Argentina puso el debate en la mesa con la legalización del aborto, proyecto que aún necesita de algunos pasos para que se haga efectivo en el país. Sin embargo, con lograr vencer algunas barreras y obtener la mayoría en la cámara baja, ya se celebra un gran paso para el país y América Latina. Al menos lo celebran muchas mujeres y de inmediato vienen las críticas en contra, de instituciones Pro-vida que lo tachan de un crimen por atentar contra la vida de un humano en potencia.
En México la discusión no se hizo esperar, es común que se hable del aborto clandestino como una de las principales causas de muerte, otros grupos señalan que la despenalización del aborto en el país ha causado más muertes por las pésimas condiciones del sistema de salud, la lucha siempre es continua respecto a si se debe tener la libertad de realizarlo o no, pero creo que la lucha debería estar en otro enfoque.
La educación sexual debería inculcarse desde temprano, en el hogar y el colegio de la misma forma que se nos inculcan valores o se pretende enseñar cívica y ética. De tener las bases claras, sin mitos, sin tabús y dejando a un lado argumentos religiosos no tendríamos que preocuparnos de si las mujeres buscarán el aborto como método anticonceptivo o no. Considero que en los casos en los que una niña o mujer ha sido violada y como resultado queda embarazada, el aborto ni siquiera tendría que estar en duda, si ella así lo desea.
El aborto no es algo por lo que las mujeres luchen como una causa de felicidad, tengo la certeza de que ninguna mujer desea abortar como una medida de prevención anticonceptiva, pero si llegase a necesitar hacerlo, sería ideal poder realizarlo con la debida seguridad e incluso con el debido apoyo psicológico que se necesitará antes y después. No entraré en más detalles de si es correcto o no abortar en determinadas situaciones, porque estoy totalmente en contra de que lo hagan quienes se embarazaron en un descuido, conscientes de lo que podría ocurrir al tener relaciones sexuales, pero sí estoy a favor de una información oportuna que nos evite llegar a este punto.
El nivel socioeconómico es una de las principales causas de desinformación, no es casualidad que los estados con mayor número de muertes maternas tanto por el aborto como por embarazos prematuros sean Chiapas, Nayarit y Guerrero. Pero también en las altas esferas se suscitan embarazos no deseados y de igual manera es debido a la falta de información. Es cierto que hoy en día el acceso a la misma ha incrementado, todos los datos respecto a educación sexual están a un click de distancia, pero de igual forma rápidamente aparecen infinidad de mitos, dilemas morales y sermones que alejan a cualquiera de la información adecuada para evitar embarazos no deseados.
Conozco a infinidad de personas con un buen nivel educativo y poder adquisitivo que han aprendido de su sexualidad por mitos y recomendaciones entre amigos, muchos se hicieron padres antes de tiempo y por supuesto sabían que existía el condón, por supuesto estaban enterados de la pastilla del día siguiente y muchos otros métodos anticonceptivos, pero también creyeron que en ciertos días es imposible un embarazo, que el coito interrumpido es una de las formas más efectivas para evitar la fecundación y un montón de tonterías más que de haber sido informados de manera clara y oportuna no creerían.
El problema con la educación sexual es que aún está muy estigmatizada, a los padres les resulta increíblemente difícil hablar al respecto, a los hijos no les gusta escuchar por el abismo de diferencia entre las creencias de unos y otros, entonces al final se aprende de sexualidad entre los amigos que tampoco tienen idea, de internet en los sitios menos informados o revistas que ni siquiera se entienden. La educación sexual es la base para evitar infinidad de abortos y hacerlo legal, gratuito y seguro como se pretende en Argentina no hará que proliferen los abortos, pero sí evitará que se realicen en condiciones insalubres y clandestinas.
Hablemos al respecto, conozcamos más sobre el aborto, sus causas, sus consecuencias, tanto físicas y psicológicas, hablemos de sexualidad, pongamos el tema en la mesa, sin prejuicios y sin etiquetas, la información nos hará responsables, cuidadosos y más libres para elegir lo mejor según se requiera.