella, de su talento o la falta del mismo que han manifestado algunos, de su fama, de los estándares que ha desafiado, pero sobre todo del liderazgo y madurez que ha demostrado.
Supe de Yalitza Aparicio por una invasión mediática aún previo al lanzamiento de Roma, vi la película, misma que considero merece toda la atención por su fotografía y fidelidad a la época, soy de las que considera que posterior al lanzamiento se aprovechó la fama de su protagonista y que infinidad de medios solo se han colgado de su éxito, dando como resultado aún más fama.
Como mexicana me llena de orgullo ver triunfar a alguien que pone en alto nuestras raíces por todo el mundo, pero me preocupa en demasía nuestra doble moral, el engaño bajo el cual solo aceptamos aquello que ya pasó ciertos filtros y estándares, ¿tendría el mismo éxito Yalitza bajo el lente de otro director?, ¿Le hubiéramos alabado con el mismo entusiasmo en otro papel?, ¿Reconoceríamos la valía de nuestra cultura sin su internacionalización? Todos han aprovechado que es tema del momento, no hay revista que no la quiera en la portada, pero incluso las revistas más selectas han demostrado que el clasismo sigue presente.
La portada de la revista Hola captó la atención de los espectadores por el exceso de retoques en portada, por establecer estándares que distorsionan la realidad de los más jóvenes, quienes al ver ese tipo de portadas consideran que jamás podrían llegar a ese nivel. De ahí también el éxito de Yalitza Aparicio, ha logrado lo que parecía imposible, una mujer indígena triunfando en las grandes esferas y recibiendo la mayor atención posible.
Sin embargo aún hay quien no puede disimular la envidia, quien cree que llamarle sirvienta es una ofensa o decirle indígena cuando son estas las raíces que más orgullo le dan. Considero necesario hablar de esta mujer quizás no por última vez, porque aunque su fama me parece un aprovechamiento de la industria, considero que su manera de manejarla es un éxito para todos, su humildad y carisma es algo que debiéramos aprender más, su talento no es cuestionado y el futuro que le espera en las pantallas ella misma lo determinará.
De Yalitza hemos de aprender la valía que otorga a su origen, la manera de conducirse ante el odio de quiénes no han logrado sus triunfos y la elegante forma en la que ha centrado la atención en temas como las empleadas domésticas, la pobreza y el olvido a los pueblos indígenas. Yalitza nos devuelve la magia de nuestros pueblos, nos recuerda el esfuerzo de la gente en cada trabajo y la importancia de la aceptación personal.
Es uno de los pocos casos que no han necesitado dejar de lado su esencia para triunfar y al final nos hace ver que el éxito del cine es representar historias reales, con las cuales más de uno pueda identificarse, quizás la realidad que se retrata en roma no es la de todos pero sí es la de muchos y muchas.
Aunque la historia tenga lugar en una época anterior, hay elementos que conmueven porque se siguen repitiendo, la disminución social de la mujer, que pese a los golpes de la vida se mantiene fuerte, que resuelve y enfrenta los problemas, una mujer que evoluciona y se encuentra a sí misma para apoyar a otras mujeres, esa sigue siendo nuestra realidad como féminas, sigue siendo una lucha en la cual Yalitza es un ejemplo tanto dentro como fuera de la ficción.