Con un derroche económico acostumbrado, Enrique Peña Nieto se auto promocionó hasta su último informe de gobierno. En cadena nacional, continúa incomodando al televidente. Resulta patético. Su mundo maravilloso lo aplaudió su público a modo, porque el otro “ya sé que no aplauden”. Nunca entendió. La opinión pública que “ningún chile les embona”, ya le había juzgado como el peor presidente de México. El rechazo del 83% de la población, registró la historia que cambió al país. Maquillado como actor que es, quiso maquillarnos sus bondades. Exaltando sus supuestos méritos, como graciosa concesión cuando es un deber. Se despidió en un escenario exultante. No pidió perdón por no frenar a sus gobernadores corruptos al tope, una de las cosas que hastió. Su gabinete compuesto de jóvenes pretensiosos, aunque no supieran Ler. Vanidosos y fútiles. Déspotas y engreídos, creyeron que el poder lo podrían retener. Su estulticia no les permitió ver con claridad, que el pueblo es decisivo cuando se harta. Saturaron hasta el tope y la violencia extrema no contenida, fue la gota que derramó el vaso. Si lo hubieran realizado bien, no hubiera sido arrasado su partido y aliados. *** Para Andrés Manuel López Obrador la lealtad está primero, al designar los puestos públicos. Ese fue uno de los grandes errores, de la partidocracia hoy casi extinta. Panistas y morenistas saben ser oposición, pero no saben administrar. Por ello tienen que reciclar a priistas, aunque algunos sean nefastos. No se comprende bien esto, ya que hay ciudadanos en todas las ramas preparados académicamente. Personas dispuestas a trabajar con entusiasmo, afán de conseguir mejoría para la ciudadanía. Si insisten en imponer compromisos de campaña, la cosa se fregó. Estaríamos repitiendo el esquema, de lo que se arrasó. Existen incluso jóvenes egresados con talentos superiores, que se van al extranjero y son bien acogidos y remunerados. Genios que al no tener el reconocimiento en su país, emigran hacia otros continentes. La juventud de éste país, necesita otro tipo de apoyos. *** ¡Agarren al ladrón, grita el ladrón! Vaya pifia con Miguel Ángel Yunes Linares. Los duartistas y su jefe a un paso de salir libres. Todo fue una farsa y palanca de campaña. Son de la misma calaña. Los mismos genes. Lo que no se comprende es como el PAN nacional, que cuenta con grandes luchadores de prestigio permitan lo que hizo MIYULI en Veracruz y mantengan de presidente del partido local a un corrupto cínico. *** En mi percepción, AMLO perdió un gran apoyo político en la figura de Tatiana Clouthier. No le reconoció su gran trabajo, que mucho le ayudó. Traicionó a una familia muy estimada, en todos los círculos sociales del país. Algo hubo. *** Y para las agruras del mole…usted sabrá qué tomar. Hasta la próxima.