En política se dice que la sucesión gubernamental comienza en el primer día cuando inicia un nuevo gobierno.
No veo porqué ahora tendría que ser diferente por el solo hecho de que ganó las elecciones un nuevo partido.
En el caso de Veracruz se entendería entonces que habría que esperar hasta el próximo 1 de diciembre para dar el banderazo de salida… mediático.
Pero resulta que el gobernador electo actúa como si ya fuera el gobernador constitucional y entonces también no tendría porqué esperarse más.
¡Carajo! Y como en los mejores tiempos del PRI, ahora sí, como tenía mucho tiempo que no ocurría en el partido hegemónico (Morena ya lo es, indudablemente), la caballada para 2024 está gorda.
No se trata de hacer futurismo mediático, sino de analizar la nueva circunstancia política con elementos que ya están a la vista de quien los quiera ver.
Las circunstancias juegan y cuentan, claro está, pero si Andrés Manuel López Obrador y Cuitláhuac García Jiménez satisfacen las expectativas de sus electores y convencen a los que no votaron por ellos, entonces no se ve quién y cómo va a sacar a Morena del poder.
Pero, decía líneas atrás, la caballada morena veracruzana está gorda, y no por los kilos que se cargan encima Eric Cisneros, Rocío Nahle, Manuel Huerta… y Ricardo Ahued.
Los cuatro arrancan parejo y tienen seis años y seis meses (porque ya trotan y junto con Cuitláhuac llenan el vacío que va dejando el gobernador saliente) para crecer pero, sobre todo, para llenar el ojo del dueño del fierro marcador, AMLO.
Arrancan parejo aunque la circunstancia de cada uno respecto al nuevo futuro presidente es diferente.
¿Quién de los mencionados es el más cercano a López Obrador, lo que se podría tomar como un elemento para dar ligera ventaja?
Por lo que me han platicado quienes saben bien cómo están las cosas por dentro, el más cercano y quien gozaría de mayor confianza sería Cisneros.
Poco se sabe y sólo los morenos de la cúpula lo tienen muy presente, desde que el hoy presidente electo se viene desplazando por el Estado, en especial dos personas han sido infaltables para acompañarlo: Eric y un hermano suyo.
En ellos ha confiado y confía para que sean quienes conduzcan la camioneta en la que se desplaza. Así ocurrió en la precampaña y en la campaña presidencial.
Por eso la responsabilidad que le confirieron al de Otatitlán para que manejara la estructura electoral morena en la entidad, que cumplió con el triunfo.
Yo no dejo de ver en ese elemento el hecho de que el gobernador Cuitláhuac lo haya enfilado como su segundo de a bordo y por eso comenté en columna anterior que será un Secretario muy fuerte en lo político.
Otro cercano por vieja amistad con AMLO es el futuro súper delegado federal con estatus de virrey Manuel Huerta.
El premio mayor de una de las series políticas en juego se lo sacó, eso creo, por su lealtad a la causa del tabasqueño, tanto en las buenas como en las malas; por su trabajo a favor de quien en siempre creyó. Ha recibido ya su recompensa.
En el entorno de los políticos tradicionales veracruzanos hay quienes incluso lo ven como quien tendrá mayor peso y poder que el propio gobernador, por la magnitud del monto de los programas federales que manejará en el Estado.
En efecto, lo ven como un virrey y sé de algunos que intentar acercarse a él hasta en busca de trabajo en lugar de al gobernador electo.
Rocío Nahle, quién lo duda porque lo comprobamos en la precampaña y en la campaña, se ganó un lugar preferente con el tabasqueño y pasó a formar parte de su círculo más cercano.
De su fuerza política me dijeron que, por ejemplo, durante la precampaña y ya en la campaña incluso el propio dirigente estatal Manuel Huerta la evitaba y dejaba que ella tomara decisiones para evitar una confrontación.
Habría sido introducida ante López Obrador por parte de una distinguida integrante de la familia periodística Robles, de Coatzacoalcos. Ella aplicó bien el dicho de que a mí no me den, solo pónganme donde hay. Se metió hasta la cocina.
De la confianza que le tiene el presidente electo habla el hecho de que la convirtió en la coordinadora de la bancada de Morena en la Legislatura federal que está por irse y que ya la haya nombrado Secretaría de Energía para el gobierno que entrará en funciones en diciembre.
En la pasada campaña para el Senado tuvo un mérito: aun así fuera sola y la recibieran solo unos cuantos, recorrió todo el Estado, aunque tenía un interés también: conocer el territorio estatal y que la conocieran para lo que se ofrezca en 2024.
La sorpresa es Ricardo Ahued, el más nuevo militante de Morena de los mencionados, quien por su trabajo serio, discreto pero efectivo, de resultados, se ganó un lugar en el círculo afectivo político de AMLO durante la campaña que recién terminó.
El exalcalde xalapeño aceptó la invitación de la dirigente nacional de su ahora nuevo partido, Yeidckol Polevnsky, para integrarse al proyecto de la izquierda y así conoció al tabasqueño.
De acuerdo a quienes fueron a la campaña de Morena, a López Obrador le empezó a llamar la atención que en los recorridos que hacía le preguntaban por Ricardo y este no estaba.
Ocurrió, dan la versión, que con Cuitláhuac y Rocío habían acordado dividirse el Estado para recorrerlo en plan proselitista: uno iría al norte, otro estaría en el centro y ella se encargaría del sur.
Entonces el candidato presidencial lo llamó invitó para que se sumara en forma permanente a sus recorridos y fue recogiendo buenos comentarios sobre su persona.
Desde entonces no lo dejó de seguir y a toda la información positiva que recabó sobre él se sumó el hecho de que junto con Rocío Nahle alcanzaron el mayor número de votos que hayan obtenido candidatos al Senado, incluso que el propio candidato a gobernador ahora electo.
En las filas locales de Morena hablan de que le espera un gran futuro.
Cierran filas con Cuitláhuac
De lo que no hay duda es que tanto Eric Cisneros como Rocío Nahle cerraron filas con y alrededor del gobernador electo Cuitláhuac García.
Ello ocurrió el 27 de julio durante un desayuno privado del nuevo gobernante con los diputados electos de su partido en el restaurante Villas Margarita. Aparentemente Manuel Huerta formaría parte de otra corriente.
Me llama la atención que salvo Ahued, quien se mantiene en la mayor discreción, tanto Cuitláhuac como Eric, Rocío y Manuel, cada quien trae su propio equipo de prensa y difunde su información.
Y que aunque escaso en comparación con el del gobernador electo, el material mejor redactado, bastante bien redactado, es el de Cisneros, lo que me hace pensar que trae un equipo muy profesional.
Con el capital político que ahora tiene Morena y con su gorda caballada, no veo quién del PAN, menos del PRI, les va a disputar la gubernatura con éxito dentro de seis años, menos aún si cumplen con lo que ofrecieron y realizan un buen trabajo.
Morena, pues, arranca al trote para conservar el poder.
Nunca tantos habían estado tan cerca del Presidente
Un dato adicional es que nunca antes en la historia del Estado tantos veracruzanos integrantes del gabinete estatal habían tenido mucha cercanía con el Presidente como sucede en los hechos ahora y como se formalizará el 1 de diciembre próximo.